El próximo lunes 13 de febrero se disputará la segunda edición de la Clásica Jaén Paraíso Interior, una prueba que tiene al seleccionador nacional, Pascual Momparler, como su gran ideólogo y ejecutor. La carrera vio la luz el año pasado y lo hizo a lo grande, dejando un gran sabor de boca entre los corredores y el público, y con un ganador de nivel como el kazajo Alexey Lutsenko.
Sin embargo, parece que el crecimiento de esta Clásica Jaén no tiene techo. Un reflejo de ello es el elenco de corredores que se darán cita en ella, y especialmente llamativa resulta la presencia de Tadej Pogaçar. El doble ganador del Tour de Francia multiplica el atractivo de la carrera que en esta segunda edición también contará con otros equipos World Tour destacados como el conjunto Ineos, Movistar Team, Astana y Cofidis.
El recorrido presenta en este 2023 varias novedades que convierten la carrera en una prueba en la que no solo contará la potencia y la energía, sino que también la destreza y la habilidad sobre la bicicleta serán claves. Se conservan tan solo dos tramos de 'sterrato' con respecto al año pasado, y por eso EL ESPAÑOL habla con Pascual Momparler, el artífice del trazado, para conocer de primera mano cómo son los ocho pasos totales por tierra.
Tramo 1 (10,9 km)
Bautizado con el nombre de Bayassa, es el primero de los ocho pasos por tierra que tendrán que afrontar los corredores. Se trata de una primera toma de contacto asequible y sencilla, pero que tiene algo característico. "Cuenta con un paso a nivel sin barreras a mitad del tramo", dice Pascual Momparler, aunque confiesa que los ciclistas no se encontrarán con el tren a la hora en la que pasarán por allí. Casi 11 kilómetros de tierra.
Tramo 2 (5,4 km)
El tramo de Marimingo comienza a complicar la carrera y además "termina en subida". El inicio es relativamente sencillo, pero poco a poco la pendiente comienza a inclinarse y las primeras rampas empezarán a hacer daño a las piernas de los ciclistas. Más de la mitad de este sector es en subida, y una vez que lo terminen, todavía tendrán que ascender otros 3 kilómetros más en asfalto.
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Tramo 3 (5,4 km)
Este sector de Valdeolivas es uno de los que se hizo en la carrera del año pasado. De hecho, fue uno de los más emblemáticos porque cuenta con un puente en el que varios corredores sufrieron el estrechamiento. "Lo hemos querido repetir para ir asentando algunos tramos", dice Momparler. Este tramo complicado termina en Úbeda y además cuenta con una rampa que alcanza el 17%.
Tramo 4 (11,1 km)
Ubbadat es el paso por tierra más largo de toda la Clásica Jaén Paraíso Interior y es el otro que se repite con respeto a la edición del año pasado. "Es el que aceleró la carrera de verdad y donde Lutsenko metió el primer ataque", recuerda Pascual Momparler. Las imágenes que deja este sector, ascendiendo en zig zag, son espectaculares y además este año el embalse que hay cerca tiene algo de agua, al contrario que en 2022. Eso sí, el paso no es igual que el año pasado porque cuenta con 7 kilómetros más en los que hay bajada y subida.
"Algunos ciclistas me dijeron el año pasado que echaban de menos alguna bajada, porque las secciones eran muy duras y solo beneficiaban al que tenía mucha fuerza pero no al que tenía destreza", confiesa el seleccionador nacional. Con este sector, se vuelve a pasar por Úbeda, en esta ocasión desde la zona norte.
Lutsenko, ganador de la Clásica Jaén 2022.
Tramo 5 (3,5 km)
El tramo Antonio Machado no tiene una longitud elevada pero esto puede llevar a engaño. "Tiene un zig zag con rampas del 10%, y la carrera va a ir acelerada", dice Pascual Momparler, consciente de la importancia que tiene este paso por el 'sterrato'. Aquí el grupo se estirará y los aspirantes buscarán estar delante, así que se espera que pueda ser el lugar decisivo en el que la carrera comience a romperse de manera definitiva.
Tramo 6 (4,2 km)
Cruz de Jaboneros se enlaza prácticamente seguido al tramo anterior, ya que apenas hay 1 kilómetro de asfalto entre un 'sterrato' y otro. Aquí no habrá rampas y es un lugar idóneo para que aquel que tiene una mayor habilidad en el manejo de la bicicleta trate de conseguir ventaja sobre el resto de sus rivales.
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Tramos 7 y 8 (6,5 km)
Virgen de la Salud se repite en la parte final de la carrera. Aquí terminará por decidirse todo, entre otras cosas porque hay rampas que llegan hasta el 18% de desnivel. Arranca con un perfil plano, pero poco a poco la tierra se va empinando hasta llegar a unos 10 metros infernales al 17 y 18%. Además, hay 3 kilómetros compartidos con el tramo 6, por lo que es una mezcla de fuerza y habilidad gigante.
Desde que termina este último tramo hasta que se llega a la línea de meta hay apenas 2 kilómetros de asfalto. En ellos, los ciclistas tendrán además que tirar de técnica porque habrá un curveo constante y entonces se conocerá quién sucederá a Alexey Lutsenko.