El Barça de Koeman tiene el examen más esperado en las últimas semanas. Los azulgranas han encadenado una gran racha y tras el último pinchazo del Atlético de Madrid ya dependen de sí mismos para ganar La Liga. Un título que en tramos de la temporada parecía imposible y que, entrados en la recta final, está más cerca que nunca. Ganar en el Di Stéfano es primordial en su objetivo, pero el reto no es nada sencillo.
Los de Koeman jugaron el lunes ante el Valladolid y estuvieron muy cerca de perder en su propio campo y un partido clave en las aspiraciones ligueras. Un tanto de Dembélé justo antes del final del encuentro salvó los muebles y disparó al Barcelona. Los culés tienen que disputar El Clásico y poco después llegará el partido ante el Atlético. La Liga, por lo tanto, está en su mano si logran los dos triunfos ante los principales opositores al título.
El técnico holandés, además de tener esa presión, cuenta con el antecedente del Camp Nou. Por aquel entonces, el Real Madrid parecía que llegaba un paso por detrás. Sin embargo, el 1-3 definitivo dio los tres puntos a los merengues y dejaron en nada la táctica de Koeman. Por ello, hay mucha expectación por ver cuál es la estrategia por la que opta el entrenador. Especialmente con su once, que en los últimos partidos lo ha mantenido intacto y ha cuajado buenos resultados.
El esquema más probable de Koeman es el 3-4-3. El holandés viene acomodando a sus jugadores con esta distribución y ante el Real Madrid, si cumple con la dinámica de los últimos duelos, debería repetirla. La otra opción es establecer un 3-5-2, pero obligaría a quitar un delantero del tridente y dejar, probablemente, a Griezmann en el banquillo.
La última 'tradición' de Koeman
La portería es uno de los pocos puestos fijos. Los palos los defenderá Ter Stegen, una de las piezas fundamentales del equipo culé. La línea de tres por la que optará Koeman podría contar con De Jong incrustado en el centro de la zaga y con Lenglet y Piqué de acompañantes. El catalán ha entrado en la convocatoria y, tras superar la lesión, llega a tiempo para El Clásico.
La defensa de tres dejaría un centro del campo de cuatro, con Jordi Alba y Dest apuntalando las bandas y con Busquets y Pedri dirigiendo el juego en el centro del campo. Supondría mantener el once del Valladolid y de los partidos anteriores. Por último, y con este esquema de 3-4-3, no habría dudas sobre la delantera. Messi, Dembélé y Griezmann, que vienen cuajando buenas actuaciones, repetirían ante el Real Madrid en toda una prueba para el tridente en cuestión.
En el último Clásico disputado, Koeman elaboró un once muy diferente. Ni Dembélé ni Griezmann salieron de titulares. Sin embargo, ni el resultado fue bueno ni la situación física del equipo era la misma. Sin Ansu Fati y con un Pedri rindiendo bien más retrasado en el césped, Koeman deberá decidir.
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