El Manchester City que dirige el español Pep Guardiola se saltó en tres ocasiones las normas antidopaje de la FA -federación inglesa de fútbol- en menos de cinco meses, por lo que ya fue sancionado el mes pasado. Ahora, lo que se conocen son los motivos de la multa, que ascendió a 35.000 libras esterlinas.
La primera irregularidad ocurrió en julio de 2016, cuando Guardiola acababa de hacerse cargo del equipo. Apenas una semana después de aterrizar en Manchester, el club no informó a la FA de una sesión de entrenamiento no programada del primer equipo que tuvo lugar el 12 de julio, algo que contraviene la normativa antidopaje. En su día, el City le explicó al organismo que se debió a un error administrativo provocado por el caos de los primeros días del cuerpo técnico en el club.
Sin embargo, el artículo 14 del código antidopaje de la federación inglesa establece que todos los clubes tienen la obligación de remitir toda la información que les sea solicitada, siempre con unos contenidos mínimos: fechas de los entrenamientos, horarios de inicio y final de los entrenamientos, la dirección en que tendrán lugar esos entrenamientos y la dirección del domicilio de futbolista (o los futbolistas que sean solicitados) y de otros domicilios en los que pueda residir de forma habitual o eventual.
Precisamente este último supuesto es el que contravino el Manchester City en la segunda ocasión en que se saltó las normas antidopaje de la FA. Ocurrió el 1 de septiembre del año pasado, cuando el club facilitó una dirección de hotel errónea a la federación, quien no pudo localizar a un jugador del primer equipo (sin identificar) y no le pudo realizar el análisis previsto.
El último incidente, ya en diciembre, se produjo cuando los agentes antidopaje fueron incapaces de localizar a seis jugadores a los que tenían previsto sacar sangre porque el club decidió darles el día libre sin informar a la FA. Con el agravante de que el organismo ya había enviado al Manchester City una advertencia de sanción tras el segundo incidente en septiembre, así como una nota informativa genérica para todos los clubes en la que se recordaba la obligatoriedad de informar al detalle sobre las sesiones de entrenamiento y sus participantes.
Tras esta tercera violación de la normativa, el club fue sancionado por la FA por la reiteración, tal y como contempla el reglamento.