Este 2024 será un año que Joaquín Torres (54 años) nunca olvidará. Si 2023 terminó de la peor forma para el reconocido arquitecto, estos meses no le han dado ninguna tregua. Todo comenzó el 5 de diciembre cuando sufrió un fatal accidente en moto que le ha obligado a pasar por quirófano hasta en tres ocasiones. 

A este revés de salud también hay que sumar su crisis matrimonial con Raúl Prieto (48), de la que han salido reforzados, y el triste fallecimiento de su madre, Joaquina, tras una larga enfermedad y que concluyó con una guerra familiar con su hermano pequeño, Julio. 

Parece que poco a poco, el arquitecto vuelve a retomar la normalidad y ya está dejando atrás algunos de los episodios más dolorosos de su vida. En el plano profesional, su estudio de arquitectura, A-Cero, continúa siendo un referente en el sector y le sigue dando muchas alegrías. Ahora ha dado un paso más y ha iniciado una nueva etapa empresarial. 

Tal y como él mismo anunció en su perfil de Instagram, donde acumula más de medio millón de seguidores, A-Cero se lanza al mundo inmobiliario y ha puesto en alquiler una propiedad de lujo en la conocida plataforma Airbnb. Se trata de una villa diseñada por el estudio de Joaquín Torres y que se encuentra ubicada en una de las urbanizaciones más exclusivas de Madrid. 

"La vivienda consta de aproximadamente 2.800 m2 construidos, distribuidos en tres plantas, sobre una parcela de 10.000 m2", explica el anunciante en la citada web de alquileres temporales. Esta lujosa vivienda, que no deja indiferente a nadie, está preparada para recibir a 10 huéspedes que quieran vivir la experiencia. 

Esta son todas las comodidades con las que cuenta: cocina completa, gimnasio, sala de reuniones, un gran garaje e incluso una biblioteca. Son seis dormitorios con un total de 10 camas. Pero esta experiencia que propone Joaquín Torres y su equipo no es para todos los bolsillos. De hecho, sólo los más afortunados pueden acceder a ella. 

Los precios van variando en función de la temporada del año en la que se quiera reservar. La estancia mínima es de tres noches y no hay tiempo máximo. Por ejemplo, pernoctar la próxima semana, del 18 al 21 de noviembre, tiene un precio total de 5.913 euros (1.440 euros la noche); y una semana después, del 25 al 28 de noviembre, la cuantía asciende a 9.074 euros (2.250 euros la noche). 

En diciembre, los precios son similares. Quienes quieran pasar aquí el puente de la Constitución, Joaquín Torres sube el precio para estos días a 3.150 euros la noche y un total de 12.586 euros. Es en la época navideña donde se pueden encontrar los precios más caros: 3.600 euros la noche y 14.343 euros en total. Cabe puntualizar que en estos precios ya está incluida la comisión de servicio de la plataforma y los gastos de limpieza. 

Por el momento, todas las fechas están disponibles para reservar y no hay valoraciones. No es Joaquín Torres quien gestiona personalmente este anuncio, sino Rubén Díaz, quien forma parte del equipo de A-Cero. 

Uno de los aspectos más positivos de esta finca es que está permitida la entrada de mascotas y está equipado con todas las facilidades para ser una experiencia que quede para el recuerdo de los huéspedes. Las imágenes facilitadas muestran grandes espacios, todo bien decorado y aprovechando al máximo cada estancia del hogar. Cuenta con una piscina exterior y una interior y para los más deportistas, también hay una pista de tenis. 

Una lenta recuperación

Joaquín Torres ha hecho partícipes a sus seguidores de cómo ha ido avanzando su proceso de recuperación mientras ha continuado, en la medida de lo posible, con su día a día. "Aunque de un modo u otro obviamente nunca me he ausentado de nada, sí quería compartir con vosotros mi felicidad de (por fin, ha costado) volver a recuperar mi vida, la rutina... y espero que ahora sí o sí ya sea definitivo y rápido", ha escrito recientemente el arquitecto en un vídeo en el que aparece todavía con muletas. 

Fue a principios del pasado mes de octubre cuando anunció que debía pasar de nuevo por quirófano. La prótesis de cadera que le fue colocada durante el mes de abril se desplazó y tuvieron que quitársela para colocarle una nueva.