Queralt Castellet (Sabadell, 1989) desborda emoción solo unas horas después de hacer Historia. No es para menos, ya que acaba de recoger su medalla en Pekín. Es la primera plata que España consigue en unos Juegos Olímpicos de Invierno. "Lo significa todo. Para mí, es un sueño hecho realidad".
16 años llevaba persiguiendo esto. Esa es, además, la edad que tenía cuando participó en sus primeros JJOO. Y con 32 -y otras cuatro participaciones a sus espaldas- logra el ansiado metal. Queralt forma parte de la exclusiva lista de españoles que consiguieron una medalla en unos Juegos de Invierno: Paco y Blanca Fernández Ochoa (oro y bronce), Regino Hernández (bronce), Javier Fernández (bronce) y la plata de la de Sabadell.
"Si una frase saco de estos Juegos es que todo lo bueno cuesta trabajo", así resume Queralt su paso por los Juegos de Pekín en conversación con EL ESPAÑOL. Su pelea empezó antes de aterrizar en China: casi perdió su vuelo desde Estados Unidos por hacerse una cuarta PCR y, para colmo, tuvo que viajar sola tras dar su entrenador positivo en Covid y quedarse su fisio en casa por problemas personales. "Ha sido un cúmulo de misiones, pero nada de lo que es bueno llega fácil", vuelve a recalcar.
Una dura pérdida vital
Su lema de esta medalla bien se puede aplicar a su historia vital. Queralt no se ha rendido en un camino que le ha llevado a competir en cinco Juegos y que en 2015 le puso contra las cuerdas. Aquel año todo se paró, incluso el snowboard. Una noticia trágica, la de la muerte de su pareja y entrenador, Ben Jolly, le sacudió cuando tenía 25 años.
A Ben le habían diagnosticado dos tumores cerebrales. Una terrible noticia que el preparador neozelandés no pudo superar tras meses de mucho sacrificio. Se quitó la vida. "Fue la situación más difícil de mi vida y estuve a punto de alejarme del snowboard para siempre", recordaba Queralt Castellet en un documental de Red Bull en 2018. "Éramos pareja y luego pasó a ser mi entrenador, mi compañero de vida, mi todo... Convivíamos juntos 24 horas al día. Lo que teníamos entre nosotros era siempre especial", decía.
Ben era el pilar de Queralt en su rutina, quien le hizo entender que algún día, con trabajo, acabaría cumpliendo su sueño de colgarse una medalla olímpica. Se conocieron cuando ella tenía 19 años. Para entonces, la rider ya se había estrenado en Turín (2006) en unos Juegos Olímpicos: "En ese momento no me lo imaginaba (colgarse una medalla), pero ahí fue donde empecé a construir este sueño y ese objetivo. De llegar hasta aquí. Y trabajar y hacer lo que haga falta, ante lo que se ponga en mi camino, para llegar hasta aquí. Y así lo he hecho", confiesa a este diario.
90.25: una nota para la historia
Más de tres lustros después se presentó en Pekín con un buen bagaje a sus espaldas: plata en el Dew Tour estadounidense y en los X-Games. Así llegó a la cita olímpica: "Iba a por todas. Venía de muy buenos resultados en las últimas competiciones, vengo de estar haciendo un running muy bueno y muy contenta de cómo estoy, de las rondas y los trucos que estoy haciendo. Sabía que si lo hacía bien, podía conseguirlo. Luego todo al final se juega en un día, con todos los factores que implica".
Ni siquiera la tensión del momento le impidió hacer lo que quería: "Los nervios han estado desde el primer día que llegué aquí. Tienes que saber que los nervios están ahí, pero hay que jugar con ellos. El día de la competición aún hay más nervios y más presión, normalmente, pero es saber llevarlo e ir con ello. Suena fácil, pero es simplemente hacerlo todo igual con los nervios encima".
Es el momento de empezar a asimilar, de empezar a absorber todo
De su memoria nunca se podrá borrar el 90.25 que puntuó para asegurarse la plata. Dos giros y medio en el aire y otro de espaldas. Una ronda maestra para hacer historia y cumplir el sueño que lleva persiguiendo desde niña. En el momento de esta charla todavía no había tenido un segundo para pararse a reflexionar consigo misma: "Aún no", dice entre risas. Y añade: "Es el momento de empezar a asimilar, de empezar a absorber todo".
La última pregunta se hace sola: ¿irá a por unos sextos Juegos en Milán 2026? "Pues seguramente, al ritmo que voy -risas-. Estoy con ganas, lo estoy disfrutando y no tengo ninguna gana de frenar este momentum que llevo", responde. Como para no. Porque, como ella misma dice, está haciendo el mejor snowboarding de su vida.
Quién es Queralt Castellet
Queralt Castellet Ibáñez (Sabadell, 17 de junio de 1989) es una deportista que compite en snowboard, especialista en halfpipe. Es subcampeona olímpica en Pekín 20222 tras haber participado en cinco JJOO de Invierno.
Sus resultados en los JJOO, en halfpipe, son: 26º en Turín 2006, 12º en Vancouver 2010, 11º en Sochi 2014, 7º en Pyeongchang 2018 y 2º en Pekín 2022.
Queralt ha ganado dos medallas en el Mundial de Snowboard, plata en 2015 y bronce en 2021. Además, suma tres medallas en los X-Games de Invierno: un oro y dos platas.
Noticias relacionadas
- Queralt Castellet, plata en Pekín 2022: quinta medalla de España en la historia de los JJOO de Invierno
- Así fue la final en la que Queralt Castellet ganó la medalla de plata en los Juegos Olímpicos de Pekín 2022
- Las mejores imágenes de la ceremonia de apertura de los JJOO de Invierno: del espectáculo tecnológico al desfile de España