Esther Doña (42 años) se ha sometido a una artrotomía, una intervención en la que se abre una determinada articulación para tratar alguna dolencia que se ha originado en la misma. La cirugía tuvo lugar en el hospital universitario Quirón de Madrid el pasado jueves 14, según informa la revista Semana.
Su marido, el marqués de Griñón (82), se mantuvo a su lado durante todo el tiempo que duró su hospitalización en una exclusiva y discreta habitación de la primera planta del centro médico.
Carlos Falcó ha sido un apoyo fundamental para Esther Doña durante el tiempo que ha durado su hospitalización.
Desde que contrajeron matrimonio en julio de 2017, la pareja ha tratado de llevar una vida tranquila y alejada de los medios de comunicación, razón por la que esta operación ha pasado desapercibida para la mayoría de la prensa. Las únicas ocasiones en que los marqueses han abandonado este exilio mediático ha sido para acudir a algún evento de la alta sociedad, como fiestas de amigos o estrenos en el Teatro Real de Madrid.
La boda de Esther Doña y Carlos Falcó generó una gran polémica en su momento, razón por la que decidieron realizar una ceremonia íntima, muy discreta, en los jardines de su residencia del Palacio de El Rincón, en Aldea de Fresno (Madrid).
Preocupados por la salud de Fernando
Esther Doña no ha sido la única del entorno de Carlos Falcó que ha tenido problemas de salud este mes. Fernando Falcó y Fernández de Córdoba (79 años), tío y padrino de Tamara Falcó (37) e íntimo amigo del rey Juan Carlos (81), "se encuentra bastante delicado de salud y su familia está muy preocupada", según la información a la que ha tenido acceso JALEOS.
Este periódico ha contactado con parte de su familia más directa y han preferido no hacer declaraciones al respecto. En cambio, el propio Fernando ha dado un paso al frente: "Me estoy recuperando... Bueno, poco a poco". Un tremendo bache de salud que angustia a su entorno más íntimo, parientes y allegados.
Fernando Falcó y su sobrina Tamara en un acto público en Madrid en el año 2015.
De linaje aristocrático y vinculado a la monarquía desde tiempos inmemoriales, Fernando Falcó y el marqués de Griñón son amigos del rey Juan Carlos. Sus padres, los duques de Montellano, cedieron su Palacio de la Castellana para que allí viviera y estudiara el entonces conocido como 'el príncipe don Juanito', momento en que Fernando, Carlos y Juan Carlos compartieron pupitre.
Fernando Falcó vive desde hace meses alejado del foco mediático. La última vez en que hizo acto de presencia en un lugar público fue el pasado 6 de octubre en la boda de Fernando Fitz-James Stuart y Solís (28) y Sofía Palazuelo (28) en el Palacio de Liria de Madrid. No obstante, y al contrario que su hermano Carlos junto a su esposa, Esther Doña, el marqués de Cubas prefirió no hacer el paseíllo y accedió a la histórica casa de los Alba directamente con el coche conducido por su chófer particular.
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