Esta semana ha sido una de las más duras para todo el mundo del periodismo y la televisión. El pasado miércoles, Mila Ximénez perdía la batalla contra el cáncer y eran muchos los rostros conocidos que acudían a su último adiós. Sus hermanos, Manolo, Concha y Encarna, y su hija, Alba Santana (37), no se han separado ni un solo momento de la periodista, y ahora siguen unidos como en el primer momento.
Este fin de semana, los hermanos de Mila Ximénez han salido a comer juntos a un restaurante de la capital y a su salida han atendido a los medios de comunicación, demostrando de nuevo la educación y el respeto que tienen a esta profesión. Ha sido Manolo el que ha hablado para las cámaras y ha confesado que ahora es momento de descansar: "Cada uno tenemos que recuperar nuestras vidas". Además, ha sostenido que no hay más que decir porque ya han expuesto públicamente todo lo que sentían: "Está todo totalmente dicho".
Manolo ha dejado claro que están muy orgullosos de su hermana por la persona que ha sido y por cómo se ha enfrentado a esta enfermedad: "Siempre lo hemos estado, no ahora". Y añade, a modo de agradecimiento: "Hemos recibido muchos mensajes". Toca descansar tras estos intensos días: "De momento, nos vamos a casa a descansar, que falta nos hace, queremos cerrar este capítulo que ha sido muy largo y muy duro, vamos a intentar descansar".
Hace unos días, Manolo aseguró que su hermana lo dejó todo muy bien estipulado y decretado en vida: "Mila solamente quería estar en casa y con su familia y eso lo hemos cumplido a rajatabla. Hemos cumplido lo que ella nos pidió, hemos hecho todo lo que hemos podido y aquí estamos para decirle adiós". Y añadió: "Mila ha sido fuerte siempre, y entonces hasta el último momento ella nos ha hablado, nos ha dicho a cada uno lo que quería decirnos, como deberíamos hacer las cosas incluso; y cuando ya ha creído que ya todos lo habíamos entendido y que todos sabíamos lo que ella quería, ha llegado el final".
Lo cierto es que los hermanos de Mila Ximénez han demostrado su gran amor por la colaboradora. Los tres lo dejaron todo, aparcaron sus vidas personales y profesionales para arropar y estar con Ximénez en sus últimos días. No es la primera vez que los Ximénez de Cisneros se enfrentan a la enfermedad. En el año 2015, Concha, hermana de Mila, recibía el mismo diagnóstico que ella encajó hace un año. Tenía cáncer. "Quiero que todos pensemos que ganaremos a este bicho que se llama cáncer. Cada día me doy cuenta de lo importante que sois en mi vida", comentaba la colaboradora con una foto de ella junto a sus hermanos.
Tan solo un año después, en 2016, era su hermano Manolo, su gran apoyo y la persona que ha vivido junto a ella largas temporadas en Madrid, quien sufría esta maldita enfermedad. En un acto de extrema generosidad, Manolo guardó en secreto que estaba enfermo y decidió posponer su operación para no alterar los planes de su hermana Mila y su participación en Supervivientes. Afortunadamente, ambos han vencido, ahora están sanos y han sido uno de los grandes apoyos de su hermana pequeña, Mila, hasta el último de sus días. Ahora, tras la triste muerte de su hermana, todos podrán, poco a poco, retomar sus vidas. Ese punto de partida que siempre se comienza cuando un ser querido se va.
[Más información: La 'otra Marbella' en la que vivió Mila Ximénez pero que nadie vio]