Los duros momentos se van mitigando poco a poco para Eugenia Martínez de Irujo (50 años) tras la reciente muerte de tu perro, Calitin, que fue víctima del atropello de un coche. La duquesa de Montoro ha explicado ante lo medios lo sucedido y cómo ha llevado la situación, dedicando palabras de amor hacia el animal que formaba parte de su familia desde que su hija, Tana Rivera (19), tenía dos años. Su pareja, Narcís Rebollo (48) ha jugado un papel muy importante en su 'duelo'.

El director de Universal Music Spain está demostrando ser su mejor apoyo en los peores momentos. Ambos mantienen una relación sentimental que avanza muy positivamente, y en él ha encontrado todo lo que buscaba. "Me aporta muchísimo. Todo, la verdad. Risas, porque nos reímos muchísimo. Me aporta serenidad porque es un hombre muy tranquilo y nunca ve problemas, que eso es una maravilla. Me aporta conocimientos de música, que me apasiona. Me aporta mucho cariño, mucho amor", comentaba.

Añade, además, que desde que está con él la vida le ha cambiado: "Estoy muy serena, en una época muy buena y muy alegre". A pesar de su felicidad, por el momento descarta pasar por el altar, algo que no se encuentra entre sus prioridades.

Su madre, Cayetana de Alba, a pesar de que falleciera hace algo más de cuatro años, sigue estando muy presente en su día a día y está convencida de que el buen momento que está viviendo en el amor es en parte gracias a ella: "Creo que me lo ha mandado. Todo lo bueno que me viene, pienso que es gracias a ella".

Eugenia tiene cubiertas todas sus necesidades, pero lo cierto es que la exmujer de Francisco Rivera (45) reconocía públicamente que se le está haciendo difícil superar la pérdida de su perro, y es que, como ella misma ha afirmado, en ocasiones se le aparece: "No hay día que no me acuerde de él. Estando por casa es como que le veo por todas partes".

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