Lorenzo Brown está siendo una de las piezas claves de España en este Eurobasket. Tal y como se esperaba en el momento de su nacionalización, el base que esta temporada jugará con Maccabi ha tomado las riendas del equipo nacional ante la falta de jugadores en la posición de playmaker. Sin embargo, su rendimiento en partidos como el de Lituania ha superado todas las expectativas.
La segunda parte que realizó el estadounidense rompió de un plumazo toda la polémica que había rodeado a su figura desde su acogida en el vestuario de 'La Familia'. Llegó al descanso con solo cinco puntos en su marcador y al término de la prórroga se situó nada más y nada menos que con 28. Además, 18 de esos puntos anotados llegaron entre el último parcial del partido y el tiempo extra.
Otro dato que explica su brillante actuación y su importancia fue que participó en 17 de los 19 puntos que España anotó en el añadido de cinco minutos que dejó a los de Scariolo en los cuartos de final del Eurobasket y a Lituania con la obligación de hacer las maletas y regresar cuanto antes para casa.
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El hecho de haber visto enfrente a un jugador tan diferencial provocó que algunas figuras claves de Lituania no se tomaran del todo bien que fuera precisamente Lorenzo Brown quien les ajusticiara. Un jugador que en teoría no tenía que haber formado parte de este equipo y que llegó justo a última hora.
El mal perder lituano
Así de duro fue con esta situación Mindaugas Kuzminskas, uno de los mejores del equipo lituano. Mantuvo a sus compañeros con vida en el partido gracias a sus 19 puntos. Sin embargo, tras caer, no se pudo morder la lengua y descargó toda su ira y su mal perder contra el base de la selección española.
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"No estoy seguro de cómo sería ese equipo sin Lorenzo Brown porque lo ficharon este verano, pero es lo que es". Una reflexión que ha generado una gran polémica ya que, al fin y al cabo, es una circunstancia que se produce de manera recurrente en todos los equipos con jugadores extranjeros, especialmente procedentes de Estados Unidos.
Tras el choque, Lorenzo no quiso entrar en polémicas y agradeció la buena acogida que ha tenido en el vestuario, hecho clave para poder realizar partidos de este calibre: "Vengo aquí como un estadounidense normal. Estos muchachos están hablando en español y estoy aprendiendo todos los días. El ruido de afuera es algo que no me molesta en absoluto".
"Estoy muy agradecido de que estos muchachos me dijeran que siguiera adelante. Es genial tener gente detrás de ti. Sentí que eran mis hermanos. El año pasado, cuando estaba en Kazán, viví la mayor unidad que he tenido en un equipo. Aquí siento lo mismo. Me trajeron como uno más".
Sergio Scariolo siempre le ha mostrado su confianza y suya fue la idea de impulsar su nacionalización. Una decisión que no cayó muy bien en el vestuario como evidenció Rudy Fernández, pero que con el tiempo ha sido aceptada y que ha dejado un gran ambiente dentro del equipo. Esto mismo lo reconocía el propio Lorenzo Brown: "Ellos me quieren y yo les quiero a ellos. Todo está bien".