La defensa de Rubén Rivera insiste en que no ha vuelto a mantener contacto con la Selección

El caso Rubiales sigue su curso. Después de que el juez viera motivos para juzgar a Luis Rubiales, Jorge Vilda, Albert Luque y Rubén Rivera, la AFE solicitó que este último, el director de marketing de la RFEF, no tuviera ningún tipo de contacto con la Selección española femenina.

Ante esta situación, la defensa del propio Rivera comunicó que su defendido no ha vuelto a tener relación alguna con la Selección femenina desde la victoria en el pasado Mundial de Australia y Nueva Zelanda, y que además el auto al que se refiere al AFE para realizar esta solicitud ha sido revocado.

Los abogados de Rivera sostienen que hay una clara falta de hechos delictivos imputables a su actuación. Recuerdan además que Jennifer Hermoso declaró que el director de marketing tan sólo había hablado con ella un único día, y que la conversación fue para entregarle un teléfono móvil, ya que el suyo no tenía batería. 

El jefe de Márketing de la RFEF, Rubén Rivera, en la Audiencia Nacional. Europa Press

Destacan desde el lado de Rivera que Hermoso declaró ante el juez que "Rubén nos asistía. Nunca me dijo que quería que saliera en un vídeo o hiciera una videollamada", desmontando así la teoría de que presionó a la futbolista.

La defensa del director de marketing de la Real Federación Española de Fútbol cuenta además que la labor que desempeñó Rivera durante su estancia en Ibiza no fue la de presionar a Jenni Hermoso, sino que hizo de intermediario entre la RFEF y las instituciones baleares. De esa forma, gestionó y coordinó los eventos y las visitas oficiales de las jugadores y les facilitó su estancia en la isla.

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Por otra parte, los mensajes de WhatsApp arrojaron una relación cordial entre ambos, en la que Rivera gestionaba diferentes solicitudes de la futbolista como la compra de un bikini o el acceso a unas discotecas.

Presiones posteriores

A finales del pasado mes de enero, sin embargo, el juez de la Audiencia Nacional Francisco de Jorge propuso juzgar a Luis Rubiales por el beso "no consentido" y también apuntó que veía indicios para sentar en el banquillo a Albert Luque, Jorge Vilda y Rubén Rivera. 

El juez indicó que de vuelta a España, fue Rubén Rivera el que, por medio del encargo de Luis Rubiales, "pidió a Jennifer Hermoso, de manera reiterada y persistente, que hablase por teléfono con el responsable de integridad de la Federación".

De Jorge contó que Rivera "le insistió en que debía participar en el vídeo exculpando a Luis Rubiales", y también "le insistió de manera reiterada para que hablase con Albert Luque, también con la intención de insistirle para que participara en el vídeo".