La vida de Julián Contreras (38 años) no ha dejado de cambiar en los últimos tiempos y continuará haciéndolo en los próximos meses. EL ESPAÑOL ha podido confirmar que la estancia del hijo de Carmina Ordóñez en Cuenca es sólo temporal y que ya está buscando otros alquileres en otros puntos geográficos de España.
En uno de sus últimos directos, el ahora youtuber aseguró que le daba igual la localización a la que trasladarse. El programa Así es la vida ha apuntado que su búsqueda de un nuevo hogar se estaría centrando en Córdoba e incluso han contado con el testimonio de una propietaria a quien habría llamado interesado en su vivienda.
"Nos contactó una señora que decía que él era su cliente. Como una agente. Querían unos planos de la vivienda porque hay una de las personas que tiene limitaciones visuales. Resulta que era el padre", comienza explicando la no casera de Julián Contreras.
La dueña de la propiedad da más detalles de la conversación que tuvo lugar hace unos días. "No tenía unos ingresos demostrables porque, obviamente, le pedimos tema de ingresos. Nos dijo que ella podía hacer de avalista o podía hacer un seguro de alquiler del que se harían cargos ellos mismos. Nos pareció muy raro y, entonces, no le seguimos enviando información", señala esta persona.
Sin embargo, el interés de Julián Contreras no terminó aquí y lo intentó de nuevo, pero esta vez fue él quien se puso al teléfono, pero desde el anonimato. "Le hablaba de la discreción, que estaba harto de la gente. Pensábamos que era un Premio Planeta porque claro... con tanta historia, esperábamos a Vargas Llosa. Mi madre no quería animales, pero accedió a un gato y a un perro", recuerda.
Finalmente, tuvo que dar su identidad. "Mi madre le dijo: '¿Con qué nombre te guardo?' Y ya dijo: 'Julián, Julián Contreras'. Le di un codazo a mi madre y le dije: 'Mamá, el de Carmina Ordóñez". Ambas estaban enteradas de la situación que atraviesa el hermano de Cayetano Rivera (47) y lo que supuestamente debe a su excasera.
"Mi madre, que es bastante dura, se dejó prácticamente seducir. Lo que nos da verdaderamente rabia es que vaya a engañar a otra persona. Le pedíamos 1.150 euros. No ponía ningún problema con el precio porque como no iba a pagar... le parecía perfecto", reconoce entre risas esta persona.
A partir de este momento, la conversación terminó y las negociaciones se rompieron. Sin embargo, Julián Contreras decidió enviar un mensaje para disculparse por la situación y explicar el momento que está atravesando: "Quiero transmitirte la desazón que siento... Me hacía mucha ilusión vivir allí y, aún con todas las garantías, me es imposible. No soy culpable de nada y vivir con este lastre es, además de injusto, muy limitante".
Sí fue desahuciado
Aunque Julián Contreras ha negado en todo momento que fuese desahuciado de su última vivienda, su excasera, Aránzazu, ha aportado el documento judicial que lo confirma. "Dese traslado de la demanda a la parte demandada requiriéndola para que en el plazo de diez días desaloje el inmueble, pague al actor o, en caso de pretender la enervación, pague la totalidad de lo que deba o ponga a disposición de aquel en el tribunal o notarialmente el importe de las cantidades reclamadas en la demanda y el de las que adeude en el momento de dicho pago enervado del desahucio", explica el documento.