Aumenta la preocupación en torno al estado de salud de María Teresa Campos (81 años) después de que sus hijas explicasen, con gran tristeza, este pasado fin de semana, el motivo de la ausencia de su madre en la capilla ardiente de Laura Valenzuela.
Mientras que la hija mayor de la legendaria comunicadora, Terelu Campos (57), confesaba que "la situación de mi madre no es para tratarla públicamente y merece el respeto y la intimidad que debe tener con la edad que tiene y las condiciones en las que está", Carmen Borrego iba un paso más allá.
La colaboradora revelaba que la veterana presentadora ni siquiera se había enterado del fallecimiento de su gran amiga: "No se lo hemos dicho porque en estos momentos no es conveniente. Ella no puede hacer nada porque lo primero que diría sería 'llevadme' y no creo que esté en condiciones de estar ahora mismo aquí".
No se trata de la primera vez que las hijas de María Teresa hablan del delicado momento que está viviendo su madre. Carmen y Terelu han pedido respeto a los diferentes medios de comunicación de nuestro país, rogando que, por favor, no se difundan imágenes actuales de cómo se encuentra la recordada comunicadora, cuya imagen pública quieren preservar por encima de todo.
Algo en lo que ha vuelto a incidir Terelu este pasado martes, 21 de marzo, durante la entrega de los Premios Fearless, una gala en la que ha sido reconocida por visibilizar la lucha contra el cáncer, recibiendo el galardón de manos de su hija, Alejandra Rubio (22).
Sea como fuere, una noche muy especial para Terelu, en la que la presentadora ha definido con crudeza a su madre como una "señora enferma y anciana", quizás para ver si así cesa la persecución que ha sufrido en los últimos tiempos por parte de diferentes paparazzi que buscarían revelar en exclusiva cómo se encuentra María Teresa.
En esa línea, Terelu ha insistido, un tanto emocionada: "A mi madre lo que hay que hacer es respetarla, no perseguirla para hacerla una foto. Que los compañeros directores de revistas no compren fotos de señoras enfermas y ancianas. Y nada más".
Respecto a su premio, Terelu ha asegurado que está "cogido con pinzas porque he superado un cáncer, pero estoy en proceso de superar el segundo todavía. Es muy importante cuando trabajas en un medio intentar normalizar una enfermedad que padecen millones de personas en el mundo y reivindicar lo que necesitamos para seguir estando vivas".
Viva y en uno de sus mejores momentos profesionales, la presentadora confiesa que si pudiese retroceder varios años le diría a su 'yo' que "hizo muy bien en tomar distancia para poder volver en condiciones. Cuando llevas tantos años trabajando, y te metes en un bucle que no te encuentras, lo mejor es tomar distancia, hacer otras cosas y volver con más ganas".
En otro orden de cosas, la hija de María Teresa Campos también ha aprovechado su último acto público para hablar de Gabriela Arrocet, quien ha definido, desde su debut en Supervivientes, a las hermanas Campos como "borregas".
Algo que Terelu asegura que no le ha ofendido para nada porque "es un homenaje a mi padre, por lo que me parece muy bien". Y remacha: "No la conozco ni me conoce, como no hable de oídas... y cuando se habla de oídas se yerra siempre. El secreto es imaginar lo que estoy diciendo por dentro. Por dentro me he quedado en la gloria, que lo hago mucho".
Sin embargo, y aunque afirma que le da igual que la hija de Bigote Arrocet la critique a ella, sí advierte que "no toque a quien no tiene que tocar" -su madre- porque, como asegura, "no la conoce tampoco de nada ni está en disposición de hablar de una persona anciana y enferma".