La selección española está haciendo historia en el Mundial de Australia y Nueva Zelanda. Las chicas de Jorge Vilda rompieron por primera vez la barrera de los octavos de final y ahora parecen no tener límites. El último escollo para llegar a la final será Suecia, una potencia del fútbol femenino pero a la que le persigue una maldición en los últimos años.
El combinado nórdico está acostumbrado a disputar fases finales. Sin embargo, colapsan cuando llegan a las semifinales de un gran torneo. El dato que refrenda esto es que de las últimas cinco 'semis' que han disputado las han acabado perdiendo.
Las cinco derrotas han llegado en este siglo pero, si nos remontamos a los últimos años de la década de los 90, encontramos dos nuevos tropiezos de Suecia en la antesala a una final internacional.
[La pizarra de España contra la cabeza de Suecia por un billete a la final del Mundial femenino]
Mundiales y Eurocopas
La historia negra de Suecia con las semifinales no solo se han producido en una Copa del Mundo, donde le ha ocurrido en dos ocasiones, sino que también se traslada a las Eurocopas. Allí el combinado sueco ha perdido las tres últimas semifinales que ha disputado.
Para encontrar la última derrota de las chicas de Peter Gerhardsson no hay que irse demasiado lejos. Ocurrió el pasado verano durante la Eurocopa disputada en Inglaterra. Las suecas quedaron primeras de grupo y eliminaron a Bélgica en cuartos de final. En las 'semis' les esperaba Inglaterra, que venía de vencer a España, y no tuvieron piedad. Las anfitrionas golearon por 4-0 a Suecia y posteriormente se proclamaron campeonas.
Aquella derrota fue un palo muy duro para las suecas. Una vez más se quedaban a las puertas de la final como también les ocurrió tres años antes en el Mundial de 2019. En aquella ocasión pasaron como segundas de grupo por detrás de Estados Unidos y se impusieron a Canadá y Alemania en octavos y cuartos.
Disputaron las semifinales ante los Países Bajos y acabaron sucumbiendo con un tanto de las neerlandesas en la prórroga. Su consuelo fue vencer a Inglaterra en el partido por el tercer puesto.
Stina Blackstenius, con la selección de Suecia de fútbol femenino en la Eurocopa 2022
Estos casos son los más recientes, pero en 2011 y 2013 a Suecia le ocurrió exactamente los mismo. Primero perdió en las sefiminales del Mundial y dos años más tarde hizo lo propio en el Europeo.
El Mundial de 2011 tan solo contó con cuartro grupos, por lo que no se disputaban los octavos de final. Suecia quedó primera por delante de Estados Unidos y se deshizo con facilidad de Australia en cuartos. Sin embargo, en las 'semis' ante Japón perdieron por tres goles a uno. Les tocó disputar la final de consolación ante Francia y la ganaron por la mínima.
Dos años más tarde, actuaron como anfitrionas en la Eurocopa de 2012 y volvieron a tropezar con la misma piedra. Golearon a Islandia en los cuartos de final, pero posteriormente perdieron por la mínima ante Alemania. Un año más se quedaban sin el premio de disputar una final.
Para encontrar el origen de la maldición hay que remontarse a 2005. En aquella época tan solo había dos grupos por lo que, una vez superada la primera fase, se accedía directamente a sefiminales. Suecia lo pasó mal para acceder a ellas, pero lo acabó consiguiendo después de sumar 5 puntos. En 'semis' le esperaba Noruega que se acabó llevando el gato al agua en la prórroga.
En la década de los 90 Suecia también cayó en dos ocasiones en semifinales. Ocurrió en el Mundial de 1991 y en la Eurocopa de 1997. Sin embargo, a principios del siglo XXI lograron un subcampeonato del mundo. Fue en 2003 y perdieron 2-1 frente a Alemania en la prórroga.
Exigencia para España
El mal de ojo de la selección sueca en las semifinales de los grandes torneos puede ilusionar al aficionado español más supersticioso. Lo que está claro es que Suecia es uno de los combinados más potentes del mundo y será un hueso muy duro de roer para España.
Las nórdicas está firmando una Copa del Mundo prácticamente impecable. A expeción de un partido, que se acabaron llevando desde la tanda de penaltis, han ganado todos. Y lo han hecho con mucha solvencia ya que tan solo han encajado dos goles en cinco encuentros.
En la fase de grupos comenzaron a mostrar su potencial tras vencer a Sudáfrica y Argentina y golear a las italianas. En octavos llegó su enfrentamiento ante las grandes favoritas, Estados Unidos. Disputaron un choque muy serio y se acabaron clasificando en la tanda de penaltis. Ya en 'semis' ganaron 2-1 a Japón, único equipo que ha conseguido vencer a España en el Mundial.
Las jugadoras de Suecia celebran el pase a los cuartos de final.
Mientras tanto, las de Jorge Vilda han crecido a lo largo del torneo, como grupo y desde la pizarra. Pocos juegos hay tan completos como el español. En cambio, Suecia pone todas sus fichas en el juego aéreo y las acciones a balón parado. Ahí ellas son prácticamente inalcanzables.
En el arsenal aéreo de las escandinavas, un nombre resalta por encima del resto: Amanda Ilestedt. A pesar de ser central, la futbolista de 30 años pelea por la Bota de Oro del Mundial. Cuatro goles ha marcado en cinco partidos y todos ellos de la misma manera: de remate en saques de esquina.
Stina Blackstenius, su compañera también en el Arsenal, y Fridolina Rolfö, delantera del Barça que conoce a gran parte del vestuario español, son las otras referencias de la semifinalista.
Será un duelo complicado para las españolas. Pero también lo será para Suecia que se medirá ante una de las mejores selecciones en este Mundial y tendrá que hacer frente a la maldición que le acompaña en las últimas semifinales.