Steve Hodge, el hombre al que Maradona hizo rico: del dolor de Hillsborough a ganar 8,4 millones

Diego Armando Maradona sigue siendo noticia a pesar de que se haya cumplido ya más de un año y medio de su fallecimiento. En estas últimas semanas, las polémicas y rumores que han rodeado al astro argentino han estado relacionadas con una de sus camisetas más legendarias. Se trata de la que llevó en los cuartos de final de la Copa del Mundo celebrada en México en el año 1986. 

Aquel partido terminó con victoria de la selección argentina tras doblegar a Inglaterra. Diego fue el autor de los dos tantos, dos de los más recordados de toda su carrera deportiva. Maradona eligió un encuentro a vida o muerte en un mundial para anotar sus dos goles más míticos, ambos por motivos diferentes.

Uno fue anotado con el puño, la mítica 'Mano de Dios'. El '10' de la selección argentina, a pesar de su corta estatura, se alzó al cielo del Estadio Azteca para ganarle la partida a Shilton, portero británico. Sin embargo, en lugar de hacerlo con la cabeza, lo hizo metiendo el puño para empujar la pelota a la red. 

Un gol que no hubiera válido en tiempos de VAR, pero que supuso una auténtica revolución. El colegiado del encuentro no vio la infracción y dio el tanto por válido. La segunda diana del genio de la albiceleste también tiene nombre propio: el gol del siglo. Fue aquella mítica jugada con la que Diego regateó a medio equipo de la selección inglesa, arrancando desde el centro del campo y terminando por marcar a puerta vacía tras dejar atrás a Shilton. 

Tras el partido, Maradona fue el hombre más buscado del aquel día que le encumbró a los altares del fútbol mundial. Y hubo una persona que consiguió quedarse con un bien muy preciado. Se trata de la camiseta que Maradona llevó en aquel partido histórico. Fue Steve Hodge, jugador de la selección inglesa, que pilló desprevenido al 'Pelusa' mientras abandonaba el terreno de juego y le pidió una elástica que ha dado mucho de que hablar desde entonces. Después de dar mil vueltas por el mundo, Hodge decidió recientemente someterla a subasta y ha sido adquirida ahora por un valor récord de 8,4 millones de euros. 

Una decisión para la historia

Stephen Brian Hodge fue un futbolista inglés que no tuvo especial éxito en la élite. Llegó a ser profesional de primer nivel e internacional con la selección británica. Sin embargo, sus triunfos no pasaron mucho más de ahí. Pero Steve, tras aquel Mundial de México 1986, se convirtió en el poseedor de la camiseta del mejor jugador del mundo, quien había sido capaz de marcar dos de los goles más icónicos de todos los tiempos. 

El británico tuvo que hacer frente a los ataques y a la ira de sus compañeros, pero con los años, pasó a la historia por tener la camiseta de Maradona en uno de los días más impactantes de su carrera. A pesar de no contar con una trayectoria especialmente brillante, Bobby Robson decidió incluirle en la lista de 22 jugadores que viajarían para la disputa de la cita mexicana. 

A pesar de que no partió como titular en el torneo, la lesión de Bryan Robson, capitán y estrellas del Manchester United, le abrió las puertas del once en una decisión de Bobby realmente sorprendente. Steve recibió esta oportunidad con los brazos abiertos y la aprovechó con creces. Con el '18' a la espalda se convirtió en uno de los centrocampistas más en forma del momento. Esto le sirvió para ser titular en aquel mítico partido del 28 de junio en el Estadio Azteca.

Fue un partido repleto de emociones para ambos equipos y también para el propio Steve que aquel día se llevó un premio que pocas veces habría imaginado conseguir. Antes de eso, fue testigo directo de una situación casi increíble. Se trató del primer gol que consiguió Diego en aquel partido, el que anotó con la mano. Hodge estaba dentro de aquella jugada y terminó sirviéndole involuntariamente a Maradona un esférico que empujó a la red con su puño tras ganarle el salto a Shilton. El '10' intentó jugar con Jorge Valdano, que esperaba en la punta, pero Steve, al intentar despejar el balón, lo terminó echando hacia atrás provocando el desastre. 

Minutos más tarde, Hodge también vería en un lugar preferencial como Maradona arrancó desde el centro del campo para hacer la jugada de sus sueños. Esa que para muchos terminó siendo el mejor gol de la historia. Diego comenzó a limpiar defensas ingleses como el que no quiere la cosa para terminar con el balón dentro de la portería.

Gary Lineker recortó distancias, pero Argentina se llevó la victoria. Los aficionados ingleses y los jugadores de la selección derrotada se retiraron rápidamente del terreno de juego. No así Hodge, que tuvo que atender una pequeña entrevista a pie de campo. Gracias a ese retraso, al marcharse, coincidió con Maradona en el túnel de vestuarios y ahí se produjo el momento. El centrocampista inglés recordó unas palabras que le había dicho un entrenador, Brian Clough, la anterior vez que se había enfrentado a Maradona en un Nottingham Forest - Barcelona en 1984.

El técnico le dijo a sus jugadores que por qué nadie le había pedido la camiseta a Diego. Con esas palabras tan presentes, Hodge no lo dudó y se llevó de aquel día un gran premio, la mítica camiseta con la que se habían marcado el gol de La Mano de Dios y el mejor gol del siglo. Esto provocó que muchos compañeros se cabrearan con Steve ya que decían que después de una derrota así en un Mundial era algo que sobraba. Pero años después se ha demostrado que fue una decisión inteligente. 

Una camiseta millonaria

Hodge solo quería un recuerdo del día que tuvo enfrente a uno de los mayores genios de la historia del fútbol y del deporte. Sin embargo, lo que no podía sospechar es que décadas después, esa elástica iba a dar tantas vueltas e incluso iba a valer millones. Steve ha sido el dueño de aquella camiseta desde aquel Mundial de 1986 hasta esta semana, cuando se ha producido una subasta de la misma. 

Después de que durante años haya recibido multitud de ofertas por ella y de que hubiera sido solicitada incluso por la Federación Argentina de Fútbol, Hodge accedió a subastarla. Así se puso en contacto con la casa especializada Sotheby's, que ha conseguido por la prenda una recaudación récord: 8,4 millones de euros. El anterior elemento de mayor valor que había poseído esta compañía había sido el manifiesto olímpico de 1892, que se quedó en unos 60.000 euros menos. 

De esta forma, Maradona, de la mano de Steve Hodge, ha conseguido un nuevo récord incluso sin estar ya en este mundo. Lo que no se conoce todavía, y probablemente nunca sea revelado, es quien se ha hecho ahora con la camiseta, ya que la identidad del comprador ha sido ocultada. Esta icónica elástica, que ha pertenecido hasta ahora al exfutbolista inglés, estuvo durante muchos años cedida al Museo Nacional de Fútbol de Manchester. Pero este año decidió que era el momento de subastarla y el resultado ha sido inmejorable. 

Quién es Steve Hodge

Steve Hodge pasó a la historia como el jugador que se quedó con la camiseta de Diego Armando Maradona en uno de sus días más grandes como futbolista. Sin embargo, este exjugador inglés también tiene una rocambolesca trayectoria detrás más allá de sus encuentros con el 'Pelusa', que se produjeron en varias ocasiones. 

Steve Hodge arrancó sus primeros pasos en la élite en un club histórico como el Nottingham Forest, un equipo que venía de ganar dos Copas de Europa. Steve fue uno de los elegidos por Brian Clough para rejuvenecer el equipo e intentar llevarlo de nuevo a la élite después de su gesta. Un reto que para él era especial, ya que era el equipo de su ciudad, donde había nacido en 1962. Desde que era un niño, siempre había sido un gran aficionado al fútbol. Sin embargo, aunque la vida le unión a Diego Armando Maradona, su ídolo de la infancia fue Pelé, líder de la Brasil de 1970, con la que él había crecido. 

Se unió con 15 años a la cantera del Nottingham hasta que consiguió llegar al primer equipo en 1981. Creció rápidamente y pasó tres años de mucho éxito a nivel individual, convirtiéndose en un centrocampista fino y elegante con capacidad para romper por el medio. Tras deslumbrar en el equipo de su ciudad, fichó por el Aston Villa, donde las cosas no le fueron tan bien. 

Después llegó al Tottenham y sus pasos se volvieron a cruzar con el camino de Clough y del Nottingham, donde regresó en 1988. En su retorno al club de su vida, donde volvió a disfrutar del fútbol, vivió uno de los momentos más desagradables de su carrera. Al igual que en 1986 había sido testigo de las hazañas de Maradona, casi tres años después vivió en primera persona la tragedia de Hillsborough. Casi un centenar de aficionados fallecieron ante sus ojos aplastadas entre las vallas del estadio de Sheffield por culpa de una avalancha de gente en un Liverpool - Nottingham de semifinales de Copa. 

Esto supuso un mazazo terrible para el fútbol inglés y dejó profundamente tocado a un Steve Hodge que no volvió a ser el mismo desde aquel terrible suceso. Poco después abandonaría el club para fichar por el Leeds United con quien llegó a ganar una liga siendo el tercer máximo goleador del equipo. 

Tras esta aventura, la carrera de Steve se fue poco a poco apagando. Pasó por Derby County, Queens Park Rangers y Watford antes de afrontar una exótica y corta aventura en Hong Kong para terminar regresando a Inglaterra, al Leyton Orient, donde se retiró al poco de llegar casi sin disputar ni un solo minuto. Así fue como transcurrió la carrera de un Steve Hodge que siempre será el jugador que se llevó la camiseta de Maradona en el día de su mayor obra.  

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