En cinco días de competición hasta la fecha, los Juegos Olímpicos de Río ya han deslumbrado al mundo con actuaciones portentosas que quedarán para el recuerdo. Sin embargo, la cidade maravilhosa también está siendo testigo de la cara más dura del deporte: las lesiones.
El último caso ha sido el de Andranik Karapetyan. El halterófilo armenio se dislocó el codo izquierdo en el ejercicio de 'dos tiempos' cuando intentaba levantar 195 kilos en su segunda tentativa. El joven levantador de pesas de 20 años, que es el actual campeón de Europa en la categoría de -77 kgs, era uno de los grandes favoritos para subirse al podio.
Andranik Karapetyan accidente en las olympiadas from Red Fútbol on Vimeo.
Karapetyan consiguió cargar los 195 kgs, pero cuando intentó completar el ejercicio colocando la carga sobre la cabeza, el brazo izquierdo le falló, soltando la barra con todo el peso por detrás del cuerpo. Su codo no soportó tanta fuerza y se dislocó.
Más lesiones estremecedoras
Los primeros accidentes llegaron en la prueba de ciclismo en ruta. En la carrera femenina, la holandesa Van Vleuten se fue al suelo en una bajada a 10 kilómetros de meta. Sufrió un fuerte golpe y tuvo que ser ingresada en la UCI con fisuras en la zona lumbar de su columna vertebral y una fuerte conmoción cerebral. Por suerte, su estado ha mejorado en los últimos días.
Al día siguiente, en ese mismo descenso, el italiano Vincenzo Nibali y el colombiano Sergio Henao acabaron en el asfalto cuando enfilaban la última parte del recorrido en busca de la medalla de oro. El primero fue el peor parado, con las dos clavículas fracturadas.
Pero la lesión más escalofriante se presenció en el Arena Olímpica de Río. El gimnasta francés Samir Ait Said se partió la pierna durante un salto de potro en la fase de calificación. Unas imágenes que quitan la respiración. La mala suerte se ha cebado con Said, que en 2012 ya sufrió una triple fractura en la tibia de su pierna derecha.