Eduard Romeu, vicepresidente económico del FC Barcelona y peso pesado en la Junta Directiva de Joan Laporta, ha matizado sus palabras donde destacaba que el club contaba con 20 millones para fichar en el mercado de invierno. Además de dar prioridad a seguir rebajando la masa salarial, el dirigente culé mostró el total compromiso del club con una Superliga que "no ha muerto" sino que cambiará algunos detalles.
El vicepresidente azulgrana, que horas antes había mostrado su confianza en poder abordar varios fichajes en enero con esos 20 millones de euros, rectificó durante una entrevista en Rac-1. Romeu aseguró que "la prioridad es la reducción de la masa salarial" y que la "segunda palanca" para su mejora económica es "el incremento de los ingresos". "En estos momentos tenemos que resolver muchas más cosas antes que poder fichar", ha dejado claro tras la euforia inicial.
Romeu, además, ha confirmado que el Barça tiene "un proyecto a largo plazo" y que por ello muestran "confianza en Ronald Koeman". "Estoy seguro de que vamos a ganar los próximos tres partidos", ha espetado ilusionado sobre los encuentros tras el parón de selecciones.
Respecto a los aspectos puramente económicos, el representante culé ha asegurado que los números que presentarán a la Asamblea serán "muy conservadores". Romeu ha desvelado también que han pedido a LaLiga "el valor de mercado de algunos jugadores" porque "se han dado valores que no son del todo reales". Sobre el crédito pedido a Goldman Sachs, ha concluido que "hay muy poco riesgo" porque han "calculado unos treinta años".
Apoyo a la Superliga
La nueva competición impulsada por 12 grandes clubes de Europa quedó tocada tras la agresiva reacción de UEFA, ligas y hasta gobiernos nacionales. Tanto que apenas unas horas después del anuncio todos los equipos, a excepción de Real Madrid, Barcelona y Juventus, abandonaron el proyecto con sendos comunicados. Un gesto que la UEFA vio como un éxito pero que, hasta el momento, no ha sido tal.
La Justicia está dando las últimas victorias a la Superliga y ha obligado a Aleksander Ceferin a eliminar las sanciones anunciadas a los clubes participantes. Una decisión que tomó a última hora para evitar acometer un delito de desobediencia. Por todo ello, la Superliga continúa con vida.
Eduard Romeu, en la misma entrevista, ha subrayado que "la Superliga no ha muerto" y que "lo que es cierto es que habrá que cambiar el formato". "Ha de ser una estrategia mucho más tranquila y consensuada. Nosotros participamos en las conversaciones y nos gusta tener el liderazgo", ha reconocido durante la charla demostrando que tanto el Barça como los otros dos clubes continúan comprometidos con el proyecto anunciado el pasado abril.
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