Daniel Sancho (30 años) ha sido condenado este jueves, 29 de agosto, a cadena perpetua en Tailandia por el asesinato del colombiano Edwin Arrieta. Pese a que en las últimas horas el chef había manifestado que estaba preparado para "lo mejor y lo peor", finalmente esta sentencia la ha encajado entre lágrimas.
Así lo asegura la revista Semana. El hijo de Rodolfo Sancho (49) "ha derramado muchas lágrimas" tras leerse el fallo, porque no se creía la resolución. Tampoco la madre del joven español, Silvia Bronchalo (49), presente en la vista en Koh Samui, ha podido evitar la emoción. Madre e hijo están "abatidos".
El único que ha mantenido la entereza ha sido Rodolfo Sancho, el cual ha manifestado a las puertas del juicio que "seguirán luchando". En otro orden de cosas, según recoge EFE, Daniel Sancho, roto y deshecho ha pedido al juez quedarse en la prisión tailandesa de Samui, donde se encuentra desde el pasado año.
[Daniel Sancho, condenado a cadena perpetua por asesinar y descuartizar a Edwin Arrieta]
No obstante, el magistrado ha indicado que la ley no permite esa posibilidad y que la decisión no depende de él. Sancho ha pedido quedarse en el mismo centro penitenciario tras escuchar el fallo del magistrado en el Tribunal Provincial de Samui, que le ha declarado culpable de asesinar de manera premeditada a Arrieta el 2 de agosto de 2023 en la vecina isla de Phangan.
Tras dictar el fallo, que ha considerado a Sancho culpable de los tres delitos de los que le acusaba la Fiscalía -asesinato premeditado, ocultación del cadáver y robo de documentación ajena-, el juez ha preguntado si había alguna duda, momento en el que el español ha insistido en inglés al magistrado que había actuado "en defensa propia".
La condena a cadena perpetua ha sido rebajada de la pena de muerte por su colaboración con la justicia y por el trabajo de la defensa durante el juicio, según las fuentes.
Entonces, el reo, que solo se había declarado culpable de la ocultación del cadáver, por el descuartizamiento de Arrieta, se ha abrazado a sus padres, presentes en la sala, el actor Rodolfo Sancho y la analista de inversiones Silvia Bronchalo, al escuchar la condena.
El juez, que ha llevado el caso desde el principio y cuya identidad no se hace pública, ha indicado que "la ley no permite" el traslado de prisión, y que la decisión en cualquier caso no dependía de él. Según han deslizado este jueves, día 29, a EFE desde la prisión de Samui, Sancho ya ha regresado por el momento a esa cárcel, que "solo permite alojar a presos con condenas de hasta 15 años. Si no, debe ser trasladado".
"Estamos esperando la orden de traslado, que aún no ha llegado", han asegurado, añadiendo que no saben a qué penitenciario del país podría ser enviado ni cuándo, si bien se prevé que pueda ser inminente.
Sancho podría ser trasladado a la cárcel de Surat Thani, provincia a la que pertenece Samui, de mayor seguridad y con alrededor de diez veces más reos -5.400 frente a 542, según el departamento de correccionales-.
La vista ha empezado alrededor de las 10 de la mañana, hora local, (03.00 GMT), se ha prologado aproximadamente una hora y cuarto y el juez ha leído la sentencia durante una hora en tailandés.
Alice Keartjareanlap, la asesora legal de confianza del padre del condenado, el actor Rodolfo Sancho, se ha encargado de ir traduciendo la sentencia a Daniel Sancho, según ha podido saber EFE.
De 30 años y nieto a su vez del también actor Sancho Gracia, Daniel Sancho era prácticamente desconocido hasta que salió a la luz el pasado año el crimen por el que hoy ha sido condenado. Se formaba para chef y trabajaba como relaciones públicas cuando conoció a través de las redes sociales, a Edwin Arrieta, cirujano plástico colombiano de 44 años, meses antes de que ambos quedaran en Phangan el mismo día de los hechos.