El Real Madrid volvió a hacer historia con una de esas remontadas que tan sólo puede firmar este club. Cuando parecía que lo tenía todo perdido, Joselu igualó el encuentro en el minuto 87 pero todavía quedaba un nuevo capítulo por vivir en el Santiago Bernabéu para redondear la noche mágica de nuevo con Joselu como protagonista.
Nacho combinó con Rüdiger con un pase filtrado desde la frontal del área, el central alemán puso el balón al corazón del área al primer toque y ahí apareció otra vez más Joselu para empujar y marcar.
El árbitro Marciniak, a instancias de su juez de línea, anuló el gol en un principio y dejó helado al Real Madrid y al público del Bernabéu. Decía que había fuera de juego en esta acción, pero la jugada todavía tenía que revisarse en el VAR porque era de lo más dudosa.
Podía haber fuera de juego de Rüdiger en el primer pase, algo que pronto quedó descartado, así que la duda estaba en ver si Joselu estaba adelantado en el momento de recibir el pase por parte de Rüdiger. Las imágenes mostraban lo ajustado de la acción, pero tras tirar líneas el VAR confirmó que efectivamente el delantero del Real Madrid estaba en posición correcta.
El delirio se apoderó del Real Madrid y el Bernabéu se puso patas arriba. El conjunto blanco lo había vuelto a hacer y había logrado el pase a la final de la Champions League en otra noche para el recuerdo.