Carmen Cervera (81 años) es una de las mujeres más ricas de España, según Forbes. La prestigiosa revista señala que la viuda del barón Heinrich Hans August Thyssen-Bornemisza tiene una fortuna de casi 1.400 millones de euros, lo que la convierte en una de las personas más ricas del país y en una de las más influyentes en el mercado del arte.
La baronesa Thyssen es la propietaria de la colección de pintura expuesta en el Museo Thyssen de Madrid, heredada de su último marido. Además, cuenta con inversiones en compañías como Omicron Collections Limited, Nautilus Trustees Limited o Imigolf. Todos ellos, señala Forbes, negocios que crecieron en 2023 y por los que su riqueza aumentó el año pasado.
Además, Tita Cervera cuenta con un importante patrimonio inmobiliario, valorado en alrededor de 100 millones de euros, entre el que se encuentra una casa en Andorra, una residencia de vacaciones en Sant Feliu de Guíxols (Girona) y varias viviendas en Madrid y Barcelona. Sin embargo, la baronesa Thyssen necesita patrimonio líquido, por lo que ha puesto a la venta una de sus propiedades: una impresionante mansión en Palma de Mallorca.
La casa en Palma de Mallorca.
No es la primera vez que la baronesa Thyssen intenta vender el inmueble. La primera vez que Tita Cervera colgó el cartel de 'Se vende' en su mansión de Palma de Mallorca fue en 2017. Y es que, pese a ser una auténtica joya, no encuentra dueño. Por ello, aunque en un principio se pedían 6,5 millones de euros por la vivienda y, hasta este año, 5,5 millones, la baronesa se ha visto obligada a bajar de nuevo el precio a los 4.950.000 euros.
La baronesa también puso a la venta previamente otras propiedades como La esclusa y Villa Favorita, su fabulosa mansión en Lugano (Suiza). En este caso, su vivienda en la isla balear es una de las más especiales para Tita Cervera por su situación, El Terreno, un barrio de Palma de Mallorca muy cerca del famoso Castillo de Bellver.
La mansión de Tita Cervera, por dentro
La propiedad, disponible en Idealista, cuenta con 730 metros cuadrados construidos, repartidos en seis amplias habitaciones, cinco baños y una gran terraza en la azotea con impresionantes vistas al mar y a las montañas. Además, tiene un amplio jardín privado de 2.300 metros cuadrados con árboles frutales, plantas mediterráneas y una espectacular piscina. También cuenta con una casa para huéspedes independientes.
La casa fue construida en 1873 y ha sido restaurada, tal y como informa el portal inmobiliario. La agencia encargada de su comercialización, Living Blue Mallorca, explica que la mansión es "un excelente ejemplo de la belleza arquitectónica de aquella época, con techos altos con vigas a la vista, arcos, puertas y persianas blancas que enfatizan el carácter de casa de verano".
Una de las viviendas de la mansión de Carmen Cervera.
Y es que, a pesar de contar con más de 150 años de historia, la vivienda está en perfecto estado de conservación. Cuenta con elementos de yesería y un porche con columnas y techos altos con vigas a la vista, que también se pueden encontrar en el interior de la casa, destaca el portal inmobiliario.
La propiedad cuenta con calefacción central y una chimenea para las épocas más frías del año. La mansión, señala Idealista, "es un sueño hecho realidad para los amantes de lo extraordinario" y "una oportunidad única para vivir en una casa señorial de otra época mientras se disfrutan de todas las comodidades modernas".
La terraza en la azotea de la vivienda.
Tita Cervera y Heinrich Hans August Thyssen-Bornemisza compraron la propiedad en 1990, según publica Vanitatis, 17 años después de su construcción, con el objetivo de pasar parte de sus vacaciones de verano. Sin embargo, la pareja no llegó nunca a vivir en ella. La mansión estuvo vacía y fue alquilada durante varios años. Además, ha estado a la venta en otras dos ocasiones. La primera, en 2017, cuando salió al mercado por 6,5 millones de euros.
Adquirir esta vivienda no es algo apto para cualquier bolsillo, pero, sin duda, se trata de una oportunidad única debido a su reciente rebaja, de más de un millón y medio de euros respecto a su primer precio. A la baronesa Thyssen, además, parece urgirle su venta. Está por ver si la reducción del precio surte efecto.