El Barcelona se sumó al Sevilla y se convirtió en el segundo equipo español en caer eliminado en los octavos de final de la Champions League. En el estreno de Laporta como nuevo presidente culé, el equipo dio buena imagen, pero le faltó lo más importante: la puntería. El PSG manejó con tiento el marcador de la ida y con el empate en París selló su pase a la siguiente ronda. [Narración y estadísticas: PSG 1-1 Barcelona]
La gran ausencia del partido fue un Neymar que no llegó al partido. Después de entrenar con sus compañeros a finales de la semana pasada, el lunes regresaron las molestias y se quedó compuesto y sin octavos de la Champions. En cambio, Keylor Navas sí que se enfrentó esta vez al Barça, quedándose Di María en el banquillo al inicio.
Pero las miradas estaban puestas en Mbappé, el hombre de la ida. Y, por supuesto, en su duelo con Messi. En la casa de Leo fue Kylian el que salió vencedor con un hat-trick que ya es historia del fútbol y ahora en el Parque de los Príncipes el argentino quiso tomarse la revancha.
El Barcelona necesitaba dar la vuelta a la eliminatoria después de caer en el Camp Nou por 1-4. Un resultado muy malo para los culés. Pero este equipo ha cambiado y demostró desde el primer momento que el viaje a París no era un trámite. Mucho mejor el Barça en los primeros 45 minutos, pero esa superioridad no se vio reflejada en el marcador.
Mbappé marcó primero y lo hizo tras un penalti de Lenglet sobre Icardi que revisó el VAR. Luego sí que al fin logró el premio a su trabajo el Barcelona, con un golazo que se sacó de la chistera Messi. Pero el argentino falló antes del descanso un penalti que podría haber puesto a los culés por primera vez por delante ante el PSG. Pero Keylor Navas tocó lo justo con el pie para mandar el balón al larguero.
La segunda parte fue de control del Barcelona. Control, pero con menos ritmo, menos emoción. Menos pulsaciones para un partido en el que estaba en juego uno de los billetes de los cuartos de final. Tres goles necesitaban los culés para forzar la prórroga, pero el marcador no se volvió a mover en los segundos 45 minutos y los de Koeman quedaron apeados de la Champions en octavos.
Un mejor Barça
No parecieron los azulgranas, hoy de amarillo, el mismo equipo de la ida. Con más hambre, más ambición y jugando un buen fútbol, el Barcelona salió mordiendo y lo que fue más importante: secando a Mbappé. Mingueza tuvo como único objetivo evitar que el delantero galo volviese a herir de muerte a su equipo y con Kylian desactivado, el PSG no es el mismo.
Dembélé rompió en velocidad, pero para evitar cualquier susto para los de Pochettino estuvo bajo los tres palos un Keylor Navas que a la postre se convirtió en el mejor de su equipo. El Barça volcado en ataque y el Paris Saint-Germain encomendándose a alguna acción individual de Mbappé para no tirar todo por la borda.
Pero si Dembélé falló, su compatriota no lo hizo cuando se colocó frente a frente ante Ter Stegen. Aunque antes de eso, Lenglet había cometido penalti sobre Mauro Icardi. No consideró Anthony Taylor penalti en primera instancia, pero desde el VAR le avisaron de que era punible de sanción la jugada y el colegiado acudió a ver la secuencia al monitor.
Tras revisar las imágenes, Anthony Taylor volvió al campo para señalar el punto de los once metros. Y ahí Kylian Mbappé no falló ante Marc-André Ter Stegen. Trallazo potente y colocado del internacional francés para poner el 1-0 en el marcador y golpe a un Barcelona, que siendo superior, se encontró cayendo por la mínima en París.
El gol del PSG no cambiaba nada, el Barcelona debía seguir marcando cuatro. Pero sí que las sensaciones ya no eran las mismas. Pero los culés contestaron al gol de Mbappé con un disparo de Dest al larguero y de ahí al golazo de Messi desde 35 metros.
Pura vida
Por toda la escuadra se coló el balón. Y esta fue la única vez que no llegó Keylor Navas a tiempo. Porque si el Barcelona logró desactivar a Mbappé, el ex del Real Madrid consiguió él solito sacar de quicio a todo un Barça. Porque a sus anteriores paradas se sumó la del penalti a Messi.
Kurzawa cometió penalti sobre Griezmann, levantando la pierna más de lo que debería. Anthony Taylor no lo dudó esta vez y Leo cogió el balón para hacer el segundo de la noche en su cuenta personal. Pero Navas repelió el esférico con su pierna y el rebote llevó a que el balón acabase impactando en el larguero.
Keylor Navas se encargó de acabar con la moral de un Barça que siguió intentando recortar distancias en la eliminatoria o al menos llevarse un resultado positivo de vuelta a la Ciudad Condal. Pero no llegó el gol de la victoria y el Barcelona cayó como siempre en los últimos años, aunque esta vez, al menos, haciendo que sus aficionados se sintiesen orgullosos de su equipo.
PSG 1-1 Barcelona
PSG: Navas; Florenzi (Dagba, 76'), Marquinhos, Kimpembe, Kurzawa (Diallo, 46'); Gueye (Danilo, 59'), Paredes; Mbappé, Verratti (Rafinha, 84'), Draxler (Di María, 59'), Icardi.
Barcelona: Ter Stegen; Mingueza (Junior, 35'), De Jong, Lenglet; Dest (Trincao, 66') Busquets (Pjanic, 79'), Pedri (Moriba, 79'), Alba; Dembélé (Braithwaite, 79'), Messi y Griezmann.
Goles: 1-0, 30' Mbappé (p.); 1-1, 37 Messi.
Árbitro: Anthony Taylor (ING), amonestó a los locales Kurzawa, Gueye, Paredes e Icardi, y a los visitantes Mingueza, De Jong y Lenglet.
Incidencias: Partido de vuelta de los octavos de final de la Champions League disputado en el Parque de los Príncipes (París, Francia) a puerta cerrada a causa de la pandemia. Debut en el palco como presidente electo del Barcelona de Joan Laporta en su segunda etapa al frente del club español.