Hablamos con el autor de 'Los Falcó': "Fueron unos señores hasta para encajar las infidelidades"
Romualdo Izquierdo repasa la vida de Carlos y Fernando: de sus relaciones con Isabel Preysler y Marta Chávarri a su amistad con Juan Carlos.
5 julio, 2022 02:33Hermanos, marqueses y protagonistas de una época dorada de la vida social, donde la aristocracia brillaba más que nunca. La azarosa vida sentimental de Carlos y Fernando Falcó ocupó portadas de la prensa del corazón prácticamente hasta su muerte, ambos en 2020 con siete meses de diferencia. Ahora, un nuevo libro titulado Los Falcó ahonda en su perfil más íntimo y humano y repasa no sólo sus relaciones con mujeres como Isabel Preysler (71 años), Marta Chávarri (62), Esther Koplowitz (71) o Esther Doña (44), también aspectos menos conocidos de su vida.
EL ESPAÑOL habla con su autor, el periodista Romualdo Izquierdo, que los define como "los últimos caballeros" por su educación exquisita y su galantería a la hora de afrontar momentos delicados. Su historia es una historia de amor, traiciones y lealtades. Por eso, cuando en la editorial le hicieron este especial encargo, a las dos semanas de que muriera el marqués de Cubas "no lo dudé, me di cuenta del potencial que tenían ambos personajes. Al final su historia es la radiografía de la aristocracia el último siglo".
Los pasajes del libro ayudan a rememorar aquella época dorada, pero las nuevas generaciones de la aristocracia han cambiado mucho. Prefieren las redes sociales y los programas de televisión.
Bueno, imagino que estamos hablando en concreto de Tamara Falcó o de Isabelle Junot, la mujer de Álvaro Falcó. La aristocracia siempre ha sido una clase social que ha procurado ser muy discreta, guardar las formas, cualquier cosa que signifique tener protagonismo público chirriaba. Pero no pasa nada porque siempre ha habido aristócratas, como la duquesa de Alba, que ha hecho lo que le ha dado la gana. Carlos y Fernando son una excepción por cómo llevaron el título y porque estuvieron en los titulares toda la vida y supieron manejar su relación con la prensa. Y es cierto que les divertía en ocasiones. Ahora estamos en una época de proyección pública que este tipo de personajes como Tamara Falcó, a la que yo respeto y me parece que lo está haciendo muy bien, tienen que dar. El título ahora mismo te da cierto pedigrí para poder posicionarte socialmente o públicamente a través de redes sociales o como influencer o concursante de televisión. Tener título sirve, es útil.
Ha cambiado también el poder de la aristocracia, que no es el mismo que hace décadas, incluso su relación con la realeza se ha desdibujado.
Por supuesto no tiene ahora el mismo poder real, ni político, ni económico, como pudo tener en épocas anteriores. Los aristócratas pudieron desarrollarse económicamente con Franco, pero luego en la transición fueron conscientes de que les tocaba un perfil bajo. El rey Juan Carlos fue muy inteligente en ese momento, no necesitaba corte y la aristocracia estorbaba. Y Felipe VI también ha dado claves suficientes de que no la necesita. Podrá mantener relaciones personales, pero poco más.
Tanto Carlos como Fernando eran amigos personales del rey emérito, ¿sufrieron con la situación que ha vivido Juan Carlos en los últimos años?
Ambos han sido amigos del rey emérito hasta el final, ha habido épocas en las que se han visto menos, pero esa relación se ha mantenido porque siempre tuvieron muy clara su lealtad hacia él. Ellos nunca iban a hablar mal de su Rey, le tratarían de justificar. A Fernando le produjo un enorme dolor el hecho de que don Juan Carlos tuviera que irse fuera.
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Su vida amorosa fue muy mediática y los dos sufrieron sendas traiciones, Marta Chávarri engañó a Fernando con Alberto Cortina e Isabel Preysler a Carlos con Miguel Boyer, ¿cómo lo vivieron?
Son caballeros hasta en eso. Después de sufrir la humillación pública, nunca han hablado mal de ellas y ellas nunca de ellos. La infidelidad de Isabel Preysler fue pública, Carlos Falcó lo aguantó con estoicismo, pero fue muy humillante para él. Eso te da la medida de la calidad humana del personaje.
Ambos le dieron muchos quebraderos de cabeza a su madre, Hilda Fernández de Córdoba, especialmente por su fama de donjuán...
Para mí, Hilda ha sido el gran descubrimiento de la novela. Era una señora que sabía cuál era su posición, también ha sido una adelantada a su época, porque, por ejemplo era una gran cazadora en una España en que las mujeres no podían hacer nada y ella despiezaba jabalís con sus propias manos. Tuvo que aprender a moverse en un mundo de hombres. Era el referente de la familia y para sus hijos fue siempre el puntal y se mostró comprensiva con sus devaneos amorosos. Cuentan que fue el gran apoyo de los dos en los momentos más duros, tanto en el de Isabel Preysler como en el de Marta Chávarri. De esta última no le gustaba que fuera siempre tan corta...
De las relaciones sentimentales que han tenido los Falco, ¿cuál diría que ha sido la más importante para cada uno, la mujer de su vida?
No me atrevería a apostar por ninguna, diría que una suma de todas. En el caso de Carlos apostó por Esther Doña, su última pareja, hasta el final. A mí me da la sensación de que nunca ha sabido estar solo, ha necesitado una mujer a su lado.
En el caso del matrimonio del marqués de Cubas con Marta Chávarri, ¿él podía intuir ese final a causa de la diferencia de edad?
Hombre yo creo que sabía dónde se metían y lo que hizo fue aguantar el ritmo que le imponía la relación con Marta Chávarri. Era una niña de veinte años que estaba acostumbrada a divertirse con sus amigos y él le seguía el ritmo hasta que pudo... Todas las noches hasta las seis y las siete de la mañana un día sí y otro también. Es evidente que sabía la relación tan desigual en la que se metía, por supuesto. Pero hay que apostar. Marta era una mujer espectacular.
En el libro también repasa el episodio de violencia doméstica en el que se vio envuelto Carlos Falcó. ¿Cree que él lo manejó bien dando la cara y asumiendo las cosas?
Lo hizo como un señor, porque es una acusación muy seria. Que tú llames a Carlos Falcó para decirle que tienes esa información, te lo reconozca abiertamente y te de los datos fue un gesto de valentía que dejó a todo el mundo impresionado.
¿Qué cree que pensaría el marqués de Griñón si pudiera ver los desencuentros entre su viuda, Esther Doña, y sus hijos tras su muerte?
Depende de lo que entendamos por desencuentros... Yo creo que lo han hecho muy bien, porque estaba claro que no había feeling entre ellos, pero han sabido llegar a un acuerdo y han firmado un documento de confidencialidad. Los hijos del marqués han tenido siempre un papel muy bajo a nivel mediático, excepto Tamara, porque hay que recordar que ella no es sólo hija de Carlos Falcó, sino de Isabel Preysler.
Tamara precisamente es quien ha heredado el título de marquesa de Griñón, ¿casa el título con su faceta mediática como influencer?
Yo creo que sí, perfectamente y no le interrumpe ni le molesta en su vida profesional, al contrario, le ayuda. La transición terminón con el endiosamiento de la aristocracia, pero ellos han seguido utilizando el título hasta el final. Tamara también, ella va de marquesa e imagino que Isabelle Junot, también.
¿Cree que a Carlos Falcó le hubiera gustado Íñigo Onieva, el novio de su hija Tamara?
Pues no creo que se metiera mucho en su relación. Yo creo que respetaría mucho su vida. Fíjate, me estoy imaginando más a Isabel Preysler dándole consejos que Carlos.