Una semana después de abandonar la Unidad de Cuidados Intensivos y pasar a planta confirmando así su mejoría tras el fatal accidente a caballo que sufrió el pasado 28 de mayo en El Rocío, se confirma la mejor de las noticias para Sergio Rico (29 años). Su mujer, Alba Silva (30), no se ha separado de su lado en ningún momento y se ha encargado siempre de dar las últimas noticias sobre el estado del futbolista.
Esta vez, la joven ha confirmado que la evolución del futbolista es muy favorable: "Estamos muy positivos, muy contentos con toda la evolución y felices, pero bueno, poco a poco avanzando y es muy importante que tiremos para adelante".
La mujer del deportitsa ha confesado que muy pronto podría recibir el alta hospitalaria: "Ojalá. Ojalá pero todavía no nos han querido decir día exacto, estamos a la espera de algunas pruebas y bueno, con paciencia. No quiero tampoco ahora tener prisa". Por otra parte, también ha reconocido que su marido no recuerda nada tras el accidente: "No lo recuerda, no lo recuerda. Casi mejor que no lo recuerde porque ese episodio tendremos que olvidarlo".
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Además, ha asegurado que retomarán poco a poco el proyecto profesional que tenían pendiente y tuvieron que dejar a medias tras el accidente: "Quizás no lo pueda hacer como lo habíamos pensado desde el principio pero es verdad que bueno, algo haremos para terminarlo de alguna manera, lo acomodaremos".
Finalmente, Alba ha explicado que no sabe si volverán a París tras recibir el alta, aunque asegura que el equipo se ha preocupado en todo momento del estado de Sergio Rico: "Es que no lo sé, sinceramente. Ahora mismo estamos un poco a expensas de lo que va ocurriendo y conforme vayan sucediendo las cosas iremos tomando decisiones".
La joven no se ha separado del lado de su marido desde el accidente ocurrido en El Rocío. Casi dos meses visitando cada día a su esposo en el Hospital Universitario Virgen del Rocío en Sevilla donde se encuentra ingresado desde entonces. Y atendiendo a la prensa a diario con una amabilidad única: "Para recibir cariño tienes que darlo. Entiendo que es vuestro trabajo, así que tenía claro desde el principio que no cuesta nada, y tengo muchísimo que agradecer a la gente, al hospital, a los médicos, a mis amigas, a mi familia y a la gente que ha estado ahí escribiendo cada día un mensaje de cariño".