A lo largo de la historia de España ha habido diversas ciudades que han sido capital del reino, no sólo Madrid como se suele pensar. Y más allá de la capital de España, hay que tener en cuenta que cada comunidad autónoma posee su capital, como forma de organización administrativa. Todas estas capitales tienen una gran historia tras de sí, sobre todo, en lo que tiene que ver a su denominación... No todas las urbes han tenido el mismo nombre desde que nacieron, sino que fueron cambiando según épocas históricas o gobiernos. Por eso, resulta curioso hacer un recorrido por el origen del nombre de las capitales de provincia o comunidad autónoma.
El origen del nombre de las capitales de provincia españolas
- Albacete (Al-Basit): Este nombre se traduce como "el llano" en clara alusión a donde se encuentra el municipio. Este fue el nombre que los árabes le dieron a la capital de provincia.
- Alicante (Al-Laqant): La región debe su nombre también al topónimo evolucionado de origen árabe. A su vez este había tomado como referencia al nombre de un asentamiento ibero-romano llamado Lucentum.
- Almería (Al-mariyat Bayyana): La provincia se llama igual que su capital debido a una atalaya que vigilaba la zona marítima de Bayyana en la época árabe. La estructura era llamada Al-mariyat Bayyana y la ciudad creció a su alrededor.
- Álava (Alaba): Según algunas investigaciones como la de Patxi Salaberri, tanto la forma en castellano y en euskera tienen sus raíces en el nombre Alaba, de origen celtibérico. En cualquier caso, no está claro el significado de este.
- Ávila (Avela): La etimología de Ávila es aún una incógnita aunque existen muchas hipótesis sobre cuál puede ser su origen. Algunos historiadores sitúan su etimología en el marco germánico bajo la denominación de Awilô. Sin embargo, esto no está confirmado.
- Badajoz (Mu’assassat Batalyaws): El actual nombre de su capital procede de la antigua denominación medieval de Mu’assassat Batalyaws perteneciente. También se cree que puede venir del latín: "vadum clausum", dado que este compuesto significa 'vado cerrado' y haría referencia al vado del río Guadiana, alrededor del cual se fundó la ciudad extremeña en el año 875.
- Barcelona (Barcino): El nombre de la capital catalana no cuenta con un origen contrastado aunque la colonia romana en la zona se denominó Barcino. Las dos hipótesis que se barajan hablan de una estirpe cartaginesa llamada Barca o de un origen mitológico centrado en Hércules y la pérdida de una de sus nueve embarcaciones llamada Barca Nona. De esa manera, la barca nona, es decir, 'novena barca', dio lugar al topónimo que hoy en día persiste como Barcelona, eso sí, pasando un periodo de latinización que la llevó a llamarse previamente como Barcino.
- Bizkaia (Bizkaio bizkar): El origen del nombre de la zona cuenta con una teoría contrastada del euskera que procede de la voz bizkaio bizkar, cuyo significado parece referirse a un "lugar elevado".
- Burgos (Burg): Las teorías sobre su origen etimológico son diversas. Del griego pyrgos, significa "torre", quizás por todas las fortificaciones que durante la Edad Media se construían a lo ancho de Castilla para mantener controlado el territorio. Del latín burgus, castillo pequeño. Del germánico, berg, que tiene dos acepciones, monte y castillo
- Cáceres (Norba Caesarinao): Según esta hipótesis más contrastada, el nombre procedería de la colonia Norba Caesarina, en honor a la ciudad natal del general romano Cayo Norbano y en memoria de Julio César.
- Cádiz (Gádir): La palabra Cádiz tiene su origen en los fenicios que fundaron la ciudad. Procede del término Gádir que significa 'castillo', 'fortaleza' o, en general, 'recinto murado' y es muy frecuente en muchos topónimos del norte de África.
- Castellón (Castalias): El nombre tiene su origen en el ibérico Cartalias, Castalias, Castalium o Castellum, término que se le aplicó el sufijo diminutivo -one, produciendo así el topónimo Castellone que significa ‘castillito’ o ‘castillo pequeño’.
- Ceuta (Septem Frates) : La ciudad autónoma debe su nombre a los siete montes de la región motivaron a los romanos a bautizarla como Septem Frates, es decir, “siete hermanos”. Tras ella, la primera palabra de este topónimo evolucionó con los árabes a Sebta, que deriva en el término actual.
- Ciudad Real (Pozo Seco de Don Gil): Inicialmente llamado Pozo Seco de Don Gil, la ciudad fue rebautizada como Villa Real por Alfonso X en 1255. Dos siglos después, en 1421, el Rey Juan II de Castilla cambió su rango de "Villa" a "Ciudad", conociéndose a partir de entonces como "ciudad real".
- Córdoba (Corduba): La ciudad fue fundada bajo el nombre de Corduba por el patricio y general romano Claudio Marcelo tras varias décadas de convivencia entre romanos y turdetanos. A partir de "Corduba" derivaría "Córdoba".
- La Coruña: La teoría más extendida sobre el origen de este topónimo es la que asegura que el nombre de la ciudad procede de Crunia, un topónimo que aparece en la Historia Turpini, el cuarto libro delCódice Calixtino, en el que se narran las conquistas de Carlomagno en Gallecia.
- Cuenca (Qūnka): El nombre de la ciudad de las casas colgantes procede del árabe Qūnka. Curiosamente, esta palabra es una adaptación de otro topónimo anterior del que no se tiene constancia y que, a su vez, no tiene un significado propio en árabe.
- Gerona (Gerunda): Los romanos fundaron la ciudad de Gerunda en el siglo I a. C., en pleno contexto de las Guerras Sertorianas. No se conoce un significado concreto del nombre de Gerunda. De "Gerunda" habría dado en "Gerona".
- Granada (Gar-anat): En el siglo IX, la ciudad más importante de la zona donde hoy se asienta Granada era la Medina-Elvira. Posteriormente cambiaría su toponimia y pasaría a llamarse Medina-Garnata. Es de esa denominación donde surge siglos más tarde el nombre de Granada.
- Guadalajara (Madinat al-Faray) : Aunque la ciudad ya se llamaba Madinat al-Faray durante el periodo árabe, obtuvo su nombre de Wad al-Hayarah, cuya denominación pertenece al río Henares, traducido como "río de piedras" por su poco caudal.
- Gipuzkoa (Ipuscua): Existen documentos del año 1025 en el que se denomina Ipuscua a lo que hoy es la provincia más pequeña de España.
- Huelva (Welba): Su nombre original era Onuba, de origen fenicio y que es el resultado de Onos Baal u Ono-Baal. Su nombre significa 'Fortaleza de Baal', es decir, fortaleza del sol y el fuego. Sin embargo, el topónimo fue mutando con la llegada de los árabes, pasado a ser Awnaba, Gaelbah, Umba y Welba, que finalmente se castellanizó hasta convertirse en Huelva.
- Huesca (Bolskan): La primera referencia al nombre de la ciudad procede del término Bolskan, acuñado en varias monedas iberas localizadas en la zona. El nombre evolucionó al Osca romano, el Waska árabe, de nuevo Osca tras la Reconquista y el nombre aragonés Uesca. No constan referencias de su significado.
- Jaén (Gaiena): Esta ciudad y región del sur de España cuenta con dos principales hipótesis que se barajan relativas al origen del nombre de la capital. Estas proceden de la palabra latina Gaiena "villa de Gaius", que habría evolucionado al árabe Yaiyan o el término hebreo Dayan "juez", que podría haber terminado en Yayyan.
- León (Legio): Su nombre proviene del latín Legionem, en referencia a la Legión Séptima Gemela, el cuerpo militar que fundó la ciudad. Esta palabra fue evolucionando y perdiendo varias letras: desde Leyone, Leyón y el actual León.
- Lérida (Ilirta): La ciudad y provincia catalana tiene su origen en la ibera Iltirta, la romana Ilerda, la musulmana Larida y la medieval Leyda que cuentan con gran parecido entre sí.
- Lugo (Lucus Augusti): : El origen de la ciudad y provincia norteña es el campamento romano de Lucus Augusti, que podría ser traducida como “el bosque sagrado de Augusto” según los especialistas en la materia.
- Logroño (Gronio). Este topónimo deriva de la raíz celta Gronio, que significa ‘vado’, en referencia a su fundación junto al río Ebro.
- Madrid (Magrit): La capital de España tiene su origen en la palabra árabe Magrit, que evolucionaría años después a Magerit en el castellano antiguo. Su significado, según las principales hipótesis, es que Magrit está relacionado con el término magra "cauce de un río".
- Málaga (Malaka): El nombre de Málaga proviene indiscutiblemente de los fenicios quienes la bautizaron como Malaka. Luego evolucionaría al romano Malaca y al árabe Malaqa.
- Melilla (Mliliat): Para los fenicios esta ciudad autónoma era llamada Rusadir aunque los árabes decidieron empezar a referirse a ella como Mliliat, algo más parecido al nombre actual, término que procede del vocablo beréber Tamlilt, que significa ‘la blanca’.
- Murcia (Mursah): El filósofo y politólogo romano Marco Terencio Varrón dejó por escrito que el nombre provenía de Myrtea, una palabra derivada del latín Myrtus, en referencia al arbusto llamado así. Sin embargo, también es probable que provenga de término árabe mursah "fortaleza".
- Ourense (Auriense): El origen de esta provincia podría encontrarse en la voz romana Auriense “ciudad del oro”, nombre que le dieron los romanos en referencia a la gran concentración de este metal que el río Miño arrastraba siglos atrás.
- Oviedo (Urbs y vetus). Existen varias teorías con respecto a su origen. Una de las más conocidas sugería que el término provenía de la unión de urbs y vetus, que en latín significa 'ciudad vieja'. Otra sugería la suma de ovis y etum, que significaría 'lugar de ovejas'.
- Palencia (Pallantia): Esta ciudad fue fundada por el pueblo romano de los vacceos como Pallantia, un término que se traduce como ‘campos del río’, aunque también se indica que podría significar “cerro amesetado” debido a su lugar geográfico.
- Las Palmas de Gran Canaria (Las Palmas): El nombre de la provincia esta perfectamente ligado con el de su capital, Las Palmas de Gran Canaria. Gracias al palmeral existente en la zona tanto urbe como región cuentan con este topónimo. Ya en el siglo XV recibió el nombre de El Real de Las Palmas.
- Pamplona (Pampilona). El nombre apareció por primera vez en una obra escrita del geógrafo griego Estrabón. En ella se refería a la ciudad como Pompelón, el nombre que le dieron los romanos y que era la ciudad más importante del pueblo de los vascones. El topónimo significa ‘ciudad de Pompeyo’ y durante siglos ha recibido varias declinaciones como Pampilona, Pampalona, Pampelone, Pampeluna, Pampilo o Pamplon.
- Pontevedra (Pontem veteram): Para encontrar el origen del nombre de la capital debemos acudir al término latino pontem veteram, traducido a “puente viejo” que otorga el topónimo de la región y urbe.
- Salamanca (Salamantica): Aunque se desconoce el significado preciso del nombre original de la capital, esta fue identificada como Salmantica en su etapa celtibérica del siglo IV a.C.
- Santa Cruz de Tenerife (Tenerife): El 25 de julio de 1797, día de Santiago el Mayor, cuando las tropas del almirante Horacio Nestor fueron derrotadas por los soldados españoles. En reconocimiento, se bautizó como Santa Cruz de Santiago de Tenerife. Por su parte, Tenerife se compone de los vocablos tener, relativo a ‘monte’ e ife, que significa ‘blanco’.
- Segovia (Seghos): Existen varias teorías. Antiguamente se creía que su origen se remontaba al topónimo Segobriga hasta que se descubrió una ciudad con ese nombre en Cuenca. En la actualidad, su origen parece estar relacionado con la palabra celta Seghos, que significa ‘victoria’ y ha sido encontrada en varias textos y monedas.
- Sevilla (Spal): La ciudad más importante del sur de España debe su nombre a Spal, una palabra tartessa que significa “tierra llana”. Esta evolucionó a Hispalis en la época romana, donde con los árabes se actualizó a Ishbiliya, la más parecida a nombre actual.
- Soria (Doria): Aunque no exista uniformidad en los posibles orígenes del nombre de la ciudad la principal hipótesis planteada se encuentra en que el topónimo proceda de Doria, nombre de un castillo propiedad de un capitán griego llamado Dórico.
- Tarragona (Tarraco): Cuando las legiones del general romano Escipión fundaron Tarraco en el año 218 a. C., sobre lo que era la antigua ciudad ibera de Cissis, se cree que dieron este nombre aunque esto último no cuenta con una teoría unánime. Se dice que el nombre se construye a partir de Tar (brava), Raco (línea de tierra) y Ona (más grande que). Por lo tanto, según esta hipótesis, Tarragona podría definirse como ‘Costa Brava’ o ‘Tierra brava
- Teruel (Ter y Uel): El nombre de Teruel proviene de un acrónimo ibérico formado por el vocablo Ter que significa ‘límite’ y uel, que significa ‘huella’ o ‘línea’. Por tanto, el significado de Teruel sería línea fronteriza.
- Toledo (Toletum): Originaria del nombre dado por los romanos, Toletum, en árabe pasaría a denominarse Tulaitula que evolucionó al topónimo que hoy día conserva.
- Valencia (Valentia): Valencia proviene del latín Valentia, es decir, ‘valentía’. La ciudad fue el lugar donde el cónsul Julio Bruto decidió asentar a varios soldados veteranos. Más tarde, los árabes mantuvieron el nombre de Balansia para el reino, mientras que la ciudad pasaría a llamarse Madinat al-Turab, que significa 'ciudad de polvo'.
- Valladolid (Balad al-Walid): Entre las principales teorías acerca del nombre de la zona, la capital castellanoleonesa podría derivar del árabe Balad al-Walid, algo así como “Puebla de Walid”, en referencia al califa omeya Walid I.
- Zamora (Semure): Para algunos historiadores, el nombre proviene de la época romana cuando se bautizó bajo la denominación de Ocellum Duri, que significa ‘los ojos del Duero’. Para otros historiadores en cambio, el origen se encuentra en la etapa visigoda, citada como Semure, que luego pasaría a denominarse como Azemur y finalmente Samura por los árabes.
- Zaragoza (Medina Albaida Sarakosta):Su nombre es una deformación de la palabra Caesaraugusta, en honor al emperador romano César Augusto. El topónimo fue evolucionando a través del árabe, pasando a llamarse Saraqusta y Medina Albaida (ciudad blanca). Finalmente, tras la reconquista en 1118, la ciudad se llamó Saragoça, evolucionó a Çaragoça hasta que terminó por convertirse en Zaragoza.