"Recibí amenazas, insultos a mi familia, me decían que ojalá se mueran mis hijos. Tras el España - Polonia estuve nueve horas sin dormir. Me molesta que lo tengan que vivir mi mujer y mis hijos. Ahora estoy bien, quizá hace unos años hubiese estado jodido", explicaba Álvaro Morata en El Partidazo de COPE el pasado jueves por la noche. Este domingo, Luis Enrique también ha dado su versión sobre lo sucedido y ha criminalizado lo sucedido con su delantero durante la fase de grupos.
El seleccionador español ha criticado estos hechos y espera que se tomen represalias contra los que hayan vertido este tipo de comentarios en las redes sociales: "No consumo información deportiva durante el europeo. La situación tiene un grado de gravedad que hay que ponerlo en manos de la Policía. Lo que diga yo no tiene importancia, son cosas que hay que corregir de manera rotunda". Muy firme el discurso de Luis Enrique para combatir esta situación.
El delantero explicó en la radio todo lo que había vivido en estos días con la Selección: "Entiendo que se me critique porque no he metido gol, pero ojalá la gente se pusiera en el lugar de lo que es recibir amenazas, que te digan que se mueran tus hijos… cuando pasa alguna tragedia dirían este es buen chaval". Unas palabras que fueron prácticamente la comidilla durante todo el día siguiente por la trascendencia de lo que estaba contando.
No solo Luis Enrique las ha condenado, también lo ha hecho Koke en la misma sala de prensa: "Estamos expuestos a todo tipo de críticas y las aceptamos, pero lo que sean amenazas a los niños, a los familiares eso no. Todos somos responsables de lo que hacemos y lo que decimos. No me cabe en la cabeza que pasen estas cosas, porque pueden hacer mucho daño. El jugador lo puede saber llevar, pero la familia y los niños... Esto es denunciable".
El abrazo
Al enterarse de lo ocurrido, Koke reconoció que se fundió en un abrazo con Morata para animarlo. Con el paso de las horas ha intentado dar normalidad y mantener el mismo trato, con el objetivo de que su compañero llegue centrado al duelo ante Croacia.
"Hay que actuar siendo lo más normal posible con él que es como se le ayuda, intentar que esté centrado en la selección aunque tras un partido no sea fácil que te lleguen amenazas. Yo le di un abrazo muy fuert,e porque es un amigo que quiero mucho", reconoció.
"He jugado desde pequeñito con él y al enterarme le di un abrazo muy fuerte y mucho ánimo porque no es fácil estar en su piel. Seguro que necesitaba un abrazo fuerte de su mujer pero se lo di y desde entonces a base de bromas, riendo desviamos el tema y estamos centrados en lo que tenemos que estar", sentenció.
El delantero español está sufriendo una situación de mucha presión durante todo el torneo. Sus fallos en los primeros encuentros, así como en el penalti en la goleada frente a Eslovaquia, han derivado en que todo el mundo se haya puesto en su contra.
[Más información: Luis Enrique: "Me gusta tanto mi equipo que cualquier jugador puede ser titular"]