Situado a la derecha del líder. Así es como aparece Rafael Yuste i Abel en la página web del FC Barcelona en la foto que preside el apartado para dar a conocer a la junta directiva de Joan Laporta. Este empresario y consultor se ha convertido en uno de los rostros más conocido del equipo del presidente tras sus continuas apariciones en los medios. Siempre en segundo plano, pero controlando desde la sombra y moviendo los hilos del nuevo Barça.
Desde aparecer en actos institucionales del club hasta realizar viajes de pura índole deportiva, el radio de acción de Yuste en el nuevo Barça es muy amplio, se podría decir que ilimitado. Por ello, en una de las épocas más complicadas en la historia de la entidad, no está nada mal conocer un poco más a una de esas personas que no suelen acaparar protagonismo, pero cuyas decisiones también marcan el rumbo del equipo.
Rafa Yuste, plenos poderes
Es una realidad tozuda que en este nuevo Barça hay personas con plenos poderes y cuyas decisiones son trascendentales para el futuro de la entidad tanto en el punto de vista económico como en el deportivo. En primer lugar se sitúa, obviamente, Joan Laporta, pero detrás tiene a un equipo importante que también mueve los hilos desde la sombra.
Algunos están más cerca de la plantilla como es el caso de Ramón Planes, secretario técnico, mientras que otros están más pendientes de las cuentas como Eduard Romeu, vicepresidente económico. Además, vamos conociendo cada vez más a figuras como Elena Fort, vicepresidenta del área institucional, y seguimos teniendo presente a personajes como Mateu Alemany, nuevo director de fútbol.
Junto a todos ellos ha hecho algunas apariciones en los últimos meses Rafa Yuste, el vicepresidente del área deportiva del club. Su figura en el Barça es ahora mismo fundamental y es que la entidad azulgrana atraviesa tiempos de mucha gestión y de estar inmerso en operaciones que van desde negociar traspasos, renovaciones y ventas, hasta analizar la situación financiera del Barça.
En todos estos procesos y en alguno más como en la ruptura con LaLiga por el pacto con CVC ha estado presente el propio Yuste. Sus últimas intervenciones han tenido que ver con la destitución de Ronald Koeman y con esos viajes a Qatar para tratar de avanzar lo máximo posible fichaje de Xavi Hernández como nuevo entrenador del Barça. Así de importante es la figura de Yuste dentro del organigrama actual.
El apoyo de Laporta
Además de su labor administrativa como miembro de la junta directiva del FC Barcelona, la de Yuste es una función mucho más personal que la de otros miembros del equipo. Se trata de uno de los hombres de peso que rodean a Laporta, con voz, voto y mando en el club y que juega un papel fundamental en el día a día del presidente en la época más complicada del club.
Rafa Yuste nació en el año 1962 y desde muy pequeño se convirtió en uno de los amigos inseparables de Joan. Juntos hicieron buenas migas en el colegio y desde los Maristas salieron sin saber que décadas después tendrían en sus manos el control del club de sus amores. Desde los seis años forjaron una férrea amistad que les ha llevado a compartir muchos momentos de sus vidas.
El uno con el otro han vivido situaciones tan especiales como presenciar juntos la primera victoria del Barça en la Champions en el Estadio de Wembley, en el año 1992, disfrutando de un Ronald Koeman que por aquel entonces era el héroe y no el villano. Ya en otra situación personal y profesional, presenciaron también las conquistas de París y Roma durante la primera presidencia de Laporta.
Efectivamente, ambos formaron equipo en la primera etapa del abogado catalán al mando del club y ahora, tras la nueva llegada al poder de Joan, vuelven a formar tándem. Sin embargo, la importancia ganada por Yuste en este segundo ciclo es mucho mayor debido a los problemas del club tanto en el ámbito deportivo como en el económico. Laporta considera al empresario catalán como una de las personas que puede impulsar la recuperación del club y la superación de la crisis actual.
Escalada al poder
A pesar de que Rafa Yuste y Joan Laporta han sido amigos y casi inseparables durante toda la vida, la importancia en sus equipos ha ido acrecentándose con el paso del tiempo y con el devenir de los acontecimientos. Por unas cosas u otras, siempre se han ido produciendo ciertas circunstancias que han derivado en una escalada hacia el poder de un Yuste que ahora mismo es una de las manos más potentes de la junta directiva.
Yuste entró en la junta directiva de la primera presidencia de Laporta a finales del año 2005 a pesar de que Joan llevaba ya siendo presidente del Barça durante dos años. El empresario fue acercando poco a poco su línea de trabajo a la del propio Laporta, ganando importancia tras las salidas del equipo de dos personajes realmente relevantes en su historia y en la del club: Sandro Rosell y Josep Maria Bartomeu.
Su escalada fue en aumento ya que en la recta final del mandato de Joan, consiguió ocupar un cargo de relevancia máxima como lo hace en día. A partir de 2008 y hasta el año 2010 se convirtió en el vicepresidente de la área deportiva. Esa fue su verdadera llegada al éxito, ya que desde ahí pudo empezar a orquestar sus mayores obras en el club.
Sin duda alguna las más recordada fue la de apostar por el fichaje de Pep Guardiola como entrenador tras la destitución de Frank Rijkaard. Dos años en blanco y un vestuario podrido y destrozado dejaron al Barça con la obligación de llevar a cabo una revolución.
Y ahí entró la voz y el mando de Yuste que, previo consejo de Evarist Murtra, antiguo directivo ahora partidario de Victor Font, apostó por la subida del técnico de Santpedor del filial del primer equipo. Laporta, que no estaba convencido de la decisión, terminó accediendo dejando su destino en manos de su amigo de la infancia. El resultado, de sobra conocido por todos, fue una temporada histórica para el Barça.
Sin embargo, esta no fue la única acción relevante que consiguió Yuste tras su escalada al poder, ya que también fue el actor principal que consiguió que el Barça estampara en su camiseta la publicidad de UNICEF, un patrocinio que le reportó al club una gran imagen internacional.
Era la primera vez que el FC Barcelona llevaba algún tipo de inscripción en la parte central de su camiseta en un acuerdo de lo más insólito ya que no le reportaba al club, al menos de forma directa y declarada como tal, un beneficio económico, sino que simplemente era la asociación de la entidad azulgrana con la organización de ayuda humanitaria de la ONU.
Además, tras la ratificación de este acuerdo impulsado por Yuste, el Barça se comprometía a donar de sus arcas cada temporada un millón y medio de euros para diferentes proyectos de ayuda social. A la larga, la entrada de UNICEF en la equipación del Barça fue la puerta que necesitaba el club para abrirse a esta forma de ingresos que hasta entonces no habían explotado para "no manchar su camiseta".
Da a casualidad de que el club se encuentra en estos momentos en una situación muy similar a las dos en las que Yuste fue clave, sin un entrenador y con la necesidad de encontrar al nuevo Guardiola, esperando que ese sea Xavi Hernández, y con la emergencia de encontrar un nuevo patrocinador que aporte dinero a las diezmadas arcas del club tras la finalización de su relación con RAKUTEN, cuyo contrato termina próximamente.
Un empresario con sombras
En paralelo a su vida dentro del Barça, Rafa Yuste ha construido también otros imperios que le han permitido destacarse como una persona importante y relevante en la sociedad de Barcelona y de Cataluña en general. Destaca por sus éxitos como empresario, experto en mercadotecnia y también como consultor en varios negocios que han adquirido un volumen mundial.
Ha sido parte fundamental de grandes empresas como EADA, grupo Balius-Dagas, Menerva, Rayuab, Metro House Invest y NERA Global SL. Actualmente, sus últimos movimientos figuran en relación a la labor de apoderado de esta última y como administrador único de Menerva Global Marketing y accionista de otras dos sociedades, Rayuab y Aqipa Iberia.
Sin embargo, no todo han sido éxitos en estos años, ya que también hay sombras. Una de ellas precisamente está ligada al Barça, ya que Yuste fue uno de los señalados por la acción de responsabilidad social impulsada por la junta que presidía Sandro Rosell que reclamó 47,3 millones de euros en presuntas pérdidas a la anterior equipo directivo.
Estos fueron exonerados en el año 2017 por la Audiencia Nacional saliendo vencedores de un caso que aun así les había dejado marcados. Junto a Laporta y Yuste también se encontraban otros miembros presentes en el actual junta como Josep Ignasi Macià y Elena Fort. Sin embargo, el capítulo más negro de Yuste ha sido su relación con el escándalo del Reus Deportiu.
Detrás del hundimiento financiero y social de una entidad histórica se encontraba la compañía Core Store SL. Aunque el máximo responsable era Joan Oliver, Yuste también pertencía a la sociedad que era propietaria del club al que terminó llevando al desastre. Esta empresa fue fundada por el propio Yuste, por su amigo Laporta, por Joan Oliver y por Xavier Sala i Martí, quien ya no forma parte del equipo del presidente. Tras contraer una deuda de más de cinco millones de euros, terminaron abocando a la institución a su final más dramático, sellando así también el capítulo más oscuro de la trayectoria deportiva de Yuste y Laporta fuera del Barça.
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