Al igual que con los castillos conservados por la Península Ibérica, ocurre con la gran cantidad de puentes antiguos que existen en España. Después de época romana, fue durante la Edad Media cuando se construyeron gran cantidad de puentes en tanto que servían para la comunicación a ambos lados de los ríos. Además, en torno a ellos se configuraban los pueblos para vivir del comercio, genera una expansión en las poblaciones y en consecuencia, que estas pudieran progresar. Si este verano quieres aumentar tu conocimiento cultural e histórico de España, te contamos cuáles son algunos de los puentes medievales más bonitos de España.
1. Puente de Cangas de Onís (Asturias)
El puente de Cangas de Onís, también conocido como "puentón" es una construcción situada sobre el río Sella a su paso por Cangas de Onís, y que separa los concejos de Cangas de Onís y de Parres, de tal forma que pertenece la mitad a cada concejo. Este "Puentón" es uno de los símbolos de Asturias y su importancia histórica reside en que forma parte del escudo de Cangas de Onís, junto a la cruz sobre la media luna invertida que recuerda la victoria sobre los musulmanes en la batalla de Covadonga. Además, en 1931 fue declarado Monumento Histórico Artístico.
También resulta curioso el hecho de que este puente también es denominado como "puente romano" aunque no data de esta época. En cambio, se trata de una construcción medieval de tiempos del reinado de Alfonso XI de Castilla. Destaca por su famoso arco peraltado y otros dos arcos menores que son desiguales. También hay que tener en cuenta que este puente se sitúa en la calzada romana que antiguamente unía las localidades de Lucus Asturum (el actual Lugo de Llanera) y Portus Victoriae (la actual Santander). Además, probablemente este puente fue construido sobre otro anterior, que sí sería de época romana.
2. Puente de la Reina (Navarra)
Puente de la Reina es una villa y un municipio español de la Comunidad Foral de Navarra, que se encuentra situado en la merindad de Pamplona, en la comarca de Puente la Reina. Concretamente, se sitúa en el valle de Valdizarbe, a 24 km de la capital de la comunidad, Pamplona. Este lugar recibe este nombre a causa del puente románico, uno de los ejemplos de arquitectura civil más interesantes del Camino de Santiago en Navarra.
Se encuentra edificado sobre el río Arga y tiene unas características muy específicas: en primer lugar, una longitud de 110 metros; en segundo lugar, una calzada de 4 metros de anchura, y finalmente, toda esa estructura se encuentra sostenida sobre 7 arcos de medio punto, uno de ellos bajo tierra, así como por 5 pilares.
En cuanto a su origen, puede que se remonte al siglo XI y fuese mandado construir por orden de doña Mayor, esposa del rey Sancho el Mayor. Otros estudios determinan que podría haber sido un proyecto de doña Estefanía, esposa del rey García de Nájera.
3. Puente Viejo o de la Muza (Balmaseda, Vizcaya)
Balsameda (Valsameda en euskera) es un municipio español de la comarca de Las Encartaciones y primera Villa por fundación del territorio histórico. Este pueblo se encuentra situada la provincia de Vizcaya, a 32 kilómetros de Bilbao. De entre todas las construcciones, destaca el Puente Viejo o Puente de La Muza como uno de los testigos más longevos del paso del tiempo en Vizcaya. Se trata de una construcción de naturaleza medieval, concretamente los estudios comparativos de las piedras apuntan a que es probable que pertenezca al siglo XII o al XIII.
Durante la Edad Media, en esta zona, el Puente Viejo cumplía funciones estratégicas: servía para el cruce de los ríos y al mismo tiempo, tenía funciones fiscales, puesto que implicaba el cobro del clásico tributo medieval que imponían muchas urbes de la época.
4. Puente de Camprodón (Girona)
El puente Nuevo de Camprodón se encuentra situado en el municipio homónimo, en la provincia de Girona. Se trata de un antiguo puente medieval construido sobre el río Ter, justo después de su confluencia con el Ritort, que separa la Villa de Arriba de la Villa de Abajo.
En cuanto a su origen, probablemente este puente fuese construido entre 1196 y 1226, y rehecho en parte en el siglo XIV, para dar paso al camino de herradura que conducía a la Cerdaña. Posteriormente, también tuvo que ser restaurado: en 1930 y probablemente por Jeroni Martorell.
En cuanto a sus características: se trata de puente de un solo arco, hecho con piedra y de doble pendiente (denominado de lomo de asno). Además, se encuentra unido a una torre de defensa, donde está el antiguo portal de Cerdaña. Fue declarado Bien Cultural de Interés Nacional y se encuentra incluido en el Inventario del Patrimonio Arquitectónico de Cataluña.
5. Puente de Roda de Isábena (Aragón)
El puente románico de Roda de Isábena cruza el Río Isábena cerca del municipio homónimo, en la provincia de Huesca, Comunidad autónoma de Aragón. Con respecto al origen de este puente, habría más dudas sobre si se trata de una construcción de época romana o perteneciente a la Edad Media. Sin embargo, sobre lo que no habría dudas es sobre la importancia que este puente tuvo en época medieval en tanto que formaba parte de la ruta Jacobea desde Suils hasta Capella. También llama la atención de este puente cómo fue construido: fue levantado a puntero, una técnica rápida y muy eficaz durante la época (siglo XII).
6. El Barco de Ávila (Ávila)
El Barco de Ávila es una localidad y un municipio español situado en la provincia de Ávila, comunidad autónoma de Castilla y León. En esta localidad nos encontramos con un puente que merece ser visitado. Si bien es cierto que también habría dudas sobre su origen, probablemente la construcción originaria se dio en época romana. Sin embargo, fue destruido durante la Guerra de Independencia y tuvo que ser reconstruido en el siglo XII. Lo que no se reconstruyó fue una torre que se conoce que anteriormente tenía, puesto que quedó sumergida en el río y únicamente quedan algunos restos. Fue entonces en esta segunda edificación cuando se le dio un estilo románico. En cuanto a otras características, tiene una longitud de 125 metros.
7. Puente de Frías (Burgos)
Frías es una localidad burgalesa situada a 81,4 kilómetros de la capital de la provincia. Este lugar llama la atención por poseer un puente de carácter medieval, construído sobre el río Ebro, y sin duda, unos de los puentes medievales más bonitos de Esp. La importancia de la época de este puente radica en que pasa por él la calzada romana, una de las vías de comunicación existentes para comercio entre la meseta y la zona de la costa del Cantábrico.
En cuanto a sus orígenes, pertenece al siglo XIII a consecuencia de la repoblación del pueblo realizada por Alfonso VIII, predominando el estilo gótico. Posteriormente, ha tenido varias reformas en los siglos XIV, XVII, XVIII y XIX.
8. El Puente de San Martín (Toledo)
En Toledo nos encontramos con el El Puente de San Martín, de época medieval y construido sobre el río Tajo. Al igual que el anterior, data del siglo XIII y toma el nombre de la parroquia en la que fue edificado, la de San Martín. Como dato curioso, probablemente se tomó como referencia para su construcción al famoso puente de Alcántara, aunque evidentemente con cambios debido a la mayor anchura del Tajo. En cuantoa su posterior vida, hacia 1355, sufrió de las consecuencias humanas, concretamente de una orden de Pedro I de Castilla para prender fuego a las puertas del puente y posteriormente, en 1368 volvió a sufrir daños.