En la madrugada del lunes 4 de abril, el mundo del cine, el teatro y la televisión se vistió de luto. La querida y admirada actriz Silvia Gambino fallecía a la temprana edad de 57 años a causa de un cáncer contra el que llevaba luchando dos años y medio y del que casi nadie fuera de su entorno tenía conocimiento.
Su deseo era precisamente ese, que la información de su enfermedad no se filtrase. Su familia, con su madre y su hermana Zoraida al frente, los dos únicos parientes que Gambino tenía en España -pues sus orígenes son italianos- cumplió con sus anhelos hasta el último de sus suspiros.
EL ESPAÑOL ha contactado con Zoraida Gambino, quien hasta estos días no ha tenido fuerzas para atender a ningún medio de comunicación porque aún no asimila aún la dura pérdida de su hermana, a la que ella consideraba su "columna de vida". Al otro lado del teléfono, con la voz entrecortada y al borde de las lágrimas, casi sin poder contener la emoción, la también mejor amiga de la intérprete conversa con este periódico sacando a relucir su hermoso deje italiano.
Silvia no lo tenía, pero usted sigue conservando el acento de sus orígenes. ¿Cuándo llegaron a España y como fue su vida aquí?
A España llegaron primero mi padre y mi madre, después volvieron a Italia y ahí nació mi hermana, Silvia, que después se vino de vuelta a España. Y en mi caso al revés, yo nací en España y me fui un tiempo a Italia.
¿Cómo recuerda aquellos momentos de gloria de su hermana Silvia en Televisión Española cuando cosechaba audiencias millonarias con sus Matrimoniadas?
¡Lindísimo! Conocimos a José Luis Moreno también. Fue muy lindo, de verdad. En aquella época yo estuve aquí durante un par de años y después regresé a Italia. Mi hermana era muy feliz trabajando allí. Se lo merecía.
¿Cómo la recuerda? Todos conocíamos a la gran actriz, pero ¿cómo era como persona?
(Zoraida rompe a llorar) Mi hermana era muy buena. Aunque no se sepa, ella ayudó a muchísimas personas. Ayudaba también a los animales. Yo he heredado a sus gatos, que ella los acogía, los adoptaba, los salvaba de la calle. Me he hecho un tatuaje de un gato con forma de S, por Silvia. Mi hermana era una muy buena persona, nadie podía decir nada malo de ella. Todo el mundo la quería muchísimo y yo he podido recibir ese cariño.
Se publicó que estaba preparando una obra de teatro como protagonista cuando se enteró de su enfermedad, del cáncer, ¿cómo vivieron aquello?
Mira, quiero decir algo. Nadie de mi familia autorizó a nadie para dar la noticia de su muerte. Esto fue algo que se podía haber evitado absolutamente porque yo estaba siguiendo la voluntad de mi hermana. Además, fue todo muy fulminante. Mi hermana se sintió mal y pasó todo en 15 días. La persona que dio la noticia no estaba autorizada.
¿Se refiere a Alberto Closas, su exmarido?
Primero, que ellos nunca estuvieron casados. Esa es otra información falsa. Y segundo, te puedo decir que nadie lo autorizó. Yo lo digo ahora porque ha pasado un poco de tiempo y, te repito, he seguido la voluntad de mi hermana, que no quería que nadie supiera nada sobre su enfermedad. Yo he seguido todo lo que ella me pidió. Era su voluntad ser incinerada y que nadie la viera. Ella sufrió mucho, luchó contra el cáncer dos años y medio, y no tres, como se ha publicado. Empezó con este cáncer cerca de los pulmones, superó todo, con una quimioterapia muy fuerte y después, cuando pensábamos que este bicho había pasado, volvió.
¿Qué decían los médicos?
Los análisis decían que estaba bien, le dijeron que volviera a los cinco meses para hacerse nuevos análisis otra vez. Pero, desafortunadamente, este bicho se reprodujo veloz.
¿Por qué se decidió hacer algo íntimo cuando ella merecía un gran homenaje?
Todo se sobrevino por la filtración de la noticia. Ella falleció el lunes, yo tenía que hacer todos los asuntos burocráticos de su muerte, no lo quise hacer el martes, y fue el miércoles cuando se le hizo el homenaje. Vino gente que nos mostró mucho cariño, pero también hubo personas que dijeron cosas absolutamente falsas.
¿Qué personas y qué dijeron?
El primero fue Alberto. Quiero que escribas que mi hermana nunca estuvo casada con él ni con nadie, que conste y subráyalo. No tenía ninguna relación con él desde hacía años. No sé quién le contó la noticia y por qué lo puso así en redes sociales, contando que tenía cáncer y todo. Es una cosa que mi hermana no quería contar y que tendría que haberla dicho la familia.
Pero ¿cree que hubo mala intención por parte de Alberto Closas al filtrar la información?
Bueno, ganas de publicidad.
¿Publicidad?
Hombre, si no esperas ni tres o cuatro horas para dar una noticia así, pues... lo siento, pero no me gustó. Tengo que decirlo. Podría haberme escrito a mí un mensaje antes de hacerlo, que yo lo conozco.
¿Qué compañeros de profesión estuvieron con ustedes ese miércoles?
El actor José Manuel Pardo, las hermanas Valverde, Loreto y Marta, que la querían mucho, compañeras suyas que empezaron con ella en la profesión cuando tenía 20 años. Silvia siempre me hablaba muchísimo de ellas, de verdad, fueron majísimas. Los actores y el director de Bellas y bestias, Paco Rodríguez, el director Fermín Ortiz. Muchos no sabían que estaba enferma, muchos otros me escribieron. Personas que las querían de verdad, sus mejores amigos, el director José Manuel Esteller, de Noche de fiesta.
Jorge Javier Vázquez fue productor de la obra de teatro Bellas y bestias, que la protagonizó su hermana Silvia. ¿Os mostró él las condolencias?
A nosotras no nos escribió, pero sí que le dedicaron un espacio en Sálvame y yo se lo agradezco mucho. Sus condolencias fueron en la televisión y fue muy lindo, la verdad, a mí me encantó y lo publiqué en mis redes sociales.
Si tuviera que elegir tres adjetivos para definir a su hermana, ¿cuáles serían?
¿Tres? Tengo muchos más, pero ayúdame a traducir de italiano a español. Buena persona, irónica, perfeccionista, pasional, profesional... Cuando empezaba a trabajar, bueno, ¡buf! se llevaba 24 horas con los guiones, aunque los memorizaba en dos segundos, ¿eh? Esa capacidad siempre la tuvo. Era leal con las personas, con los animales, respetuosa, nunca dijo nada malo de nadie, siempre respetó la privacidad de las personas... Mi hermana Silvia era única, era mi columna de vida.
Ha mencionado antes a su madre, ¿cómo se encuentra ella tras el fallecimiento de su hija?
Bien, se encuentra bien, en el sentido de que estaba feliz de estar aquí con ella. Lleva ya seis o siete años aquí en España. Pero en este momento todavía no nos lo creemos. Yo sigo haciendo cosas y siempre espero que, de un momento a otro, entre por la puerta. Todavía no lo hemos asimilado, ni yo ni muchos amigos suyos.
[Más información: Silvia Gambino, su discreta vida en los últimos meses: el proyecto que no pudo hacer y su petición familiar]