Álvaro Morata puede regresar al Atlético de Madrid a final de temporada para convertirse nuevamente en delantero rojiblanco. El madrileño, ahora en calidad de cedido en la Juventus, no ha descartado ninguna posibilidad una vez finalice la actual temporada. El goleador quiere quedarse en Italia defendiendo los colores de la Vecchia Signora, pero considera que el fútbol es un "negocio" y que no depende de él la decisión final.
Así lo ha expresado el propio Morata tras el último partido de la Juventus. El conjunto entrenado por Pirlo volvió a tropezar en la Serie A con un empate ante la Fiorentina. Morata puso las tablas en la segunda mitad y acabó como gran protagonista del duelo. Por ello, al finalizar la jornada, la duda sobre su futuro volvió a ser de actualidad. "Soy un profesional y daré lo mejor de mí mientras esté aquí", reconoció en declaraciones para Sky Sport.
"Todo el mundo sabe que me quedaría aquí toda la vida si tuviera la oportunidad, pero el fútbol es un negocio y, a veces, no tenemos tantas opciones. Estoy contento aquí, nos queda una final por ganar que merece un título: hay que apuntar a eso sin pensar más", subrayó ante la prensa tras el tropiezo en la competición doméstica.
Morata, además, desveló que no verá ningún partido de la Champions porque la eliminación de su Juventus aún le sigue pasando factura a nivel anímico. Y es que, pese a su rendimiento, el delantero recordó que "al final nadie recuerda" cómo se hacen las cosas si no se acaba ganando.
El delantero, que ha jugado hasta 40 partidos en lo que va de temporada, acumula 18 dianas en su cuenta particular tras el tanto ante la Fiorentina. Los seis anotados en la Champions League, donde formó parte del once en las ocho ocasiones posibles, es uno de los mejores datos que ha firmado Morata en lo que va de campaña.
Su vuelta al Atlético
Morata siempre ha defendido su continuidad en la Juventus. Ahí ha encontrado una estabilidad deportiva, pero también familiar. Su mujer es italiana y Morata es uno más. Su última estancia tras dejar el Real Madrid le permitió afianzarse como uno de los '9' de referencia en la competición nacional y, además, establecer esos vínculos pesonales claves en la carrera de cualquier profesional.
Sin embargo, Morata regresó a España y posteriormente fichó por el Atlético de Madrid. Descontento con sus minutos la última temporada, logró cerrar su marcha a la Juventus. Sin embargo, reflejo de la situación económica, el acuerdo se sustentó en una cesión por una temporada y una posterior opción de compra de 45 millones de euros.
Ese será uno de los grandes problemas para Morata, más allá de la decisión de Andrea Pirlo en el banquillo. La entidad bianconeri no atraviesa un buen momento a nivel económico y la crisis generada por la Covid-19 puede complicar el pago de esos 45 'kilos'. Morata, por el momento, no confirma dónde jugará la próxima campaña.
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