El dinero sigue cambiando el mundo de fútbol tal y como lo conocíamos hasta ahora a pasos agigantados. La entrada desmedida de los petrodólares hace mella en el ecosistema del deporte rey y ante los ojos de todo el planeta surge el poderío de Arabia Saudí, que quiere convertirse en toda una potencia del deporte rey.
En el país asiático no tienen reparo en seguir con su lluvia desmesurada de millones y están decididos a ponerse en el primer nivel futbolístico a base de fichajes estelares. En los últimos meses se ha producido la llegada a la liga árabe de nombres de la talla de Cristiano Ronaldo o Karim Benzema con ofertas multimillonarias para sus últimos años de carrera, pero ahora otro futbolista del primer escalón está dispuesto a dar el paso y marcharse a Arabia a jugar.
Se trata de Bernardo Silva. El futbolista del Manchester City tiene prácticamente cerrada su marcha al fútbol árabe, así que en los próximos días se confirmará su marcha del equipo que acaba de ser campeón de Europa para jugar en una liga mucho menos competitiva, al menos hasta el momento.
Este fichaje será todo un golpe encima de la mesa del fútbol árabe y un serio aviso al mundo de que el dinero del estado puede prácticamente con todo lo que se proponga. Bernardo Silva no es ni mucho menos un jugador en declive que quiera irse a Arabia a vivir los instantes finales de su carrera deportiva. Se trata de uno de los mejores futbolistas del mundo que está dispuesto a cambiar la élite europea por una liga en la que el nivel es mucho menor.
Bernardo Silva llegó al Manchester City en 2017 procedente del Mónaco, y desde entonces se ha labrado una exitosa trayectoria en el equipo inglés, donde ha sido una pieza muy importante para Pep Guardiola. Su obra la culminó esta misma temporada con el triplete, al ganar Champions League, Premier League y FA Cup.
Arabia Saudí asusta
Los movimientos que está llevando a cabo en los últimos tiempos Arabia Saudí amenazan con cambiar el orden internacional del deporte rey en el mundo. Con el estado detrás potenciando las grandes inversiones de los principales clubes (Al-Nassr, Al-Ittihad, Al-Hilal y Al-Ahli), sus cuentas bancarias se han convertido en un talón con fondos inagotables capaces de convencer a cualquiera si finalmente se llevan a Bernardo Silva.
El portugués acompañaría de esta manera en la misma competición a Cristiano Ronaldo y a Karim Benzema, las dos grandes incorporaciones de los últimos meses. Ambos se encuentran ya en el final de sus carreras deportivas, con la treintena más que sobrepasada, pero la edad de Bernardo Silva, con tan sólo 28 años, augura un cambio de aires en el panorama.
Arabia Saudí no se va a quedar aquí. Quiere realmente hacer de su liga una competición que centre las miradas de todo el mundo, y al fichaje de Kanté también esperan sumar otros al margen del de Bernardo Silva. Koulibaly, Thomas, Ziyech, Brozovic o Rúben Neves son otros de los nombres que suenan con fuerza para hacer las maletas y seguir plagando de estrellas el firmamento de la liga saudí. Todo ello, antes de apostar firmemente por albergar el Mundial de 2030.