El Sevilla comenzó la temporada liguera con una victoria cómoda ante el Rayo Vallecano. El conjunto madrileño, recién ascendido, cometió varios errores que acabaron condenándoles a la derrota en el Sánchez Pizjuán. El estadio hispalense, uno de los más representativos del fútbol español, volvió a cantar el himno con alguna que otra lágrima en la grada.[Narración y estadísticas: Sevilla 3-0 Rayo Vallecano]
La imagen no podía ser más emocionante. Un partido de estreno liguero vestido prácticamente de Champions League. El público del Pizjuán, dejándose la garganta, rompía el silencio de los últimos meses con el himno del equipo. Y la plantilla de Lopetegui, con En-Nesyri a la cabeza, ansiosa por dedicar más de un tanto a los suyos.
El duelo comenzó atractivo por parte de ambos equipos. El Sevilla apostó por esas habituales combinaciones rápidas para castigar desde el costado o la frontal del área. El Rayo, por su parte, se centró en buscar la calidad técnica de Isi, que las pocas veces que pudo colarse en zona de peligro se encontró con Koundé. Las tablas eran justas.
Sin embargo, el Rayo se condenó a la derrota pasado el primer cuarto de juego. Un balón al área forzó el error de Luca Zidane en portería y el Rayo dijo adiós a sus opciones. El guardameta cometió penalti, recibió roja y el cuadro madrileño encajó gol. El peor combo posible en el peor campo posible. En-Nesyri no perdonó y colocó el 1-0 en el 16' desde el punto de penalti.
El partido ya se había roto por completo. El Rayo tenía que defenderse y racionalizar sus energías para, con uno menos, tener la opción de alcanzar el empate. Isi continuó con el protagonismo ofensivo y el Sevilla, con muchos más espacios en el terreno de juego, intentaba sentenciar a la contra. Sin embargo, entre la falta de acierto arriba y las pausas de hidratación, la primera parte no terminó de brillar en cuanto a juego se refiere. El Sevilla se marchó al descanso por delante, con Jordan algo tocado y con una ventaja numérica fundamental.
Lamela se corona
El fichaje del Sevilla fue el gran protagonista de la segunda mitad. Participativo, rápido cada vez que recibía el balón y buscando la portería constantemente, el ex del Tottenham logró un doblete en su estreno oficial. En gran parte gracias a compañeros como En-Nesyri, que parecían no tener desgaste físico ni en los 10 minutos finales.
Justo en el 55', en una de las primeras acciones de peligro tras el paso por vestuarios, Lamela puso el 2-0 que acababa con cualquier esperanza rayista. El argentino sacó provecho de un balón suelto en el área y de la blandura de la zaga de Vallecas. Remató, tuvo la suerte de que Cateña desvió lo justo y el Sevilla celebró el segundo tanto de la noche.
El Rayo quedaba completamente descertado para la heroicidad. De hecho, ambos sacaron la bandera blanca durante gran parte de la segunda mitad. El calor hacía de las suyas y el resultado final no tenía demasiado misterio. Sin embargo, el afán de Lamela por reivindicarse podía al cansancio de cualquiera. El Rayo, roto en defensa, dejó espacio suficiente a En-Nesyri, que corrió por banda y cedió a Lamela un pase de la muerte que supuso el 3-0. Esta vez sí, el duelo estaba muerto.
Sevilla 3-0 Rayo
Sevilla: Dmitrovic; Jesús Navas, Koundé, Diego Carlos, Rekik (Papu Gómez, 52'), Acuña; Fernando (Gudelj, 89'), Óscar Rodríguez, Joan Jordán (Pedro Ortiz, 83'); Idrissi (Lamela, 46') y En-Nesyri (Iván Romero, 89').
Rayo Vallecano: Luca Zidane; Balliu, Óscar Valentín (Bebé, 71'), Catena, Fran García; Mario Suárez, Santi Comesaña (Pathé Ciss, 61'); Isi (Merquelanz, 61'), Nteka (Andrés Martín, 71'), Álvaro García y Trejo (Dimitrievski, 18')
Goles: 1-0, 19' En-Nesyri, de penalti. 2-0, 55' Lamela. 3-0, 79' Lamela.
Árbitro: Isidro Díaz de Mera Escuderos (Comité Castellano-Manchego). Expulsó con roja directa al portero visitante Luca Zidane (m.15) por hacer penalti y cortar una clara acción de gol. Además, amonestó al local Idrissi (m.50+).
Incidencias: Partido de la primera jornada de LaLiga Santander disputado en el estadio Ramón Sánchez Pizjuán. El protocolo sanitario permitió la presencia del cuarenta por ciento del aforo y cerca de dieciséis mil sevillistas se inscribieron para presenciarlo. Fuerte calor pese a la tardía hora del encuentro. Se guardó un minuto de silencio en recuerdo de todos los sevillistas fallecidos a lo largo de la pasada temporada.