¿Puede ser este Real Madrid el mejor equipo de la Historia?

Zidane (puede) tener un dilema. Por un lado, utilizar el partido de este jueves ante el Sevilla en el Sánchez Pizjuán (vuelta de octavos de Copa, 21:15 horas) como un ensayo para el encuentro verdaderamente importante, el del domingo de Liga. El resultado de la ida (3-0) bien da para pensar en coger este camino. Por otro, salir al estadio sevillista a proteger un récord que no da títulos, pero que da más que prestigio. El Madrid está a pocos partidos de hacer más historia. 

Un partido. Eso es lo que le queda a los blancos de ser el equipo español con más partidos seguidos sin perder en toda la Historia. Solo uno. Si no cae derrotado ante el Sevilla, desempatará a 39 partidos con el Barcelona de Luis Enrique, al que precisamente Zidane le quitó la racha hace menos de un año. En caso de conseguirlo, solo dos equipos le quedarán por delante, una vez que empataría al Nottingham Forest inglés con 40 partidos: la Juventus de Antonio Conte, con 43, y el Dinamo de Zagreb, con 45. 

El Madrid igualaría los 40 partidos seguidos invictos del Nottingham Forest, conseguidos entre 1977 y 1978, años dorados de un club que más tarde ganaría dos Copas de Europa y ahora sobrevive como puede en la segunda división del fútbol inglés. Para superarlo, el Madrid deberá no perder ante el Sevilla en ninguno de los dos duelos consecutivos que tiene, este jueves en Copa y el domingo en Liga. Una vez superado la barrera del Pizjuán, todavía tendría otro récord por delante, considerado como el mejor de todos por tratarse de un equipo de una gran liga como es la italiana. La Juventus de Turín llegó a encadenar 43 partidos seguidos sin perder en la época de Antonio Conte como entrenador. Fue entre mayo de 2011, última jornada de una liga en la que quedaron séptimos, hasta mayo de 2012, justo un año después, fecha en la que acabó la racha tras perder en la final de Copa. Casualmente, la larga racha comenzó y acabó con el mismo equipo: el Nápoles. 

Pero el récord absoluto de partidos oficiales seguidos sin perder lo tiene el Dinamo de Zagreb croata que, desde noviembre de 2014 hasta septiembre de 2015, dominó en su país, de poca trascendencia en el mundo del fútbol. Es por eso que la racha del Dinamo de Zagreb es la más cuantitativa, pero no la más cualitativa. Fueron 45 encuentros consecutivos en los que no conoció la derrota, incluyendo una victoria al Arsenal en Champions, único partido verdaderamente relevante que tuvo el conjunto en el que se criaron, entre otros, Modric o Kovacic. Los demás fue ir dominando sin problemas en su liga, incluido la fase de play-offs para conocer al campeón que se hace en Croacia, y la Copa del país. Un 5-0 del Bayern de Múnich en Champions acabó con la que hasta ahora es la racha más larga de un equipo sin perder en partidos oficiales. 

Distintos registros

Una racha de imbatibilidad como estas demuestra, principalmente, una regularidad en un equipo durante un gran espacio de tiempo. Datos de este tipo puede ser la mejor manera de mostrar el nivel del equipo, aunque también hay que tener en cuenta los rivales a los que se ha enfrentado para conseguir estos datos. No es lo mismo no perder ante el Barcelona (dos veces), Atlético (otras dos), Manchester City o Borussia Dortmund, que ante equipos como el Hajduk Split o el Rijeka, los rivales más fuertes que tuvo el Dinamo de Zagreb en aquellos años. Además, si hacemos la comparativa con los primeros 39 partidos de la larga racha, situación en la que se encuentra el Madrid ahora, los datos demuestran que el equipo de Zidane mejora, con bastante diferencia, a sus 'rivales' invictos. La Juventus ganó 24 partidos y empató 15, el Dinamo de Zagreb ganó 25 y empató 14 y el Real Madrid lleva 30 victorias y 9 empates.

Si el Real Madrid de Zidane consigue el récord lo sabremos este jueves. Los blancos deben ganar o empatar en Sevilla en el partido que quizá huela más a derrota de todos los anteriores. La razón, sencilla. El Madrid viene con un 3-0 a su favor de la ida (por lo que podría perder por 1-0, 2-0, 3-1 o 4-1), ha dejado fuera de la convocatoria a Cristiano y Modric, a pesar de que Isco y James están lesionados, y el partido trascendental ante el Sevilla es el del domingo en Liga. Ya en la ida sacó Zidane un equipo en el que mezcló titulares y suplentes y aun así goleó, pero en este encuentro de vuelta tampoco está, entre otros, el que fue el mejor hace ocho días, James Rodríguez. La tensión tampoco se espera que sea la misma. Con un 3-0 a favor, no se espera grandes esfuerzos físicos y sí puede servir el partido para dar minutos a los que vienen sin jugar por sus lesiones (véase Ramos, Kovacic o Lucas Vázquez) o a los que los necesitan, como Mariano, Coentrao o Danilo.

Por fin Zidane se mojó y habló abiertamente del triplete al que sigue aspirando el Real Madrid. "El triplete es el objetivo que todo el mundo quiere y se consigue día a día, si trabajas bien  y sin pensar en ganar al final", dijo el francés. Resulta difícil no pensar en ello y más al ver el momento de forma del equipo, pero el Madrid tiene bastantes ejemplos de como se hundió a partir de marzo/abril, meses claves para conseguir tal gesta. Por ahora, Zidane se viste de Simeone y hace suyo el mensaje del "partido a partido", convirtiéndole en "día a día". Con esa filosofía, lo que afronta este jueves Zidane no es poca cosa. ¿Salir al Pizjuán a proteger el récord o a pensar en la Liga? Depende. Según él, a llegar a cuartos de Copa, que puede ser con o sin récord y con o sin mirada a la Liga. Muy zidanesco fue.