Desde que el 8 de septiembre falleciera el cantante Camilo Sesto, la vida de los suyos dio un vuelco de 180 grados. En concreto, la de su hijo, Camilo Blanes Ornelas (36 años), Camilín para los medios de comunicación. El joven cantante se afincó en España, en la casa de su padre -que terminó siendo legalmente suya- y, al principio, bajo el cuidado de su madre, Lourdes Ornelas. Ella no se separaba de él en los primeros meses en Madrid, lo guiaba y asesoraba, pero con el tiempo, y el testamento sobre la mesa, Camilín hizo más vida independiente.
JALEOS informó en su momento de que la madre andaba buscando casa cerca de su hijo, pues él optaba por vivir solo, a su aire, tan solo bajo la atención de los guardeses de su padre, que se han convertido en las únicas personas que lo frecuentan diariamente. Pero pronto brotaría la realidad: Camilo Jr. empezó a salir por la noche; según su madre, se descontroló y no reconocía su problema. "Mi hijo está enfermo", fueron las palabras de una madre preocupada. Él salió públicamente a desmentirla alegando que no tiene ningún problema. Ahora, este periódico ha conocido cómo pasará el joven la Navidad.
Tal y como se informa, el intérprete se acuerda mucho de su padre y no tiene ánimo de festejar nada. "Quiere estar tranquilo, en casa, sin mucho jolgorio", se informa. Se enfrenta así a su Navidad más difícil y solitaria. La intención de su madre es que ambos pasen las navidades juntos, pero "todavía no hay nada decidido". En el fondo, se habla de cierto "un enfado" de Camilín con su madre: no le sentó nada bien esa entrevista tan alarmista. "Estoy sano y sobrio", se empeñó en enfatizar.
Habrá que ver cómo pasan finalmente las navidades y si Camilín se aviene y anima y se une a su madre. En esa línea, deslizan que Lourdes teme que su hijo "se vuelva a descontrolar" en estos días tan propensos al festejo: "Quiere tenerlo cerca y controlado. Está sufriendo mucho y solo pide que su hijo entre en razón". Ella solo espera y desea que todo vuelva a ser como antes.
Lourdes, madre desesperada
Fue a finales de noviembre cuando la revista Hoy Corazón llevaba a su portada las desgarradoras palabras de Lourdes Ornelas: "Mi hijo tiene un problema. Está enfermo y necesita ayuda". Las alarmas saltaban cuando Camilo Blanes era visto el pasado 24 de noviembre deambulando por las calles del madrileño barrio de Chueca desorientado, sin poder articular palabra y negándose a recibir ayuda, en ocasiones de forma agresiva.
La exmujer de Camilo Sesto aseguraba que esta situación "ya ha pasado muchas veces" y vaticina que "se volverá a repetir". Así lo relataba, asegurando que está "desesperada" y que la vida de su hijo corría peligro. Según su versión, el joven estuvo tres días desaparecido, no durmió en su casa y volvió "sin sus documentos, sin sus tarjetas de crédito y sin su teléfono". Su madre le estuvo buscando sin éxito por todos los sitios que suele frecuentar y pide ayuda para sacarle de esta situación.
Desde la angustia de esta madre se apunta que el problema de Camilín no es nuevo. Ornelas confesaba que el joven ha estado en tratamiento en varias clínicas tanto en Madrid como en México, donde residía hasta la muerte de su padre, aunque en ninguna ha conseguido curarse, por lo que la madre del joven ha decidido recurrir a la vía legal para ayudarle: "He contratado a uno de los mejores abogados de España y voy a tomar cartas en este asunto", revela Lourdes, que no está dispuesta a rendirse: "Soy una superviviente. Voy a luchar hasta el final con todas mis fuerzas para sacar adelante a mi hijo", concluía. Hoy, parece que el objetivo de Camilo Blanes es claro: hacer olvidar esa portada y esas declaraciones.
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