La maternidad se ha convertido en los últimos años en una patata caliente en muchos sectores. Las mujeres tienen más problemas para llegar a puestos altos de las empresas, pero también en trabajos más modestos. Se ve como un problema contratar a una chica y que esta pueda quedarse embarazada. Por ello, la tendencia ha sido que independientemente de si la mujer estaba mejor preparada que el hombre, el puesto sea para él.
Esto se traslada también al mundo del deporte. Mientras en disciplinas como el tenis luchan y van consiguiendo, en cierto modo, la paridad en torneos importantes a la hora del reparto de premios, en otras como el fútbol aún queda mucho por hacer. Pero lo cierto es que los tiempos están cambiando y eso se nota. Aunque también ayuda que jugadoras importantes, a las que bien se podría considerar como galácticas, visibilicen que si quieren ser madres, no hay ningún problema.
Este es el caso de Alex Morgan. Delantera del Orlando Pride, campeona del mundo con la selección de Estados Unidos y uno de los rostros más conocidos en el fútbol femenino. Después de ganar la Copa del Mundo en Francia, la futbolista anunció que esperaba su primer hijo con el también jugador Servando Carrasco. La noticia fue muy bien acogida y es que servía como el mejor ejemplo de que se puede estar embarazada, ser madre y seguir con una carrera de élite.
El ejemplo de Morgan
"Estamos enamorados y no la hemos conocido aún. El nuevo miembro de la familia Carrasco, vendrá pronto", escribió Alex Morgan en sus redes sociales. Fue así como la futbolista anunció el nacimiento de su bebé, que será una niña, después de que la prensa norteamericana comenzase a especular con el embarazo. Una noticia que llegó como una bomba ya que este 2020 es año de Juegos Olímpicos.
El próximo verano se celebran en Tokio una nueva edición de los JJOO. Todo un evento en el mundo del deporte y en el que la selección de Estados Unidos de fútbol femenino se presenta como la gran favorita al oro. La duda entonces fue: ¿estará Morga lista?
La delantera no ha parado de entrenarse e incluso sorprendió hace tan solo unos días con unas imágenes entrenando con su combinado nacional y... ¡embarazada de siete meses! El vídeo de Alex Morgan no tardó en dar la vuelta al mundo y se convirtió en un ejemplo de conciliación para todas esas futbolistas que quieren seguir con sus carreras y ser madres sin que nada ni nadie se lo impida.
La delantera del Orlando Pride ha seguido entrenándose y ha acudido a la concentración de su selección nacional a pesar de su avanzado estado de gestación. Su deseo es recuperarse rápidamente tras el parto y estar lista para acudir a los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.
De Leroux al caso español
En el mismo Orlando Pride, otra futbolista fue noticia el pasado mes de marzo del 2019 también por un embarazo. Sydney Leroux se presentó en la pretemporada de su equipo embarazada de cinco meses. Su fotografía corrió como la pólvora, pero fue ella misma la que mostró como podía trabajar sin problemas pese a su estado.
"Solo hago cosas sin contacto. Trabajo de pelota. Recibiendo toques. No me pongo en situaciones en las que el balón pueda rebotar o pueda ser golpeada", afirmó en su día Sydney sobre su embarazo en la conocida red social. Además, señaló que no hacía "carrera con alta intensidad" y que lo que intentaba era "escuchar" a su "cuerpo" ya que, como apuntó, este sabe más de lo que tiene que hacer que la gente de Twitter.
El de Sydney Leroux era el segundo embarazo. Y mientras esto puede parecer de lo más natural, en lo que se refiere al fútbol español no lo es. Recientemente era una jugadora de Osasuna la que era noticia por ser madre. Maider Irisarri jugó su último partido en enero de 2019, después de tener a su bebé, regresó a principios de este 2020 a los terrenos de juego.
Al igual que las estadounidenses, Irisarri siguió ejercitándose con un avanzado de gestación, ya que como ella misma ha asegurado el estar embarazada no es estar enferma. Quince días después de dar a luz, comenzó con su proceso de recuperación para poder volver lo antes posible con el conjunto rojillo.
Maider Irisarri es una pionera en el fútbol español, la primera jugadora en volver a la acción después de convertirse en madre. Todo un ejemplo para el resto de futbolistas, aunque es el convenio el que pondrá un punto de tranquilidad, y sobre todo de justicia, para aquellas que quieran tener hijos y no pierdan así ninguno de sus derechos.
Punto caliente del convenio
El convenio colectivo del fútbol femenino en España ya es una realidad. Después de meses de negociaciones y de numerosas reuniones, incluida una huelga colectiva en la Primera Iberdrola, el culebrón ha llegado a su fin. Uno de los puntos destacados de este es el protocolo de embarazo.
En febrero de 2019, la AFE presento este protocolo de embarazo para, de acuerdo con la Ley 31/1995 del 8 de noviembre "garantizar la protección de la maternidad y la lactancia". En este había dos puntos claves:
- Adaptación de las condiciones y/o del tiempo de entrenamientos y cualquier otra actividad que desarrolle en el club habitualmente.
- Realización temporal de funciones compatibles con su estado dentro del mismo club.
Asimismo, la AFE detallaba en el texto los derechos de las jugadoras y los deberes de los clubes: "El club facilitará la reinserción de la jugadora a su puesto cuando el tiempo establecido y su salud lo permitan, y la futbolista quiera volver".
Como dijo la propia Maider Irisarri, la firma de este convenio hará que las futbolistas estén más tranquilas con respecto al futuro de sus carreras y que podrán regresar a sus club con total normalidad una vez estén recuperadas, como cualquier otra mujer.
[Más información: El primer convenio colectivo del fútbol femenino en España ya es una realidad]