El piloto español Carlos Sainz (Mini) se llevó este jueves la quinta etapa del Dakar que lo consolida como líder del rally al recuperar el tiempo de ventaja que había cedido el miércoles sobre el catarí Nasser Al Attiyah (Toyota) y el francés Stéphane Peterhansel (Mini), sus grandes perseguidores.
Por su parte, Fernando Alonso, bicampeón del mundo de Fórmula Uno, concluyó la etapa en la séptima plaza, a doce minutos de su compatriota.
Sainz sacó, en esta etapa entre Al Ula y Hail (Arabia Saudí) casi 3 minutos de ventaja sobre Al Attiyah, vigente campeón del Dakar, y más de 6 minutos a Peterhansel, el piloto más laureado del rally al haber ganado trece títulos, de ellos seis en moto y siete en coche.
El madrileño continúa así líder de la clasificación general y afrontará la sexta etapa del Dakar, que se disputará íntegramente sobre arena, con casi 6 minutos de ventaja sobre el piloto catarí y casi 18 sobre su compañero de equipo, que conduce el otro buggy de Mini en carrera.
Sainz volvió a tener un día redondo para sumar su segunda victoria de etapa en este Dakar tras la conseguida en el cuarto día de competición, lo que le sirvió para encaramarse a la primera plaza de la general.
Esta vez el español se aprovechó de que a Peterhansel le tocaba abrir pista por haber sido el ganador de la etapa precedente, con lo que en principio iba a rodar más lento, pero además el galo sufrió un pinchazo en la primera parte del recorrido que dejó la victoria del día en un mano a mano entre Sainz y Al Attiyah.
El doble campeón del Dakar (2010 y 2018) fue de menos a más y se empleó a fondo en los dos últimos sectores de la etapa en los que marcó la diferencia para terminar con el mejor tiempo del día en la categoría de coches.
Alonso, séptimo en la etapa
Alonso (Toyota), mientras, cuajó de nuevo una buena actuación a bordo de su Hilux tras superar los tres pinchazos de la jornada anterior.
Esta vez el campeón de la Fórmula 1 acabó la etapa en la séptima posición, doce minutos por debajo de la marca hecha por Sainz, lo que le sirve al asturiano para ir ganando en buenas sensaciones durante su debut en el rally más duro del mundo.
Así la carrera llegará a la sexta etapa con los tres primeros pilotos de la general con distancias ajustadas, mientras que en un segundo plano estarán al acecho el saudí Yazeed Al Rajhi (Toyota), el argentino Orlando Terranova (Mini) y el francés Mathieu Serradori (Century) que animando mucho estas primeras etapas.
Price ganó en motos
El australiano Toby Price (KTM) se adjudicó la quinta etapa del Dakar, donde el estadounidense Ricky Brabec (Honda) continuó como líder de la carrera al acabar segundo y el británico Sam Sunderland (KTM) sufrió una caída que le obligó a retirarse de la competición.
Price, vigente campeón del Dakar, sumó su segunda etapa ganada en este Dakar al ser el más rápido en los 353 kilómetros cronometrados entre las ciudades de Al Ula y Hail (Arabia Saudí), lo que le sirvió para escalar a la segunda posición de la clasificación general y situarse a apenas 9 minutos de Brabec.
La jornada fue propicia para el australiano, que fue la sexta moto en salir a la etapa y se aprovechó de las motos que abrían pista, en especial la del chileno Nacho Cornejo (Honda), ganador de la cuarta etapa, que perdió casi 15 minutos sobre Price y descendió de la segunda plaza de la general a la quinta.
La quinta etapa del Dakar
La distancia total de la quinta etapa del Dakar tenía 564 kilómetros, de los que 353 componían la especial del día, un tramo cronometrado donde los pilotos tuvieron un anticipo de las dunas que protagonizarán casi íntegramente el rally durante la segunda semana de competición.
Fue en la parte final, pues los sectores anteriores compusieron de pistas de tierra y caminos de montaña entre los múltiples cañones de las montañas rocosas y escarpadas que se encuentra en esta parte del centro de la península arábiga.
El Dakar 2020 se disputa íntegramente en Arabia Saudí, con doce etapas entre el 5 y el 17 de enero y un recorrido de casi 8.000 kilómetros, de los que mas de 5.000 son cronometrados, desde la salida en Yeda, la segunda ciudad más grande del país, hasta Qiddiya, una gigantesca ciudad de ocio que se construyera a las afueras de Riad.