Dani Fernández (32 años) lleva toda la vida vinculado con el mundo de la música. De pequeño participó en Eurojunior y llegó a representar a España en el concurso, donde quedó en cuarto puesto. Años más tarde formaría parte de la banda juvenil Auryn, que se desintegró en 2016.
Su esfuerzo y su lucha han sido el motor de su exitosa carrera musical en la que, poco a poco, va ganando más fans. No ha parado de trabajar, aunque sí que se ha dado un descanso en los últimos meses para centrarse en su reciente paternidad.
Ahora está de regreso en el escenario y le espera por delante un verano cargado de conciertos y mucha música, pero de la mano de su mujer, Yarea, y su hija, Belice, a quien incluso ya le ha dedicado una de sus canciones más especiales. EL ESPAÑOL ha podido hablar con él en la alfombra de Los40 Primavera Pop.
¿Cómo se encuentra?
Muy bien. Muy feliz y contento. Con ganas de volver aquí a toca, para mí es como volver al cole en septiembre. Llevo muchos meses sin salir a tocar y estoy hasta nervioso. El WiZink Center siempre me trae muy buenos recuerdos y momentos especiales. Volver a tocar con mi banda es algo a lo que no me acostumbro.
¿Qué le pides a la primavera?
Le pido volver a salir a tocar, que es lo que más feliz me hace. También va a servir para ver cómo lo llevo. Va a ser la primera vez que salgo de casa teniendo a mi hija ahí esperándome y tengo incertidumbre de ver cómo lo voy a llevar, pero con muchas ganas. Desde octubre, en Zaragoza, no toco y eso es lo que me gusta.
¿Fue especial ese último concierto?
Muy especial. Nada más salir se me pusieron los pelos de punta al ver a tanta gente. Me dijeron incluso que no podía empezar el concierto porque la policía tenía que echar a gente de lo llena que estaba la plaza.
¿Cómo lleva el tema de la paternidad?
Bien, la verdad. Pensaba que iba a ser más desastroso por como soy conmigo mismo. Tengo una relación bastante de amor odio conmigo mismo y soy muy desastre en mi vida personal. Pero con mi hija me estoy comportando mejor de lo que esperaba. Estoy bastante atento. Desde el minuto uno estoy bastante disponible para mi mujer, porque es imposible llegar a un 50, 50. Al final ella tiene prácticamente todo el peso, le está dando el pecho. Tengo que estar ahí para apoyarle lo máximo e intentar acercarme a ese 50 lo máximo posible.
¿Le está inspirando esta nueva experiencia para la composición de nuevas canciones?
Ya estaba prácticamente el disco entero cerrado, pero creo que todavía necesito experimentar un poco más como padre para poder hablar de ello. Es verdad que estoy haciendo buenas canciones. Es un disco que me costó mucho empezar a hacerlo y ahora estoy muy orgulloso, creo que va a ser el mejor, así mirándolo con objetividad.
Su último disco, Entre las dudas y el azar, ha sido un éxito. ¿Tenía miedo de no llegar al mismo punto?
Ese era uno de los problemas que tenía a la hora de ponerme a crear. Pensaba: "¿Cómo voy a superar este?". Es que le tengo mucho cariño a ese disco. Las canciones nuevas siguen siendo la esencia Dani Fernández, con ese corazón sacándolo fuera y espero que le llegue a la gente.
La carta de presentación, Todo cambia, ha dejado el listón muy alto.
Joder, es que yo no esperaba esto. Me está dando una alegría enorme porque además es una canción que yo había compuesto hace tiempo, entonces a lo mejor estaba un pelín desencantado. Bueno, no desencantado, sino que la había escuchado tantas veces que la había aborrecido un poco. Ha sido escucharla en la radio y en la gente... me está dando muchísimas alegrías.
¿Qué siente cuando ve a la gente cantando sus canciones?
Es algo con lo que se sueña. El hecho de que la gente se inspire en ti para poder hacer canciones es algo con lo que siempre sueñas. Cantar canciones de otros es lo que yo he hecho desde pequeño. Me emociona mucho cada vez que escucho a alguien cantando una canción que he compuesto.
¿Cómo ha cambiado Dani Fernández desde los inicios hasta ahora?
Sigo siendo bastante parecido. Intento siempre llegar a todas las cosas y que no se me pierda la ilusión por la música. Creo que ahora no soy tan inocente, sobre todo con el tema contratos. Me han dado muchos palos en ese tema, entonces ahora estoy cogiendo las riendas cada vez más de mi proyecto para dejar atrás todo lo que he vivido anteriormente, sobre todo con mi banda, que muchas cosas no podía hacerlas yo porque al final éramos muchos. Ahora cada vez tengo más personalidad para poder decir que no a muchas cosas, siempre he sido un chico que le ilusiona tanto la música que muchas veces decía a todo que sí y ahora estoy aprendiendo a decir que no.