Un tribunal tailandés ha aprobado, este domingo 6 de agosto, la petición de la Policía para arrestar a Daniel Sancho Bronchalo (29 años), detenido por el asesinato del colombiano Edwin Arrieta Arteaga el pasado martes en un hotel de la isla de Koh Phangan, en el sureste del país.
La orden ha sido aprobada por el Tribunal Provincial de Koh Samui tras la prueba de ADN de los restos humanos hallados dentro de un saco de fertilizante en un contenedor de basura la noche del asesinato de Arrieta Arteaga, ha informado el comisario de la Policía Provincial de la 8ª Región, el general Surapong Thanomji.
Los restos, encontrados el pasado jueves, pertenecen, efectivamente, al ciudadano colombiano de acuerdo con los resultados de la prueba genética realizada.
Daniel Sancho permanece detenido en la comisaría de Policía de Phagan, acusado de asesinato, ocultación de cuerpo y de manipulación del mismo al desmembrar el cuerpo del fallecido para ocultar sus restos.
El joven, hijo del actor Rodolfo Sancho (48), fue detenido al día siguiente del hallazgo de los restos y acabó confesando el crimen, de acuerdo con el relato policial recogido por el Bangkok Post.
Habla el tío de Daniel
A la espera de conocer más detalles sobre lo ocurrido, Europa Press ha podido hablar este domingo con el tío del protagonista de esta historia, Rodrigo Sancho.
Rodrigo Sancho ha confesado estar triste y muy preocupado por la situación de su sobrino. A pesar de haberse comentado que el actor habría tomado un avión en cuanto se enteró de la noticia, Rodrigo no conocía si esto era verdad, aunque confirmaba que ese era su deseo.
Como no podía ser de otra manera, el tío de Daniel ha querido estar junto a otra de las personas más afectadas por la noticia: la madre del actor, Noelia Aguirre. Espera poder darle el apoyo necesario en estos momentos tan críticos y ayudarle a superar esta dura etapa de la mejor manera posible.
A pesar de todo, Rodrigo Sancho confía en la Justicia y en que toda esta situación se solucione pronto, aunque sostiene no estar al tanto del último comunicado de su hermano, en el que pedía respeto para la familia.