José Mourinho puede haber cambiado mucho de equipos y de ligas, pero no pierde su esencia, ni en su fútbol ni en su forma de ser. Y si algo tiene claro es que el enemigo casi siempre es la prensa. Por ello, la mayoría de sus sonados espectáculos han estado relacionados, de una forma u otra, con los medios de comunicación.
El entrenador portugués ha vuelto a protagonizar una sonada rajada contra la prensa, esta vez en Italia, donde está llevando a cabo su proyecto en la Roma, un equipo por debajo de la línea de los conjuntos que le han llevado a ser uno de los mejores entrenadores de la historia. Lo cierto es que las últimas aventuras de Mourinho han estado alejadas de la élite que supusieron el Inter del triplete o el Real Madrid.
Fue el equipo de Milán quien provocó precisamente su cabreo después de golear a la Roma por 0-3. Tras una derrota tan dolorosa, Mourinho no estaba para muchas bromas y lo terminó pagando con el objetivo habitual de su ira, los medios de comunicación.
Las cosas no le están saliendo como esperaba en la Roma porque el equipo lleva un rumbo demasiado irregular, alternando momentos de esplendor con bajones injustificables de juego y resultados. Por eso, las críticas están empezando a aparecer con fuerza, lo que ha provocado que Mourinho estalle contra los medios de comunicación.
Tras el choque contra el Inter, su segunda derrota consecutiva, Mourinho se negó a ponerse el auricular que un periodista le facilitaba para poder responder a unas preguntas y le dejó una contestación cortante que evitaba cualquier deseo de entrevista postpartido.
El cabreo de Mourinho
"Tu trabajo es mucho más fácil que el nuestro, por eso ganamos mucho más que tú". Así arrancó el entrenador portugués la ronda de preguntas, lanzando uno de los ataques más contundentes que ha realizado desde su llegada a Italia para esta segunda etapa tras su primer paso por la Serie A con el Inter de Milán. La de ayer fue la segunda derrota que sufre en casa en Italia, contando ambas andaduras.
Sin embargo, la prensa no fue el único objetivo de sus dardos, ya que sus jugadores también recibieron su merecido después de una dura derrota, algo que no es la primera ni la segunda vez que sucede este año. Mourinho se propuso poner firme al vestuario de la Roma y, al menos con palabras, lo está intentando.
"El Inter es más fuerte que nosotros en condiciones normales. En condiciones anormales, es mucho más fuerte que nosotros. Hoy, con las lesiones y los jugadores sancionados, ha sido muy, muy difícil. Nuestro potencial de ataque era prácticamente nulo y cuando juegas con una defensa que tiene a Ibáñez y a otros jugadores en posiciones que no son las habituales, pasa lo que pasa". Así de a gusto se quedó un Mourinho que no se tomó nada bien esta dura derrota contra el Inter de Milán, que cogió moral para enfrentarse este martes contra el Real Madrid en Champions.
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