Ana Carrasco sigue adelante con su recuperación tras su grave lesión de espalda. La piloto del campeonato de Supersport300 de superbike sufrió una fuerte caída en la que se dañó dos vértebras, por lo cual tuvo que pasar por quirófano e iniciar un proceso muy largo hasta que pueda volver a competir sin riesgos.
Mientras tanto, la corredora va informando a todos sus seguidores de como evoluciona tanto de su lesión como de la enorme marca que le ha quedado en la espalda fruto de esa operación para solucionar la fractura de dos vértebras que se produjo en la pista portuguesa y por la cual tuvo que ser evacuada hasta una clínica de inmediato.
Si por algo se está caracterizando la recuperación de la piloto española es por la positividad y las ganas con las que está aceptando y afrontando este nuevo reto para intentar volver más fuerte que nunca. Así lo está mostrando a través de sus redes sociales, y es que, poco a poco, Ana Carrasco va a mejor.
La lesión que se produjo en su espalda, con fractura de dos vértebras, fue realmente grave y aparatosa, pero gracias a su esfuerzo y al trabajo de todo su equipo, está consiguiendo recortar los plazos de su recuperación, aunque el principal objetivo sigue siendo poder volver en plenas condiciones y sin secuelas.
De hecho, esta misma semana ha podido empezar ya con los trabajos de rehabilitación y fisioterapia, demostrando que todo va por buen camino y que queda ya muy poco para que poder volver a subirse a una moto. Mientras tanto, su actitud y sus ganas están marcando la diferencia.
La piloto del equipo Provec Kawasaki ofreció muy buenas noticias incluso desde el primer momento en el que se produjo su accidente, ya que estuvo consciente en todo momento y podía mover todo el cuerpo, algo que resultó clave tras haberse golpeado de una forma tan violenta en la espalda. Sin embargo, sus vértebras D4 y D6 no aguantaron el impacto, y por ello ahora Ana tiene un largo camino por delante hasta poder volver a pilotar.
Avances en la recuperación
Ana ya puede caminar hacer alguna cosas para poder volver poco a poco a su vida normal, pero lo más importante ahora es no correr riesgos innecesarios que puedan poner en riesgo su recuperación.
La piloto murciana de 23 años, que fue campeona del mundo en el año 2018, ya sueña con volver a competir y a rodar con su moto, pero es consciente de que tiene ante sí un reto casi mayor: llevar en perfecto estado su recuperación, ya que la intervención a la que se ha sometido en su espalda ha sido extremadamente delicada, por lo que no conviene intentar acelerar en exceso ciertos procesos, al menos al principio de todo.
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