El pasado 10 de mayo fue uno de los peores días para Antonio Tejado (35 años), cuando no el peor. El sobrino de María del Monte (59) despedía a su padre, Juan Carlos Tejado, a los 62 años, tras no poder superar la neumonía bilateral que padecía. El empresario hostelero fallecía en un hospital de Sevilla tras varias semanas ingresado. Había contraído el coronavirus, al igual que su hijo Antonio, quien lo pasó asintomático. Su pérdida ha dejado rota y devastada a toda la familia.
Tal y como se desliza a JALEOS a través del entorno de Antonio Tejado, "nadie se podía imaginar este final. Juan Carlos era un hombre fuerte y nada podía con él. Están todos en shock". Su hijo Antonio está devastado, "sin creérselo todavía". Su dolor es hondo, pues ambos batallaron contra la enfermedad durante semanas. No entiende Tejado cómo se torció todo. Su relación con su padre era muy especial, iba mucho más allá de la típica paternofilial.
Estaban muy unidos y Juan Carlos siempre tuvo devoción por Antonio. "Mira que tenía más hijos, pero con su Antonio era algo inusual", se confía al otro lado. Tejado está pasando sus peores días, apenas saca fuerzas para atender las condolencias: "No tiene ánimo para nada. Nada le consuela. Está muy arropado. Su tía María está muy pendiente diariamente".
En estos aciagos días, los amigos de Antonio están también muy encima de él. Tiene pocos, pero buenos: "Hace un tiempo hizo una importante criba y sacó de su vida a personas que no le hacían bien". Esta misma persona apostilla: "Pocas personas saben la lucha interior de Antonio en estos últimos años, desde que confesó su adicción a las drogas". Fue en 2019 cuando Tejado tocó fondo, hizo su confesión más complicada y se volcó en su familia. En ese momento, su padre Juan Carlos fue capital en su recuperación: "El hecho de que Antonio se pusiera a trabajar en el negocio de la familia, -la cervecería Puerto Plata, en Sevilla- fue muy importante. Tener una obligación hizo que se centrara". Por eso mismo, se desliza a este medio que la familia "seguirá al frente" del bar familiar. Como hasta ahora. Será una forma de honrar la memoria de Juan Carlos Tejado. Cuenta quien bien lo sabe que el padre de Antonio Tejado es un empresario hecho a sí mismo, que incluso en los peores momentos de la crisis económica supo no rendirse y luchar por su negocio. Fue un hombre "muy querido y reconocido" en Sevilla.
En esa línea, se desliza que los hermanos tan solo aparcan su dolor para consolar y arropar a su madre, María José Vargas: "Ella está que no está, en cuestión de semanas se ha visto sola, sin su marido. El hombre que la ha acompañado toda su vida, el pilar de la familia". Juan Carlos Tejado contrajo coronavirus justo después de Semana Santa. Lo hacía a la vez que su hijo, Antonio, con quien se confinó en casa para pasar juntos la enfermedad. Mientras que el joven superaba el virus sin ningún tipo de síntomas, su progenitor, Juan Carlos, terminaba ingresando en un hospital sevillano para finalmente no salir.
Juan Carlos Tejado era hermano de la artista María del Monte. En abril de 2020, hace tan sólo un año, María del Monte despedía a otro de sus hermanos, Antonio Tejado, a causa de la misma enfermedad. La intérprete de Cántame desveló en el programa Mi casa es la tuya de Bertín Osborne (66) que no le habían contado a su madre, Bibiana, de 95 años, que había perdido un hijo. En tan sólo 13 meses, su progenitora ha perdido a un segundo hijo por el coronavirus y ella, a un segundo hermano.
Las adicciones de Antonio
En 2019, Antonio Tejado desvelaba su problema con las drogas. Tejado fechó sus adicciones a su salida de Gran Hermano DÚO, cuando inicia una breve relación sentimental con Ylenia Padilla (32). Entonces, hace su particular propósito de enmienda y decide poner remedio a su problema. Por eso extrañó a muchos que, a las pocas semanas, regresara a los debates de GH VIP y, por ende, a la televisión, los focos y la noche. Pretextaba necesitar volver a su día a día, con calma y precaución, pero no ha podido ser. Unas imágenes de Tejado en la madrugada madrileña riñendo con su pareja sentimental de forma acalorada vieron la luz y fueron el punto de inflexión.
Reconoció entre los suyos "que se había precipitado, que creía que podía sobrellevarlo todo, pero se ha dado cuenta de que no". Eso sí, tal y como reconoció en su despedida definitiva de Sálvame, el hecho de haberse embarcado en una nueva vida no es óbice para que deje de hacer lo que le gusta y advertía que se lo seguirá viendo cantando, bailando y pasándoselo bien con amigos. Así desveló su problema: "Se trata de un episodio de alcoholismo grave que arrastro desde hace bastantes años por no ser capaz de solucionar mis problemas vitales".
Y añadía: "Estuve tres días sin dormir a base de cocaína y whisky. No recuerdo nada de lo que hice esos días. Me podía haber dado un infarto". Un declive que tuvo su inicio cuando el colaborador se separó de Alba, la madre de su hija, y a la que siempre ha calificado como "el amor de su vida". Asegura que, cuando salió de la casa de GH DÚO comenzó a beber "hasta una botella de whisky diaria, para paliar el dolor del alma", porque no conseguía olvidarse de ella. Un bucle pernicioso al que puso nombre.
[Más información: Antonio Tejado, roto de dolor en el funeral de su padre, fallecido a los 62 años por Covid-19]