Colbrelli vuelve a soñar: de un paro cardiaco que casi lo mata a pensar en volver al ciclismo

El universo de la bicicleta sonríe. Es habitual que los cronistas aseguren que los ciclistas estén hechos de otra pasta. Aguantan etapas infernales con condiciones climatológicas dantescas. Y además, en muchas ocasiones, terminan con sus huesos en el asfalto y aún así consiguen recuperarse en tiempo récord. Sin embargo, son personas como cualquier otra y también padecen imprevistos que se escapan a la lógica de su deporte. 

Eso le pasó a Sonny Colbrelli a la conclusión de la primera etapa de la pasada Volta a Cataluña. El corredor italiano del equipo Bahrain-Victorious peleaba por la victoria de etapa en un final lanzado, pero ligeramente empinado, con Michael Matthews. En su esfuerzo, perdía la batalla y tras cruzar la línea de meta, también el conocimiento. 

Una situación alarmante y preocupante que se agravó en cuestión de segundos. Colbrelli caía desplomado sufriendo un paro cardíaco que dejaba a todo el mundo sin aliento. Solo la rápida y brillante actuación de los servicios sanitarios de la Volta, una de las carreras más importantes del World Tour, evitó la tragedia. El corredor fue trasladado a un centro hospitalario donde arrancó una recuperación que todavía perdura. 

Sin embargo, Colbrelli mira al futuro con esperanza. Su vida parece no correr peligro y lo que es más importante para él: no está descartada su vuelta al ciclismo. Al menos, eso es lo que ha comunicado el equipo médico que le trata y su entorno. Evidentemente, la vida está por encima del deporte, pero el hecho de que pueda volver a subirse a una bicicleta es claro indicador de que todo va por muy buen camino. 

Los avances de Colbrelli

Tras el sufrimiento de ese dramático desvanecimiento provocado por una arritmia cardíaca, Sonny Colbrelli tuvo que apartarse de la disciplina profesional del Bahrain-Victorious. Todos sus compañeros, directores y auxiliares le han apoyado y arropado en este momento tan duro. Pero junto con el cariño de su familia le han dado las fuerzas necesarias para seguir adelante. 

Ahora ha ganado una de sus grandes batallas y es que el equipo de galenos que le ha atendido y que ha hecho un seguimiento de su estado durante sus últimas semanas le ha dado luz verde para volver a hacer deporte. Eso sí, todavía a muy baja intensidad y teniendo sumo cuidado. Van a controlar cada movimiento que haga el corredor italiano para asegurarse de que todo sigue por los cauces esperados. 

Y si todo va bien, será momento de plantearse un regreso al pelotón internacional. Desde el primer momento en el que Colbrelli pudo expresarse después del susto, dejó la puerta abierta a volver a montar en bicicleta y a luchar por los sprints y las victorias en carreras de un día, su gran especialidad. El actual campeón de Europa y de la Paris-Roubaix 2021 espera no haber dicho su última palabra a nivel profesional. 

Él está convencido de poder lograrlo y por eso ya trabaja a conciencia, dentro de unos límites, para poder tomar la salida en una carrera y defender su dorsal. Sin embargo, dentro de su escuadra son algo más cautos y están convencidos de que no van a correr ni el más mínimo riesgo. No obstante, las noticias reveladas tras los últimos estudios invitan al optimismo. 

"Los exámenes clínicos señalan mejoras en salud cardiovascular. Se le permitirá poder realizar ligeras salidas en bicicleta y actividad física moderada". Toda esta puesta en marcha que va a llevar a cabo el ciclista italiano va a ser controlada al milímetro: "La prioridad es vigilar su condición con un seguimiento intenso en los próximos meses de su seguridad para poder retomar con normalidad sus actividades vitales".

La situación de Colbrelli

Colbrelli empieza a ver ahora la luz al final del túnel. Sin embargo, ha pasado por momentos muy oscuros en las últimas semanas. Se siente agradecido a la vida por haber salido de su bache, pero también reconoce que está siendo especialmente complicado ver cómo sus compañeros compiten al más alto nivel mientras él solo puede seguirlo por televisión. 

Acaba de terminar la fase de temporada de las Clásicas de primavera y soñaba con haber brillado en carreras como el Tour de Flandes o la Paris-Roubaix. Además, este parón le ha pillado en el momento cumbre de toda su carrera deportiva, cuando mejores sensaciones estaba ofreciendo y cuando mayores victorias estaba logrando. 

La situación de Colbrelli, aunque avanza por el buen camino, sigue siendo complicada. Durante este periodo ha tenido que someterse a varios procesos médicos muy complejos y a una peligrosa operación a través de la cual se le implantó un desfibrilador subcutáneo. Este aparato es el que controla ahora sus constantes vitales y el que le mantiene con vida y fuera de cualquier susto. 

Saber si le puede poner a prueba con la exigencia máxima que requiere la vida de un ciclista de élite es su siguiente paso. Lo que está claro es que Colbrelli no tira la toalla y que sigue confiando en poder regresar a lo más alto a pesar de todo el tiempo que va a tener que pasar fuera de las carreteras. 

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