Ubicado en la Plaza de La Moraleja, y con más de 500 metros cuadrados distribuidos en amplias y luminosas consultas, se erige la nueva clínica del Grupo Jaén, liderada por el reconocido dermatólogo Pedro Jaén. El sabio de la piel, como muchos le llaman, ha hecho una apuesta personal para consolidar su prestigio y convertirse también en un referente en la zona norte de Madrid.
Este nuevo centro ha subido su apuesta por la medicina estética facial y corporal consolidando tratamientos estéticos ya existentes e incorporando otros con tecnología puntera para tratar arrugas, manchas cutáneas o flacidez facial, entre otras.
De todos ellos, hay uno que aunque aún es un gran desconocido para muchos de los pacientes está ganando adeptos una vez que se prueban sus beneficios. Se trata del láser fraccionado no ablativo que ayuda a mejorar las marcas y cicatrices de la piel a la vez que favorece la producción de colágena de la misma.
El doctor Jaime Company, dermatólogo de la Unidad de Láser del Grupo Pedro Jaén La Moraleja, desvela todas las claves de este láser indicado para todo tipo de pieles en una charla con EL ESPAÑOL.
¿Qué es el láser fraccionado no ablativo?
El láser fraccionado no ablativo de erbio es una tecnología que permite generar pequeñas columnas de calor en la piel. Esto estimula la formación de colágeno, con la consiguiente mejoría en la textura de la piel. Este tipo de láser permite realizar un tratamiento más seguro, ya que la piel entre las columnas de calor queda indemne, lo que además acorta considerablemente el tiempo de recuperación.
¿Para qué está indicado?
El láser fraccionado no ablativo está indicado para mejorar cicatrices de acné moderadas, cicatrices quirúrgicas y traumáticas, estrías de distensión, alteraciones texturales leves (poros dilatados) y para el rejuvenecimiento global de la piel. Puede ser útil para tratar alteraciones de pigmentación que de forma secundaria se beneficien de mejorar la calidad de la piel (melasma, daño solar crónico…).
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¿Es para todo tipo de pieles?
Este tratamiento se puede realizar de forma segura en todo tipo de pieles. En fototipos altos (pieles más oscuras), se deberá ajustar la intensidad en cuanto a densidad de canales para maximizar la seguridad del procedimiento, no generar un calor excesivo y evitar pigmentación postinflamatoria.
¿Cuándo se empiezan a notar los resultados?
Los resultados se instauran progresivamente a lo largo de las semanas siguientes al tratamiento. La mejoría de la piel es paulatina.
¿Cuántas sesiones se requieren para notar los resultados?
Es habitual la realización de varias sesiones espaciadas por un mes, con un número variable en función de las necesidades de cada paciente. No obstante, conviene valorar los resultados sesión a sesión sin pronosticar un número concreto, puesto que algunas personas obtienen muy buenos resultados en pocas sesiones.
¿Hay muchos hombres que lo demandan?
No es habitual que los pacientes, varones o mujeres, demanden este tratamiento de forma activa, fundamentalmente porque desconocen la tecnología y los beneficios que puede reportarles. Dicho esto, el grado de aceptación de este procedimiento por parte de los pacientes cuando ya lo conocen es óptimo por el bajo tiempo de baja y la mejoría patente en la calidad de la piel.
¿Qué cuidado se necesitan después del tratamiento?
Antes de la aplicación de este láser, es recomendable el empleo de crema anestésica (30-45 minutos antes) para mejorar la tolerancia. Tras el tratamiento, se puede aplicar de forma inmediata y en las primeras horas frío local para mejorar los síntomas inflamatorios. En cuanto a cuidados cosméticos, se debe aplicar una crema antiinflamatoria con antibiótico los primeros 3-4 días, acompañada de hidratación diaria a demanda. Como en todo tratamiento con láser y otras fuentes de luz, es crucial una máxima fotoprotección previa al tratamiento y las 4 semanas posteriores para evitar hiperpigmentación de la piel.
¿Cuándo se puede retomar la rutina de cuidado facial después del láser?
Una vez resuelta la rojez (apenas 2-3 días, con atenuación progresiva), se puede retomar la rutina cosmética habitual, incluidos activos transformadores como el ácido glicólico o retinoides, según tolerancia.
Los beneficios más evidentes son...
Los beneficios más evidentes a corto plazo es un efecto flash secundario a la inflamación inicial, que alisa la piel y homogeneiza la textura. A medio plazo, se consigue una ganancia de colágeno que asienta estos efectos iniciales de forma estructural.
Por último, ¿cuál es su precio?
El precio varía en función de la afección y del área a tratar, al igual que el número de sesiones. No es lo mismo tratar un área extensa en una piel afecta de estrías, que una cicatriz de cesárea aislada o la región facial por cicatrices de acné. Puede oscilar entre 250 y 550, aproximadamente, pero varía según cada caso.