La final de consolación no motivaba demasiado ni a Italia, ni a Bélgica, pero la condición de local de los transalpinos fue un motivo suficiente para tratar de ser tercero en la Nations League. La selección de Roberto Mancini se llevó el choque ante los de Martínez gracias a dos tantos en la segunda mitad, uno de Barella y otro de Berardi, tras un penalti muy discutido sobre Federico Chiesa. Charles De Ketelaere hizo el tanto de la honra para los belgas. [Italia 2-1 Bélgica: Narración y estadísticas]
La 'Azzurra', anfitriona en esta 'final four', fue superior y pudo brindar este tercer puesto a su afición. Aunque se jugaban la honra, Mancini en la previa ya dejó claro por qué era importante este encuentro: "El partido de mañana también es importante para reforzar nuestra posición en la clasificación". Al tratarse de un partido oficial, el resultado afecta en el ránking FIFA con el que, por ejemplo, se determinan los cabezas de serie para el próximo Mundial.
Un choque que empezaba descafeinado en las alineaciones. Los flamencos salían sin Eden Hazard y Romelu Lukaku, que estaban de vuelta a Madrid y Londres respectivamente. Tampoco era titular Kevin de Bruyne, que en la segunda parte dejó su impronta en el encuentro cuando salió. Por su parte, Italia saldría con una alineación alternativa, sin grandes estrellas como Lorenzo Insigne, Marco Verratti, Jorginho o Giorgio Chiellini.
A pesar de esa premisa de Mancini, la primera parte dejó la sensación de que no había tanto en juego. Italia jugaba en casa y por eso salió con algo más de ganas que Bélgica, pero tampoco mucha intensidad en su juego. Todo lo que ocurrió se resumía en dos acciones: un disparo de Saelemaekers que se estrelló en el larguero y un mano a mano de Chiesa que Courtois salvó en el último instante. La emoción quedó para una segunda parte más intensa.
Los goles
En la reanudación, Italia lograría ponerse por delante en el marcador gracias a un gran tanto de Nicolò Barella, con un remate desde el filo del área, imparable para Courtois. Aparecía el futbolista del Inter de Milán, otro de los grandes nombres que tiene esta selección. Duro golpe para el combinado de Roberto Martínez, que fue despertando poco a poco hasta responder con otro disparo al larguero, esta vez de Batshuayi.
El partido pasó de lo que pudo ser el empate, al 2-0. Castagne derribó dentro del área al agitador Chiesa y el colegiado no dudó a la hora de señalar el punto de cal. El VAR ratificó su decisión, aunque las quejas de los futbolistas belgas evidenciaban las dudas que habían sobre la acción. Berardi no falló con un tiro potente al que llegó Courtois, pero la dureza del disparo impidió que el guardameta belga pudiera detenerlo.
A la desesperada, Bélgica buscó la remontada como hiciera Francia en su partido de semifinales. Donnarumma se erigió como un muro infranqueable. Le sacó una mano providencial a Alderweireld cuando restaban 20 minutos para que se llegase al pitido final. El mismo protagonista se topaba con el guardameta del PSG unos minutos después tras una excelente volea. Caería la resistencia en una contra que arrancó Courtois, De Bruyne la dirigió y De Ketelaere sentenció batiendo entre las piernas al portero transalpino.
Italia 2-1 Bélgica
Italia: Donnarumma; Di Lorenzo, Bastoni, Acerbi, Emerson; Barella (Cristante, m.70), Locatelli, Pellegrini (Jorginho, m.70); Chiesa (Bernardeschi, m.91), Raspadori (Kean, m.65), Berardi (Insigne, m.91).
Bélgica: Courtois; Alderweireld, Denayer, Vertonghen; Castagne, Tielemans (De Bruyne, m.59), Witsel, Saelemaekers (De Ketelaere, m.59); Carrasco (Trossard, m.86), Batshuayi, Vanaken.
Goles: 1-0, min. 46, Barella; 2-0, min. 64, Berardi (p.); 2-1, min. 86, De Ketelaere.
Árbitro: Srdjan Jovanovic (SER). Mostró cartulina amarilla a Di Lorenzo (min. 30) y a Emerson (min. 82), de Italia, y a Vertonghen (min. 14), Witsel (min. 56) y Alderweireld (min. 63), de Bélgica.
Incidencias: Final por el tercer y cuarto puesto de la Liga de Naciones UEFA disputado en el Juventus Stadium de Turín (norte) ante cerca de 18.000 espectadores.