La UEFA Nations League no es una Eurocopa o un Mundial, pero es un título. Por eso esta renovada España de Luis Enrique soñaba con ganar como lo hizo la Selección entre los años 2008 y 2012, sin embargo, habrá una década de sequía como mínimo. Francia se llevó la final con una genialidad de Benzema y un polémico gol de Mbappé en posible fuera de juego.
Eric García tocó la pelota, pero Mbappé partió adelantado. España no pudo reaccionar ya y cayó derrotado por una regla absurda. No sufrió la Selección de Luis Enrique hasta que el encuentro se descontroló y ahí la calidad de Benzema y de la estrella del PSG marcó la diferencia.
El partido tuvo dos partes bien diferenciadas. La primer fue aburrida y de control español, pero sin ocasiones. Y la segunda, divertida y con goles. La Selección se adelantó con un golazo de Oyarzabal, pero acto seguido empató Benzema con una obra de arte. La rápida reacción francesa y el tanto de Mbappé en el tramo decisivo del encuentro noquearon a España.
Luis Enrique apostó por el mismo once que le dio el pase a la final con las únicas novedades de Eric García y Rodri por Pau Torres y Koke. Deschamps también hizo dos cambios respecto al partido contra Bélgica y apostó por Tchouameni para sustituir a Rabiot, baja por Covid, y por Kimpembe en lugar de Lucas Hérnandez.
España se hizo con el control de la pelota desde el comienzo y controló a una Francia que buscaba hacer daño a la contra. La velocidad de Mbappé, Benzema y Griezmann no iniquietó en la primera parte al equipo de Luis Enrique. Solo una oportunidad de Benzema, que partió en posible fuera de juego, inquietó a un Unai Simón que entró más en juego con los pies que con las manos.
Poco más dio de sí un primer acto en el que la Selección no tuvo ninguna ocasión de gol. Si se reclamó un penalti por mano de Koundé tras un centro de Rodri, pero con las reglas actuales ya no se sabe bien cuándo es y cuándo no. La mala noticia para Francia llegó en forma de lesión antes del descanso. Varane se tuvo que retirar por un pinchazo en el muslo y Upamecano entró en su lugar, manteniendo así Deschamps la defensa con tres centrales.
Locura y gles
Las hostilidades entre uno y otro equipo llegaron en una segunda parte mucho más divertida. Luis Enrique metió al joven Yeremy Pino para tener más desborde y llegada al área, pero Francia casi saca petróleo tras una pérdida del jugador del Villarreal. Contra rapidísima, Busquets no consigue derribar a Pogba, y Theo Hernández acaba mandando la pelota al larguero.
Ese minuto, el 64, sería clave en el partido, ya que del larguero de Francia se pasó al gol de España. Pase alto en profundidad de Busquets a Oyarzabal y el futbolista vasco se faja bien con Upamecano para ganarle la lucha y cruzar el balón fuera del alcance de Lloris. Golazo y la selección de Luis Enrique que había logrado lo más difícil.
Sin embargo, poco duró la alegría a España. En la siguiente jugada Benzema se sacó un disparo con rosca a la escuadra para poner el 1-1 en San Siro e igualar de nuevo la final. El delantero del Real Madrid sigue dando argumentos a los que defienden su candidatura para el Balón de Oro de este año. De golazo a golazo y el partido que había entrado en una fase de locura continuada.
Y en el caos fue Francia quien reinó. Y con mucha polémica. En el minuto 80 un pase en profundidad para Mbappé sirvió para que la superestrella deseada por el Real Madrid se deshiciera de Unai Simón con tranquilidad y marcara el 1-2. El gol parecía que iba a ser anulado porque Mbappé arrancó en posición adelantada, sin embargo, el árbitro y el VAR entendieron que Eric García tocó la pelota y eso hizo que habilitara la posición del delantero galo.
Sea como fuere, el gol de Mbappé fue la sentencia para una España que aun así tuvo el empate en las botas de Oyarzabal y Yeremy Pino. Sin embargo, Lloris apareció para acabar por romper el sueño de la Selección.