El Athletic de Bilbao se clasificó para los octavos de final de la Europa League tras empatar contra el Olympique de Marsella en San Mamés (1-1). Por su parte, el Valencia hizo lo propio tras doblegar al Rapid de Viena (0-4).



El conjunto dirigido por Valverde se hizo con la victoria en la ida (0-1) con un gol de Aritz Aduriz. Un tanto, por cierto, que a la postre resultó decisivo en la vuelta, pues los franceses se adelantaron con un tanto de Michy Basthuayi que contrarrestó en última instancia Sabin Merino para dar el pase a los suyos.



Contado lo básico, lo cierto es que el partido honró al fútbol. Es cierto que en los primeros minutos nadie creyó, ni por asomo, la tormenta que cayó posteriormente en San Mamés. No la meteorológica, que también, con lluvia y frío, sino la futbolística que descargó el Marsella en una primera parte primorosa de los de Míchel.



Un remate cruzado de Nkoudou tras una buena contra visitante fue el primer trueno de los de azul, que no abrió el marcador al cuarto de hora de partido porque Herrerín se interpuso con una espléndida para a un balón despejado por San José que dio sorprendentemente en Batshuayi.



Tras un buen comienzo, el Olympique de Marsella se adelantó cerca del descanso. Etxeita no llegó al despeje, el balón rebotó en Laporte y el balón suelto que quedó lo estampó Batshuayi junto al larguero, imposible para el meta bilbaíno.



Mejoró el Athletic tras el descanso, que generó al menos tres ocasiones de gol en unos primeros veinte minutos igualados en el juego, pero con más peligro ante Mandanda.Primero, Raúl García cabeceó fuera por poco un centro a balón parado de Susaeta; después de nuevo Susaeta, también, en jugada de estrategia, obligó al portero visitante a una espléndida intervención cerca de la escuadra con un tiro directo; y finalmente San José no pudo enganchar bien la volea a un rechace dentro de la defensa local tras córner.



Y ya en la parte final, llegó el gol de Sabin Merino. Precioso. Apertura a la banda de Muniain, centro de Susaeta desde la derecha y espléndido cabezazo de Sabin en plancha inapelable a la red.

FIESTA DEL VALENCIA

El Valencia, por su parte, fue muy superior y encadenó su cuarta victoria consecutiva con una gran segunda parte y se clasificó para los octavos de final de la Liga Europa con un 10-0 global frente a un Rapid.

El equipo 'B' del Valencia ofreció más juego y goles que un Rapid de Viena 'A' que apenas creo oportunidades y que se encomendó a las contras y a las jugadas a balón parado.

La diferencia de calidad entre ambos equipos quedó patente desde el principio. El Valencia dominó el balón desde los primeros compases mientras que el Rapid esperaba su oportunidad para morder tras alguna pérdida.



El primer gol del Valencia llegó en la segunda mitad, en una gran jugada en el 59: Javi Fuego vio el desmarque de Rodrigo, que cazó el balón y batió a Strebinger con una vaselina.

El segundo gol se produjo cinco minutos después. Con la defensa del Rapid adelantada Danilo dio un pase medido a Feghouli, que marcó con un ajustado tiro cruzado.

Otra jugada rápida del Valencia supuso el tercero. Feghouli filtró un pase cruzado entre líneas para que Piatti rematara ante el portero.

El Rapid quedó noqueado por esos tres goles en 12 minutos.

Cuando el partido llegaba al final, Ruben Vezo marcó de un gran cabezazo en un corner el 0-4 final.

La nota negativa del partido la protagonizaron los ultras del Rapid, que antes del partido desplegaron en uno de los fondos una pancarta en la que se leía "Puta Valencia", un insulto que corearon durante varios momentos del choque.