Con buen ánimo y esperando estar plenamente recuperada en un breve espacio de tiempo, Toñi Moreno (49 años) ha dado a conocer el contratiempo que la ha obligado a pasar por el hospital en pleno periodo vacacional. La presentadora ha querido compartir este pequeño problema de salud con sus seguidores a través de las redes sociales para restarle importancia y evitar que se preocupen.

Tumbada en la cama del hospital y haciendo el símbolo de la victoria, Toñi ameniza el vídeo en el que cuenta lo que le ha pasado con una divertida canción de María Peláe que sirve para reflejar que se encuentra perfectamente. "Aprovechando las vacaciones para operarme de la rodilla. Los autónomos me entenderán. Es una intervención ambulatoria, así que esta noche espero estar en casa", escribe.

No pierde la sonrisa, ataviada con la típica bata de hospital y ocupando su tiempo de convalecencia hasta recibir el alta mostrando la cómoda habitación en la que se encuentra. Estaba sola, no era hora de visitas, aunque alguien tendrá que ir a recogerla, porque lo más probable es que deba guardar reposo durante unos días.

Este pequeño contratiempo, como ella misma explica, le ha pillado en pleno descanso de verano. Por suerte, durante los últimos días ha podido disfrutar de la playa con su pequeña, Lola, y algunos familiares y amigos. Entre ellos los padrinos de la niña, Pepa y Juan Carlos, como la periodista misma dice: "De las pocas elecciones acertadas de mi vida".

Aunque en su publicación de Instagram deja claro que estas son las vicisitudes que tienen que afrontar los trabajadores por cuenta propia, a ella no le faltan proyectos profesionales. El 10 de agosto estrena su nuevo podcast titulado Porque la vida no viene con instrucciones, donde se presenta así: "Soy Toñi Moreno, periodista y madre, aunque debería decirlo al revés, soy madre y periodista". Además, sigue triunfando en Mediaset.

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Desde que nació su hija, muchas son las cosas que han cambiado y, aunque reconoce que ha sido un proceso duro, está pasando por una de las mejores etapas de su vida. Por Lola ha decidido ponerse en forma y ha recurrido a un entrenador personal para mejorar su estado físico. "Él es el responsable de que pueda coger en brazos a mi hija. Por ahora no está mal. Dice que estoy muy cerca de convertirme en Jennifer Lopez, seguiré creyendo en los imposibles. Es mi sino. Además de un gran profesional es una maravilla de persona", escribía en su Instagram poco antes de pasar por quirófano.