El combinado nacional entrenado por Luis Enrique jugará su primer amistoso del año en octubre. La Selección se desplazará a Lisboa para verse las caras con la última campeona de Europa, el cuadro de Portugal. Un encuentro que supondrá el primer amistoso en un atípico año marcado por el parón causado por el coronavirus.
El encuentro está previsto que sirva como preparación para la segunda ventana internacional. Y es que, días después de este amistoso, España jugará contra Suiza y contra Ucrania en los encuentros correspondientes a la Nations League. El primero de esos duelos, que se desarrollará el día 10, será en territorio español.
Sin embargo, el día 14 deberán viajar a Ucrania para enfrentarse al combinado nacional. Un calendario que, hoy por hoy, está en el aire debido a la crisis de la pandemia de la Covid-19.
El viaje entre países se está complicando y los controles por el virus son constantes. A esos encuentros ya confirmados, España sumará otro más en noviembre contra Holanda. En este caso, igualmente se tendrá que viajar a Ámsterdam para jugarlo. La gran incógnita, más allá de que se pueda llegar a jugar, es si habrá público o no.
Países como Alemania ya están trabajando para el regreso de los aficionados a los estadios. Y la UEFA reconoció hace unos días que está valorando esa posibilidad, sin aforos completos pero con hinchas en las gradas. Una opción que ha llevado a la cancelación de otros eventos deportivos en España, como puede ser el caso del Mutua Madrid Open, y que mantiene en vilo a los organismos del fútbol.
Varias entidades germanas están negando esa posibilidad. Desde el Gobierno hasta grupos de médicos, que ven un foco de contagio el permitir que los seguidores puedan acudir a los estadios. En España, durante las últimas semanas, se han ido permitiendo encuentros en abierto con aforo limitado. Y el propio combinado español podría contar con público en el duelo que tiene previsto en septiembre ante los alemanes.
Por ello, y con la UEFA analizando esa medida en las próximas semanas, está en el aire que la Selección vaya a poder jugar con público. De hecho, el calendario que ha sido confirmado tampoco podría llegar a cumplirse si la situación epidemiológica sigue empeorando.
En cualquier caso, si el avance de la pandemia del coronavirus impide que se viaje de un país a otro, la UEFA ha abierto la puerta a que estos encuentros se disputen en sedes neutrales, tal y como han confirmado recientemente desde el organismo.
Un calendario asfixiante
Cuando la UEFA confirmó estas tres ventanas internacionales, los clubes protestaron. Unas quejas que llegaron cuando aún no se sabía que agosto, cuando la mayoría de equipos juegan sus amistoso, sería un mes con encuentros oficiales y vitales en las trayectorias de cada participante.
En el caso de España, entre septiembre y diciembre se jugarán ocho partidos del combinado nacional. Se calcula que, en un periodo de 90 días, 30 de esos los jugadores se los pasarán con sus respectivas selecciones. Una gran pérdida para los clubes y que aumenta la tensión en el mundo del fútbol.
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