El Festival de Cine de Venecia ha contado con una gran representación española. Después de que Georgina Rodríguez (28 años) acaparara todas las miradas con un estilismo que emulaba a la actriz Audrey Hepburn, son varias las personalidades de nuestro país que han llegado a La Mostra. La última, Penélope Cruz (48), una de las máximas representantes del séptimo arte y quien el año pasado se convirtió en la ganadora de la Copa Volpi por su papel en Madres paralelas.
La mañana de este domingo, 4 de septiembre, la de Alcobendas desembarcaba del mítico vaporetto veneciano junto al director Emanuele Crialese, de L'inmensità, película nominada al León de Oro en La Mostra veneciana y que ella misma protagoniza. Con una imagen promocional de este largometraje, de hecho, la de Alcobendas anunciaba su inminente llegada al festival. "Venecia, here we go", escribía Penélope Cruz horas antes en su perfil de Instagram.
Su presencia, como cada temporada, era una de las más esperadas. No solo por su impecable trabajo en el séptimo arte, sino también por su apuesta estilística. En esta ocasión, una vez más, firmada por Chanel, marca de la que es embajadora desde hace varios años y que la viste en sus momentos más importantes.
Para su primera participación en la 79º edición del Festival de Cine de Venecia, Penélope Cruz ha escogido un espectacular vestido veraniego muy trendy que pertenece a la colección Resort 2023. Se trata de un modelo largo y falda fluida con un original estampado en colores negros, blancos y rojos que se mezcla con el logotipo de la maison, dispuesto a lo largo de la prenda. Un detalle que tiene mucha presencia en el street style y que la galardonada actriz ha sabido llevar con elegancia.
El modelo se completa con un delicado cinturón oscuro y llama la atención, sobre todo, por su cuello halter, un tipo de escote que sobresale en las principales firmas de moda desde hace varias temporadas y que le ha permitido presumir de hombros y brazos.
Penélope Cruz ha combinado este favorecedor el mítico bolso acolchado, de cadena y en color negro, que vende Chanel desde hace varias temporadas. Además, con unas gafas de sol oscuras que se retiró poco después de su desembarco, mientras posaba en el photocall de La Mostra. Los zapatos han pasado desapercibidos, ya que el largo del vestido los cubría por completo.
Como joyas, la actriz ha elegido diferentes piezas en tonos plata y dorado. En concreto, unos pendientes de aros y varios anillos que le han dado el toque final a su estilismo. En esta ocasión, Penélope ha preferido llevar la melena suelta y al natural y, en cuanto al maquillaje, ha elegido los tonos suaves.
Este año, Penélope Cruz llega a La Mostra como protagonista de un película italiana, en la que interpreta a una madre, un papel muy habitual en su trayectoria. Se trata de su regreso al cine italiano, con el que tiene una estrecha relación y donde se desempeñó siendo muy joven.