Las banderas multicolor, las relaciones entre personas del mismo sexo, el transformismo o la transexualidad son conceptos que están cada vez más asentados. Sin embargo, no hace mucho tiempo ser gay, lesbiana o tener una orientación o identidad no normativa era sinónimo de exclusión, acoso e incluso cárcel.
Para llegar hasta el punto actual han tenido que pasar muchos años, pero también ha sido necesaria la visibilidad gracias a decenas de personas que lucharon por defender sus gustos, sus vidas.
Algo posible gracias a nombres tan famosos como el de David Delfín, Carmen de Mairena o Isabel Torres, pero también otros menos conocidos para el público general, pero igual de importantes, como los de Pepe Espaliú, Andrés Lewin o Enrique Naya y Juan José Carrero.
EL ESPAÑOL recoge a gran parte de esas mujeres y hombres que con su vida y obra reclamaron la visibilización del colectivo LGTBIQ+.