La eliminación del Paris Saint-Germain en octavos de final de Champions League ante el Manchester United tuvo numerosas reacciones. Neymar, que continúa de baja debido a su lesión, acudió al estadio para apoyar a sus compañeros. El brasileño vio atónito el fracaso de su equipo e incluso quiso protestar a los árbitros el polémico penalti pitado en los últimos minutos.

Neymar, en la grada viendo al PSG en Champions Reuters

Según el diario británico Daily Mirror, varios testigos presenciales señalan que el extremo se abrió paso por el pasillo hasta el vestuario de los colegiados y tuvo que ser retenido por miembros del personal del PSG.

Asimismo, también afirman que después de este momento, buscó a Tuchel, que se encontraba solo fuera del vestuario y la pareja se abrazó. Se trata de una señal de la creciente relación y respeto entre ambos.

El presidente destruyó una puerta

Sin embargo, estos no fueron todos los incidentes ocurridos tras el partido, ya que también han apuntado que el presidente del club, Nasser Al-Khelaifi, destruyó una puerta debido a su enfado. Por tanto, la UEFA está a la espera del informe del partido de Skomina para comprobar si menciona algún incidente que involucre a Neymar, u otros, antes de cualquier acción potencial.

El joven brasileño también se puede enfrentar a una sanción por el mensaje que publicó en Instagram sobre la actuación arbitral. "Es una vergüenza. Ponen a cuatro tíos que no entienden de fútbol para analizar una jugada... ¿Cómo va a poner manos de espaldas?. El penalti no existe", escribió. Ahora se enfrenta hasta a tres partidos de sanción por ello.

El PSG sufrió una dura derrota, ya que disputaba la eliminatoria con cierta ventaja sobre el Manchester United, tras imponerse por 0-2 en el partido de ida. No obstante, no supo aprovechar el resultado y cayó por 1-3 con un penalti en los últimos minutos del encuentro. 

[Más información en: El Manchester United remonta al PSG y se clasifica para cuartos de Champions]

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