Radomir Antic (Serbia, 1948) es uno de los personajes más importantes para entender el fútbol de los 90. Un final de siglo convulso para el balompié y con presidentes excéntricos al que no les temblaba el pulso a la hora de echar entrenadores. Y el serbio consiguió estar a las órdenes de tres de ellos: Ramón Mendoza, Jesús Gil y Joan Gaspart.
El hat-trick perfecto de Antic fue al convertirse en el único técnico en la historia en dirigir al Real Madrid, al Atlético y al Barcelona. Pero sería en el Vicente Calderón donde forjó su leyenda con el primer, y único hasta la fecha, doblete en 1996.
A Antic le acompañaba su marcado acento balcánico y un español lleno de infinitivos que no le impidieron comunicarse en el lenguaje universal que es el fútbol. Era un hombre claro, sin caras ocultas, y que siempre iba de frente. Capaz de firmar el contrato que le unía al Zaragoza en una servilleta durante su etapa de futbolista o lucir una cicatriz en su cara por marcar el gol que dio una liga al Fenerbahce ante el Galatasaray, su eterno rival.
Antic llegó al Atlético de Madrid en una época convulsa y con Jesús Gil triturando varios entrenadores por temporada. 'Rado' se convirtió en la mejor decisión del entonces presidente colchonero y alcalde de Marbella.
Un doblete y una alineación que todavía los atléticos recitan de memoria. Simeone, Pantic, Caminero, Kiko o Penev eran algunas de esas estrellas que bajo el mando de Antic hicieron historia. El serbio aguantó el pulso durante tres años al polémico Gil y hasta estuvo a punto de hacer algo grande en la Copa de Europa la siguiente temporada. Sin embargo, el Ajax en la prórroga acabó con ese gran sueño.
Del Real Madrid me echó José María García
Con Mendoza y Gaspart no le fue igual de bien que con Gil, ya que el primero le echó yendo líder y el segundo le fichó y dimitió a los escasos días. Pero para la historia queda que ese serbio enfermo de fútbol logró dirigir a los tres grandes de España.
Sin embargo, la carrera de Radomir comenzó como central en el Sloboda Uzice en 1967 para luego fichar por el Partizán de Belgrado (1970). En este equipo estuvo durante siete años y conquistó una liga.
Tras salir del Partizán firmó por el Fenerbahce y, en su única temporada en Turquía, también levantó el campeonato doméstico. Luego, en 1978, se produciría su llegada a España para jugar en el Real Zaragoza hasta 1980. La carrera como futbolista de Antic terminó en el Luton Town (1984).
A pesar de una dilatada trayectoria como jugador, los mayores éxitos los conseguiría en el banquillo. Su andadura como entrenador comenzó en el Partizán de su corazón. Entre 1985 y 1988 consiguió dos ligas para regresar y no irse jamás de España. En el Zaragoza estuvo dos temporadas y consiguió clasificar al club maño para la Copa de la UEFA en su primera campaña.
En marzo de 1991 le llegó su primera gran oportunidad. Mendoza llamó a su puerta para coger a un equipo en ruinas. El Real Madrid ya había tenido dos entrenadores, Toshack y Di Stéfano, y había sido eliminado en cuartos de final de la Copa de Europa por el Spartak de Moscú.
En Liga tampoco le iban bien las cosas a los merengues, ya que marchaban en novena posición. Antic comenzó con dos derrotas, pero rápidamente dio la vuelta a la situación y clasificó tercero al Real Madrid para lograr la clasificación para la Copa de la UEFA.
Un despido 'improcedente'
Radomir se encontró con la decadencia de la Quinta del Buitre y de hombres tan importantes como Hugo Sánchez, pero aun así consiguió sacar rédito y colocar líder al Real Madrid en la Liga 1991/1992.
Sin embargo, Mendoza decidió echarle por sorpresa en el mes de enero de 1992 bajo la excusa de que el equipo "no daba espectáculo". El Real Madrid perdió al final aquella Liga en Tenerife. Antic siempre dijo que le había "echado Jose María García" por las presiones al entonces presidente blanco.
Fue una destitución por sorpresa, con el equipo líder y en la mejor temporada goleadora de Fernando Hierro. El malagueño terminó segundo en el 'Pichichi' con 21 goles, solo por detrás del delantero atlético Manolo.
Del milagro al descenso
Los jugadores de aquel Real Madrid siempre guardaron buenas palabras para el bueno de Radomir, que el año siguiente firmó con el Oviedo para dejarle en mitad de tabla durante dos campañas y lograr así los méritos para firmar por el Atlético.
Elegí al Atlético porque en aquel momento era el club más difícil del mundo
Allí, en la ribera del Manzanares, se ganó para siempre el corazón de los colchoneros. El "Radomir, te quiero" se convirtió en el grito de una afición que jamás olvidó a Antic. El destino le jugaría también la pasada de vivir también el infierno con el Atleti. Ya que, además de ser el técnico del doblete, lo es del último descenso en el año 2000.
El serbio dirigió once partidos de Liga a aquel Atlético que terminó descendiendo ante el Real Oviedo de Luis Aragonés en el Carlos Tartiere. Antes ya había regresado solo medio año después de su primera marcha para salvar al equipo, pero en esta ocasión 'Rado' no obró el milagro.
Antic puso así punto y final a su etapa en el Atlético, la que siempre recordó como la más feliz de su carrera. Donde fue capaz de encabezar la celebración del título liguero junto al mítico Imperioso, el caballo de Jesús Gil, y de demostrar cómo un exmadridista puede convertirse en leyenda rojiblanca.
Regresó después al Real Oviedo, su verdugo en el Atlético, para suceder a Luis Aragonés y otra vez la vida y el fútbol le dieron la espalda. Su suerte y su varita mágica parecía haberse agotado y el conjunto carbayón terminó descendiendo.
Apagafuegos y comentarista
Sin embargo, el destino esta vez le tenía preparado un premio en 2003. Van Gaal es destituido y el Barça, en estado crítico, piensa en Radomir Antic para salvar la situación. Sin embargo, solo 12 días después de firmar, Gaspart dimite y el club comienza un proceso electoral que terminará con Laporta de presidente y Rijkaard en el banquillo.
Antic dirigió al Barça en 18 partidos durante una temporada en la que los azulgranas finalizaron en sexta posición. La etapa en el club catalán fue breve, llena de curvas y malos momentos, pero permitió al serbio convertirse en el único entrenador en dirigir a los tres grandes de España.
El técnico estaba en una época en la que se había convertido en un entrenador interino y tampoco le fue mejor en el Celta. Llegó a Vigo para intentar salvar al equipo, que se había clasificado para Champions la campaña anterior, y dimitió solo dos meses después.
Tras esto le llegó la oportunidad de entrenar a Serbia y clasificar a su país para el Mundial 2010. Las cosas tampoco marcharon bien y su selección fue eliminada en la fase de grupos. Antic cerró su carrera en China como técnico del Shandong Luneng (2013) y del Hebei Zhongji (2015).
A pesar de su español particular, 'Rado' también destacó como comentarista en la radio. Su sinceridad hizo que siempre conectara con la audiencia, primero en la SER y después en la COPE, pero siempre acompañando a Paco González en su equipo.
El hombre que eligió "el Atlético porque entonces era el equipo más difícil del mundo" y que consiguió dar tranquilidad incluso a Jesús Gil, murió este 6 de abril en su Madrid, de la que nunca se fue y siguió concediendo entrevistas en su casa de Aravaca con la misma cercanía de siempre, tras una larga enfermedad. Adiós al entrenador de los tres grandes. Al único. Un 'brazzo', 'Rado'.
[Más información: Muere Radomir Antic, exentrenador de Atlético, Real Madrid y Barcelona, a los 71 años]